say you love me ⌗ jitzu

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«Me dijeron que actúe normal, pero ¿cómo puedo hacerlo si todos me están mirando?»︎. Tzuyu camina a paso rápido tratando de ignorar los ojos de los estudiantes encima suyo. Cada paso que da es un nuevo murmullo que escucha y comienza a sentirse sofocada por la repentina atención que muestran todos sobre ella.

Lo odia.

Desde siempre ha procurado mantener un perfil bajo, lejos del interés de las personas. Le gusta vivir así, de una forma tranquila y pacífica, sin que nadie la moleste con tontos comentarios, pero ahora un solo error que cometió la mandó a estar en esta situación, la cual sabe que será difícil escapar.

Tzuyu lo único que busca ahora mismo es a Dahyun, no hay nada que más desee que ver a su mejor amiga y poder desahogarse con ella, así que cuando la ve al otro extremo del pasillo caminando hacía su dirección no puede sentirse más feliz.

—¡Tzuyu! —Dahyun exclama al divisarla y acelera sus pasos hasta que sus brazos estén alrededor del frágil cuerpo de la taiwanesa. Cuando la morena recarga su cabeza en la de su amiga sintiéndose aliviada de encontrarla, nota la tercera presencia: Minatozaki Sana.

—¿Está todo bien? —pregunta la coreana cuando se separan. Sus manos están aprisionando los brazos de Tzuyu mientras la ve con sus ojos llenos de preocupación.

—Sí. Todo resultó ser un malentendido —es lo que responde en voz baja. Sabe que más de uno de los estudiantes está haciendo un esfuerzo extra para alcanzar a escuchar lo que sea que salga de su boca así que debe ser cuidadosa.

—¡Claro que fue un malentendido! Sí hubiera sido algo malo no te hubieran llamado así tan abiertamente —a diferencia suya, Dahyun no mide el tono de su voz, aunque Tzuyu cree que lo hizo a propósito para que los demás dejen de pensar en cualquier tonta teoría que estén armando en su cabeza sobre la menor y su profesora de inglés.

—Además, hablamos de la profesora Park, ¡ella es alguien muy agradable! Esa es la razón por la que sucedió esto. Estoy segura que cualquiera de nosotros pudo haber sido llamado por una simple confusión —esta vez es Sana la que habla con total seguridad. Tzuyu lo cree; muchos se acercan a Jihyo para pedir asesorías, como ella lo hizo, pero Tzuyu está segura que aquellas personas no lo hicieron con otro motivo detrás. Esa es la razón por la que se siente culpable.

Después de escuchar tanto a Sana y Dahyun, pareciera como si el ambiente se hubiese calmado aunque sea un poco. Tzuyu puede escuchar los susurros de los estudiantes alrededor suya: "Kim tiene razón", "tiene sentido lo que dice Minatozaki", "¡Claro! Es la profesora Park. De hecho, hace dos días me regaló una paleta", "¡A mi también! Y todo por que contesté bien sus ejercicios", "la profesora es realmente alguien agradable. Dudo que haga algo así" y entre otras palabras la mitad de los alumnos comenzaron a dispersarse estando satisfechos de que la confusión se haya aclarado por fin, aunque Tzuyu sabe que algunos aún no están tan convencidos y siguen teniendo la duda plantada en su mente.

—Yo... creo que debería agradecerle a ambas —dice después de notar menos pares de ojos sobre ella. Ahora siente que puede respirar mejor.

—No hay nada que agradecer. Me alegro que, aunque sea un poco, el malentendido se haya aclarado —Sana responde regalandole una suave sonrisa que Tzuyu acepta con agradecimiento. «Dahyun tiene buenos gustos»︎, es lo que piensa.

—Dahyun, ¿podemos hablar? —Tzuyu dice jugando con sus manos notablemente nerviosa. Tanto Sana como Dahyun saben perfectamente lo que significa aquel pedido cuando se ven entre sí.

Sana es la primera en hablar de las dos diciendo que se tiene que retirar y le promete a la coreana verse en el club más tarde. Al quedar solo Dahyun y Tzuyu, la más pequeña agarra la muñeca de su contraria para llevarla a un lugar que sea solitario y cómodo para hablar. No tardan mucho en llegar a la azotea, que es un lugar donde pueden tener mayor privacidad.