Haruka Mirai [Greninja x Ash]

010.

           Sus traicioneros ojos le siguieron hasta no verle en lo que quedaba de estancia, desapareció entre los disímiles árboles que habitaban en aquel pequeño claro en el que descansaban.

           Escuchó como su amigo de cabellos rubios le llamaba la atención. —Tierra llamando a Ash. —una mano fue sacudida delante de sus ojos, esperando ser vista. Dirigió su atención a su amigo que le dirigía una mirada algo... No sabría como expresarlo, porque realmente no entendía que analizaba el científico en su persona.

—¿Si?. —contestó, intentando no apartar su atención del rubio, mas le fue imposible. "¿Dónde habrá ido?". Seguía preguntándose internamente, cuando se dió cuenta, su atención volvió al hueco de arbustos que tapaban la extensión de árboles que habían sido los culpables de perder de vista a su recién recuperado compañero de equipo.

            Sintió como esta vez no era solo Clemont quien llamaba su atención, se le habían unido Sawyer y Bonnie, quien comentaba algo que no llegó a entender del todo, Pikachu subió a su hombro como de costumbre hablando algo que no podía entender tampoco, después de todo no tenía la cabeza centrada en el momento como para poder adivinar lo que expresaba el ratón eléctrico.

         Sacudió su cabeza para alejar su inquietud. —Lo siento. —soltó, miró a cada uno de sus amigos. —¿Qué decían?.

         Clemont alzó una ceja, en desaprobación. —Ash, ¿te encuentras bien?. —expuso, acomodando levemente sus gafas. Bonnie se acercó un poco más, Pikachu saltó de su hombro al los brazos de la menor.

           Sawyer y Sceptile se dieron una mirada, no cómplice, mas bien una se esas que buscas cuando no entiendes lo que sucede a tu alrededor e intentas encontrar a alguien en tu situación.

            El de cabellos negros dió unos pasos atrás, levanta sus manos hacia adelante como intentando calmar a un perro enojado. —Sí, claro. —comentó, no muy convencido de su propia respuesta. Llevó una de sus manos a la nuca, sobándose ese lugar suavemente, rió nervioso. —¡Todo bien, perfecto!. —rió un poco más alto mientras hacía un ademán de marcharse.

          Los otros solo le miraban en silencio, tratando de procesar lo que hacía su amigo. No tenía sentido.

          Ash apuntó hacia el frente. —Yo, yo...—Me tengo que ir, hasta luego.

          Se mandó a correr, desapareciendo de la vista de los demás en no menos de dos segundos, pareciera que había aprendido los movimientos de algún Pokémon.

          Los chicos solo habían recorrido con la mirada a su amigo que había adoptado un comportamiento poco de él, hasta que desapareció, sin entender absolutamente nada de lo que ocurría. Sawyer se alivió internamente, no era el único que no estaba enterado de la situación actual.

       Silencio.

       Hasta que Sawyer decidió que ya era suficiente de tanta situación rara. —Entonces... —no muy convencido de cortar aquel silencio sepulcral comenzó, miró a Clemont con signos de interrogación sobresaliendo de su cabeza, bueno, literalmente.

—¿Debemos seguirle?. —preguntó. —¿O nos quedamos aquí?. —concluyó, sin saber que diablos había que hacer ahora que el chico que lo derrotó, por ¿quinta?, ¿cuarta?, ya no recordaba, Ash y Gekkouga siempre encontraban una manera de hacerle caer, a pesar de la diferencia abismal de tipos, ojalá supiera como lo hacían; se había largado.

          Bonnie giró su cabellera rubia de Sawyer a su hermano respectivamente, mientras los dos más adultos decidían que hacer.

—Nah, mejor regresemos al laboratorio. —propuso al fin el rubio, era mejor darle tiempo a su amigo azabache que pensara por unos momentos.