Capítulo 23

6 0 0
                                    

Lola

A veces necesitas algo que te lleve a la realidad, un aviso. Simplemente una excusa para que dejes de hacer lo que sea que estés haciendo.

En mi caso, esa excusa fue la llamada de mi padre, la cual consiguió que parase de hacer algo que solo complicaría las cosas en un futuro. Y no, eso no era lo que quería. Quería estabilidad y eso provocaría lo contrario. Bueno, lo provocará, porque el daño ya está hecho.

Así que sin dudarlo, me separé de Lucas, apartando de forma brusca mis manos sobre su cuello.

Y así, con la voz entrecortada por ese beso, contesté a mi padre. Simplemente le dije que sí a todo, era la forma más fácil que vi para huir de él.

- Vale papá, vamos para allá. No queríamos asustarte- dije para finalizar la llamada.

El pobre de mi padre se había preocupado porque era incapaz de encontrarnos; problemas típicos en un parking enorme y con varias plantas. Es más, acababa de darme cuenta de que bajamos una planta más.

Maldito el momento en el que empezamos a jugar...

Él estaba a mí lado, algo aturdido y confundido por la situación.

- Vamos con mi padre- dije de forma seca. Realmente era consciente de lo dura que estaba siendo con él en ese momento pero, dios mío, soy demasiado inestable como para gestionar lo que acababa de pasar en apenas un momento.

Pareció darse cuenta de lo que me pasaba.

- Lola...- empezó a hablar con reparos, lo que me hizo ver que él tampoco sabía muy bien cómo gestionarlo. Aunque una parte de mí me decía que verdaderamente él lo deseaba, que no se arrepentía de la misma manera que yo. Supongo que solo serían suposiciones sin sentido de mi mente, ¿no?- ¿No vamos a hablar de ello?

Me paré en seco.

- No es el momento.

- Joder, vale.

¿De qué quería hablar? ¿Tan grande era su necesidad?

- Genial, ahora hazte el ofendido cuando ambos sabemos que el que ha empezado eres tú. Así que perdóname si no quiero hablar contigo de una mierda que has provocado tú.

Lucas levantó una de sus cejas, mostrando su enorme desacuerdo conmigo.

- ¿Estás de broma? Yo solo acerqué mi boca y tú diste el paso.

- Pero si no la hubieras acercado...

De pronto, ambos nos giramos al escuchar una voz que se dirigía a nosotros.

- Por fin os encuentro. - dijo mi padre notablemente menos preocupado. Sin embargo, a los segundos cambió su actitud por una más seria- ¿Acaso os creéis que tenéis cinco años? Joder chicos, tenéis diecisiete años. No creo que os lo tenga que recordar, ¿verdad?

Ambos asentimos porque en cierto modo era lo mínimo que debíamos hacer. Lo habíamos asustado y tenía todo el derecho del mundo a enfadarse.

Salimos del parking en un completo silencio, de esos que poco a poco se volvían más y más tensos. Tensos sobre todo por Lucas y yo y mi padre era muy consciente de ello. En ningún momento nos había preguntado qué nos pasaba pero él ya sabía que algo  nos ocurría. Supongo que son superpoderes que solo aparecen cuando eres padre.

Ese silencio acabó en el momento que pisamos la Gran Vía.

Lucas ahogó un grito de alegría al darse cuenta y yo, inconscientemente sonreí en respuesta. Sí, estaba cabreada con la situación pero me alegraba su felicidad.

Recorrimos poco a poco el camino por el que hace años solíamos corretear.

Odiaba la incomodidad que sentía, esa que ya llevaba sintiendo desde hacía tiempo con Lucas. Era lo que me impedía disfrutar como realmente quería de esto. No solo por nosotros, sino por mi padre, quien tanto lo había planificado.


-----------

Pasamos horas y horas caminando por el centro. Poco apoco me sentía menos incómoda pero aún así no era casi ni capaz de mirarlo; simplemente me limitaba a hablar con mi padre y a callar cuando veía que él hablaba con Lucas. 

Sí, lo sé. Es el acto más infantil e inmaduro que existe pero en este tipo de situaciones soy la persona más infantil e inmadura que existe en la faz de la tierra.

Casi sin darnos cuenta, nos fuimos alejando cada vez más del centro, siguiendo los pasos firmes de mi padre.

- Papá, ¿a dónde nos llevas?- pregunté intrigada; a lo que él solo se limitó a levantar los hombros hacia arriba, dando así misterio al asunto.

Fue en ese momento cuando crucé miradas con Lucas. Ambos estábamos intrigados; fue como si solo nos importase eso, la intriga.

 - Venga Liam, dinos algo- insistió Lucas.

Mi padre se giró y nos sonrío.

- Venga chicos, que ya casi estamos.

Quería preguntarle mil cosas como por ejemplo, ¿a qué se debía tanto misterio? Juro que por un momento me planteé la posibilidad de que nos enseñase un cadáver o algo así.

Justo cuando iba a rogarle más información, mi padre se paró justo en frente de un local.

- Ya estamos.

Realmente estaba perpleja. Esperaba que mi padre nos fuera a llevar a un local que nos pudiera gustar a ambos pero la realidad se alejaba bastante a lo que esperaba ya que nos encontrábamos frente a una charcutería llamada "Charcutería Manolo". 

A ver, realmente no esperaba haber caminado tanto solo para comer fiambre.

- ¿Charcutería Manolo?- preguntó Lucas tan perplejo como yo- ¿Enserio?

De repente me entraron unas ganas inmensas de reír. 

Es gracioso mi cambio de actitud si tenemos en cuenta que hace unas horas solo quería gritar y huir.

- Sí, así se llama ahora- contestó mi padre con una media sonrisa que me hacía sospechar que aquel local era más que una simple charcutería.- Antes este local tenía otro nombre y se dedicaba a otras cosas.

- ¿Qué cosas?- quería respuestas. Tampoco entendía muy bien el por qué de tanto misterio.

De repente mi padre lanzó una pequeña sonrisa hacia el local, una de esas que reflejan mil sentimientos.

- Digamos que en este local empezó nuestra historia, la de los cuatro como familia y no sabéis lo mucho que me alegro de haber estado ahí dentro- dirigió su mirada hacia Lucas- Porque eso supuso conocer a Vic.

Lucas y yo nos miramos. Ya sabíamos por qué era tan importante ese sitio. Ese local había sido una asociación de padres jóvenes, donde contaban sus experiencias y trataban de seguir adelante.

Le debo tanto a ese local...


***

Creo que debería disculparme por haber sido incapaz de seguir con el libro cuando era algo que me encantaba hacer y que realmente disfrutaba.

Este 2024 me he propuesto seguir con él. Quizás no publique un capítulo cada semana pero trataré de continuar con la historia. No puedo abandonarla.

Gracias :)

*** París ya esá añadida en la playlist del libro





Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 04 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Somos recuerdosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora