Capitulo 2: La graduación.

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{Multimedia Samantha}
-¡Corre!¡Corre!-grito Kendall atrás de mi-¡No creo que llegemos a tiempo!
-¡Callate, que nos van a meter un palo por el culo si no llegamos a tiempo!-le dije apenas por tanto correr
Llegamos corriendo a la entrega de diplomas, todavía a tiempo, porque cuando apenas me senté en las primeras sillas disponibles que habia se escuchó en el micrófono.
-Crawford Tenielle Samantha-dijo el Coronel Scott
Me paré enseguida y camine hasta el pequeño escenario que habian puesto y subí los dos escalones y ahi estaba el Coronel Scott, con una sonrisa de oreja a oreja, oh dios lo voy a extrañar tanto, llegue hasta el y me dio mi diploma y me abrazo.
-¿Tarde?-me susurro
Nos dimos la vuelta para la foto de recuerdo.
-Lo normal-le susurre
-Creo que hasta eso voy a extrañar más-dijo
Le dedique una última sonrisa y baje del escenario. Y me dirigi a donde estaba Kendall sentada.
Kendall es mi mejor amiga. Desde que llegé a la escuela militarisada ella estaba conmigo y nunca me abandono, aún después de ese rumor de que tenía piojos.(lo cual debo aclarar era un rumor) Desde ahí vi que en verdad era mi mejor amiga y que nunca me podría despegar de ella. Aunque es muy diferente a mi en casi todo. Ella es delgada que es impresionante cuando la ves pelear, yo no soy gorda pero soy de huesos anchos, ella es tan social y yo soy tan antisocial. Ella viste muy femenina y yo bueno, por algo me metí en esta escuela.
-Lefrort Josean Kendall-anunció el Coronel Scott
Ella se paró y camino hacia allá y casi hizo el mismo ritual que yo, excepto que mientras ella pasaba estaba saludando a todos como si fuera una superestrella de cine, pero no a la mala manera, si no a la manera tierna e inocente. Esa era la diferencia más notoria de las dos es como luz y oscuridad.
[...]
-Nos va dejar el maldito camión, Josean-le grite a Kendall con su segundo nombre con el plan de que se molestara y se apurara más
-¿Como acabas de llamarme?-grito desde adentro de la habitación que llamamos hogar por mucho tiempo
-Como oiste, y si no quieres seguir eschuchandolo, ¡mueve ese culo!
-Lista-dijo sacando dos maletas de la habitación
Corrimos a la puerta principal y vimos que seguia el camión en la parada. Dejamos las maletas en la cajuela del camión y subimos al camión y tomamos los primeros asientos que vimos disponibles.
Y ahí sentada vi como no volvería. Que algo me iba a cambiar. Y ese cambio iba ser drástico y no iba tardar ese algo.
Y ahí estaba de nuevo dejando mi hogar para ver si esta vez encontraba el verdadero.


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Yo no se amarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora