Capítulo 25

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Una habitación vacía, en un ruidoso silencio donde los recuerdos salían a la luz, dos hombres sentados sobre un colchón en el suelo frió de aquel lugar, cada uno mirando a diferentes lugares pero sus almas dictando a una sola dirección. El menor rebuscando entre sus recuerdos alguna señal de aquella historia de terror mientras elimina una lagrima que bajaba por su mejilla. El mayor mirando hacia la ventana de vidrio grueso y barrotes, observando como el día se oscurece igual como aquella vez donde la luna quería ser testigo principal de su vida.

Tal vez así era mejor estar en la oscuridad donde pertenecían, el brillante sol no tenia espacio en su vida, porque ni aquella gran estrella que irradia luz y calor a todas las personas del mundo podía derretir su corazón de hielo o quizás, no podía hacer que su corazón latiera. Volteo a ver a Jungkook que seguía con su vista fija en algún punto vació del lugar. Después de completar la historia quedaron en completo silencio sin agregar más.

Taehyung se acerco un poco más hasta que sus cuerpo se rozaban, Jungkook no se movió de su lugar, ni lo volteo a verlo. El castaño con una mano aparto el cuerpo del pelinegro de la pared para así poder pasar su brazo y a traerlo en sus brazos, sosteniéndolo de caer en ese abismo.

Jungkook se aferro al cuerpo del mayor y lagrima tras lagrima empezaron a caer hasta convertirse en sollozos, en ese momento volvió hacer aquel pequeño que lloraba después de cada experimento, aquel niño antes de la pesadilla que no recuerda. En ese momento no era el joven detective, ni el chico que atraía a mujeres y hombres como si él fuera el único ser en el mundo, ahí no era el chico que volvía loco a Taehyung con solo una mirada y un guiño. Solo era una persona con el alma destrozada por aquellos recuerdos que no tiene pero que sabe que están ahí.

Taehyung enredaba sus dedos entre su cabello negro para intentar calmarlo, daba pequeños besos en su cabello mientras le susurraba palabras de que dejara el pasado atrás.

Un toque en la puerta los hizo saltar dirigiendo su vista a la puerta - En cinco minutos terminan las visitas - avisaron. Luego se escucharon unos pasos alejándose de la puerta.

Jungkook dirigió su vista a Taehyung y poso un de sus manos en su mejilla, se acerco lentamente hasta unirse en un beso suave con tristeza y dulzura. Cuando se alejaron ambos se observaron como si la telepatía existiera entre ellos, donde no necesitaban decir ni una palabra porque sus ojos decían más que cualquier frase.

– Vayámonos.. – susurro Jungkook. – Escapémonos juntos...Te lo había prometido ¿no? – Taehyung asintió y volvió a besar sus labios. 

– Vayámonos...Y olvidémonos de todos – respondió. Abrazó una vez más al chico y lo soltó. Jungkook se levanto sin despegar su mirada del mayor. Era algo irrazonable, pero para Jungkook no, acababa de escuchar una historia, la de su pasado, donde Taehyung y él sufrían junto a Jimin. Así que era momento de que ellos fueran felices, uno al lado del otro.

– Esta semana...la otra tengo secciones y...no quiero vivir eso una vez más – los ojos de Taehyung se llenaron de lagrimas haciendo que el pelinegro asintiera.

– Yo me encargo de las cosas aquí adentro, no es mi primera vez – sonrió divertido, Jungkook le devolvió la sonrisa concordando con eso. 

– Yo me encargo de a donde iremos – afirmó. Camino hacia la puerta pero antes de girar la perilla volvió su vista a su mayor, duro unos segundos apreciandolo para luego dejar el lugar.

Caminó lentamente por el primer piso con la mirada gacha viendo sus pisadas, pero cuando la alzo diviso dos figuras que para ese momento se le hicieron conocidas. 

Min Yoongi y Park Jimin.

troto un poco para llegar a donde ellos se encontraban de espaladas. Jimin se encontraba sentado mirando hacia el ventanal que tenia delante mientras que Yoongi se mantenía de pie observándolo a él. Cuando Jungkook llego a un lado de ellos ni el mayor se había percatado de su ausencia.

Miénteme. KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora