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capítulo veinte.

Cinco Meses Después

Todo transcurrió tranquilo, si se podría decir, en esto meses.

SooYoung ya no estaba cerca de ellos, su relación de Alfa y Omega se fue fortaleciendo, Chris ya por poco vive en su casa. Aunque obviamente no falto la gente envidiosa, cuando dieron a conocer su relación hubo Omegas que estaban realmente celosos y molestos, que siempre que veían la oportunidad lo humillaban, al principio el azabache lo dejo pasar, pero después esas humillaciones se volvieron bromas pesadas, como encerrarlo en el baño o hacerlo tropezar apropósito, esto llego a oídos de Chris, haciendo que se enfureciera.

Un grupo de Alfas y Omegas no corrieron con un buena suerte porque se les ocurrió burlarse de él frente a Bang, ese día hubo dos Alfas golpeados, Chris les enseño a todos que pasaba si se metían con su Omega, desde ahí nadie se volvió a meter con el azabache.

Hoy era el día de su graduación, ahora todos se volverían verdaderos adultos, ejerciendo su profesión, todos estaban felices, nerviosos, nostálgicos, melancólicos y sobre orgullosos sobre si mismos.

Todos irían con sus parejas.

HyunJin y SeungMin.

MinHo y Jisung.

YeonJun y SooBin.

Irene y SeulGi.

ChangBin y JeongIn, quienes por fin se dijeron sus sentimientos, todos sus amigos los felicitaron, diciéndoles que ya era hora.

Y por ultimo Chris y Felix.

Felix se encontraba solo en su casa, arreglándose su traje mientras hablaba con su mamá por videollamada.

— Por fin voy a graduarme — Dijo emocionado el Omega mientras se arreglaba su cabello.

— Lo se hijo estoy orgullosa, me hubiera gustado estar ahí contigo — Dijo un poco triste.

— No te preocupes mamá, dentro de unos meses iré a Seúl — Trato de animarla.

— Cierto — Habló con una sonrisa mientras veía a su hijo arreglarse y caminar por su cuarto — ¿Qué tal Chris, se lo has dicho? — Preguntó.

Felix dejo de arreglarse para mirar con los ojos en grande a su madre.

— Mierda — Maldijo.

— Sin malas palabras Felix — Regaño la Omega.

— Lo siento — Se disculpo — Aun no se lo he dicho — Confesó nerviosos.

— ¿Por qué no? Se supone que son pareja, deberías decirte que te mudaras a Seúl para se jefe de la empresa — Inquirió.

— Lo sé pero lo he olvidado, ya hablare con él para buscar una solución — Le quito importancia, no quería pensar en eso ahora.

— Esta bien, pero acuérdate que tienen que conversarlo, no a ultimo momento cachorro — Regaño su madre apuntándolo a través de la pantalla.

— Si madre — Contesto, cuando iba a agregar otra cosa, su celular empezó a sonar — Me llama Chris creo que ya llego, hablamos luego — Dijo.

— Si hijo cuídate y pásala bien esta noche — Se despido con una sonrisa.

— Gracias mami, nos vemos — Dijo para después cortar y poder contestar a su Alfa — Hola Chris— Saludo.

— Hola Omega, ya estoy fuera ¿Estas listo? — Preguntó.

— Si Alfa ahora salgo — Contesto colgando la llamada para agarrar sus cosas, no sin antes mirarse al espejo por ultima vez y por fin poder salir.

Cuando cerro la puerta de su casa vio a Chris recargado en su camioneta, luciendo un traje demasiado hermoso y sexy, que hizo que él y su Omega babearan.

— Omega — Lo saludo el castaño con una sonrisa al verlo.

Chris desde que lo vio salir casi se atraganta con su saliva, era hermoso y perfecto con ese traje, en si con cualquier prenda que utilizase era perfecto, se sentía tan afortunado de ser su Alfa.

— Alfa — Lo saludo con un sonrojo.

— Estas hermoso — Contesto para darle un beso en los labios — Siempre estas hermoso, mi Omega — Dijo aspirando su aroma.

— Tu también estas hermoso Alfa — Contestó con una sonrisa.

— No tanto como tu — Respondió saliendo de su cuello — ¿Nos vamos Sol? — Cuestionó alargando su mano para que el nombrado lo tomara.

— Por supuesto Alfa.

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¡gracias por leer!