¡Ese viejo arrogante!

715 54 35
                                    

¿Alguna vez has escuchado que del amor al odio y del odio al amor es solo un paso?
¿Si?

Pues te mintieron.

No existe tal cosa como el amor a primera vista.
Ni las mariposas en el estómago.

Eso. No. Existe, mi amigo.

¿Te digo que sí es un sentimiento real?

El odio.

Ese sentimiento tan profundo que puedes llegar a sentir por alguien a quien repudias con todo tu maldito ser... Es divino.

Si te amarga el alma... Pero eso viene tiempo después.

Soy T/n Patricks y soy una bruja.
Actualmente estudio y resido, en Hogwarts; la escuela de Magia y Hechicería más predigiosa de toda Escocia. Curso mi Séptimo y último año, (gracias a Merlín) y tengo 17 años recién cumplidos. Eso quiere decir; que ya soy mayor de edad.
Todos mis seis años que he estudiado aquí han sido pan comido.
Los profesores son tranquilos cuando no te están bombardeando de ensayos, o exámenes sorpresas, o pociones extremadamente tóxicas que podrían matarte solo a ti.

En fin, los profesores...

Pero hay uno que no me cuadra en la ecuación.

El Profesor Snape.

¡Ese hombre!

¿Cómo les explico quién es él sin que lo odien?

1) Feo
2) Tiene pelo grasoso
3) Naríz ganchuda
4) Viste de negro (parece un maldito murciélago, o que siempre sale de un puñetero funeral)
5) Es un amargado
6) Nunca sonríe
7) Arrogante
8) Odia a todos los que no son de Slytherin, Etc. Etc. Etc.

No es sorpresa; él tambien me odia.

Me lo ha demostrado desde el primer momento en el que me vio poner un pie en la institución, y rápido hicimos click odiosamente.

Es la piedrita en mi zapato que no me deja vivir la vida como quiero. Me quita puntos a cada rato, las detenciones se me salen hasta por los poros; y la verdad...

Me vale madres.

Así como me vale madres estar sentada en estos mismos instantes en su salón, con mis apuntes todos regados sobre la mesa y el muy viejo verde escribiendo en la pizarra.

Es la última clase de por la tarde.
Solo quiero que esto se acabe para poderme ir a descansar.

- ¡Patricks!

Un grito desde el frente del salón me sacó de mis pensamientos.

Snape.

Pero lo ignoré.

Si hay algo que aprendí en todos mis años siendo estudiante de este señor: es que odia que lo ignoren, que no le obedezcan y que sean irrespetuosos; y yo soy la estudiante #1 en la lista de las que no les importa un carajo y lo hace de todas formas.

-¡T/n, Snape está hablándote!- Una chica de mi mismo año de Griffindor llamada Hermione Granger me susurró.

-¡No me importa!- Le susurré de vuelta.

-Señorita T/n...

Su voz asquerosamente suave se escuchaba acercándose.

-¿Así que te gusta ignorarme mientras hablo? Me preguntó, recostándose de la columna a su mano izquierda, usando ésta de soporte.
-¿Te causa algún tipo de placer el verme enojado?

¿Y a ti quién te dió el permiso para tutearme?

Créeme no me causas ningún tipo de placer.

No descansaré hasta que me odies.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora