[ 𝑵𝒖𝒆𝒗𝒆 ]

105 10 5
                                    

En una cálida mañana de sábado, Albedo decidió salir de compras junto con Kaeya. El dúo dinámico les decían...

-¿Al final qué te vas a poner para la graduación?

Dijo el moreno, comiendo una bolsa pequeña de caramelos.

-Lo sigo pensando.. ¿Y vos? ¿Qué te vas a poner?

-Nah, algo simple.

-Estaba pensando hacer un conjunto con una garbandina. Tengo todo menos eso así que quiero ver si puedo comprarla.

-Bueno, te sigo.

Kaeya soltó una pequeña risa simpática.

Justo entraron al centro comercial, buscando alguna tienda en específico. Cuando la encontraron pueden idealizar a Albedo buscando alguna prenda mientras Kaeya jugaba poniéndose sombreros y gafas de sol detrás de Albedo.

-¿Cómo me veo?

-Horrible.

Kaeya llevaba puesto un sombrero de paja algo grande y gafas grandes de sol de color verde.

-Qué malo que sos Albe..

-Si seguís así voy a pretender que no te conozco.

Se dio la vuelta escogiendo la garbandina de su talla.

-Me llevo esta.

Al salir del lugar, Albedo se fijó en su teléfono mientras que Kaeya miraba los alrededores del centro.

-¿Qué hacemos ahora?

Se atrevió a decir el moreno, Albedo se dio la vuelta y pensó por unos segundos.

-¿Te gustaría hacer algo?

-Comida.

Albedo entendió y se fueron a comer algo por ahí.

Al llegar a casa, Klee no estaba si no que se fue nuevamente con Lisa. Albedo y Kaeya aprovecharon para probarse la ropa que usarán el lunes.

Kaeya se puso una camisa sin estrenar, probándosela.

-Por dios qué atractivo me veo..

El conjunto es así: Kaeya usando la camisa esa arremangada junto con sus pulseras y su collar que tenía, el pantalón de jean negro roto y zapatos de vestir negros, qué elegante..

Y no puede faltar el de Albedo: Una camisa negra manga corta, usando por encima la garbandina café arremangada junto con sus pulseras negras, usando un pantalón algo ancho para su gusto de color negro y unas converse. Algo casual pero elegante.

-¿Desde cuándo tienes un tatuaje en el brazo?

Preguntó Albedo sorprendido.

-Bueeeeno, una larga historia. ¿Pero no es bonito?

Se arremangó más el brazo derecho, dejando ver su tatuaje de flores, muy bonito.

-Me encantan estas flores, mi abuela tenía un jardín entero de ellas.

Sonrió con nostalgia y se volvió a colocar la manga como antes.

Albedo devolvió la sonrisa y se probó la garbandina.

-Hmm.. Me queda perfecta.

-Te ves bonito.

Dijo Kaeya con una sonrisa.

Albedo no pudo evitar sonrojarse así que se dio la vuelta de inmediato.

-Estoy.. emocionado.

-¿Por verme tocar? Lo sé.

-Aparte de eso..

Dijo el rubio dándose la vuelta con mirada de indignación.

-¿Me dejarás peinarte?

Dijo con un puchero, suplicándole al más bajo.

-Si no me dejás pelado sí.

Kaeya rió y se sentó en la cama.

El rubio se quitó la prenda y la dejó colgada.

-Y pensar que nos graduamos en unas semanas..

-Sí, ¿verdad?

Kaeya sonrió nostálgico.

[1 Semana después, 28 de septiembre]

Ambos chicos estaban emocionados, Kaeya tocaría una canción de su banda favorita, y Albedo haría una exposición de arte.

El dúo dinámico se encontraba en la sala, con algunas porciones de pizza mientras platicaban sus ideas para mañana.

-Entonces.. ¿Tu exposición es de arte, no?

-Nooo.. Si te parece pelotudo.

Kaeya rió, llevándose una porción de pizza a la boca.

-Solo te preguntaba...

Dijo con la boca llena.

[Día siguiente, Graduación]

Estaban felices, Kaeya esta vez conducía hacia la universidad.

Albedo estaba nervioso, le preguntaba al moreno cada 2 segundos si se veía bien mientras se miraba por la cámara de su teléfono.

Al llegar podían apreciar a Rosaria hablando con Tartaglia y otra chica más.

-¡Perdonen por tardar!

Dijo Albedo arrastrando al moreno.

-¡Eh, eh!

-Ah mirá, el que no me responde los mensajes...

Dijo Tartaglia, cruzándose de brazos.

-Es la flojera, lo juro...

Dijo Kaeya, acomodándose las mangas de la camisa.

Todos comenzaron a entrar, dentro habían distintas exposiciones de arte, en la cual Albedo participaba en una.

Consistía en cuadros/dibujos de flores, el mejor cuadro tendría un premio.

Albedo en su puesto, puso varios cuadros que había pintado en su tiempo libre. Flores blancas en especial.

A Albedo le encantaban las flores de color blancas, rosas, margaritas, claveles...

-Dudo que gane.

.

-¡Y el premio para el primer puesto es... Ragnvindr Albedo!

-Qué.

𝑯𝒆𝒂𝒕𝒉𝒆𝒓 // ᵏᵃᵉᵇᵉᵈᵒ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora