t w e n t y - f i v e

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Después de aquel beso tan intenso y aquellas confesiones de amor mutuas, Jimin había bajado del regazo de Yoongi, quien no quería alejar sus manos de las hermosas curvas del castaño, sin embargo no dijo nada y solo sonrió con las mejillas sonrojadas al recordar todo nuevamente.

Jimin no dijo nada, ¿Que debía de decir exactamente?

Se sentía muy avergonzado al actuar con tanto descaro, subiendo al regazo del azabache, tomar su rostro y besarlo con desespero, y lo peor es que sentía que estaba muy bien y necesitaba volver a sentir los labios de Yoongi sobre los suyos, nuevamente estar sobre su regazo y estar todo el rato sobre él.

Con vergüenza, ambos bajaron la cabeza totalmente sonrojados.

— Y.... ¿Ahora? — Jimin fue el que rompió el silencio.

Yoongi alzo su mirada y volteó a verlo.

— N-nosotros.... ¿Somos algo? D-digo... Me g-gustas... Y y-yo... A tí — Preguntó tímido. Moviendo sus manos sobre su regazo.

Jimin sonrió levemente al ver a Yoongi, era demasiado lindo y tierno... Demasiado precioso.

— Aún no — Respondió suspirando.

El rostro de Yoongi se entristeció al instante, sin embargo no dijo nada.

— Por qué debemos empezar como debe ser — Dijo sonriendo. — Tener un lindo día solo para nosotros, beber un helado y comer frituras... Ver cómo el sol baja dejando ver la luna, es ahí el momento en el que te seremos más que amigos — Explicó sin borrar su linda sonrisa.

Yoongi al escuchar todo eso no puedo evitar no sonreír, sus mejillas se sonrojaron al instante y soltó una risita.

— Me gusta lo romántico... — Confesó tímido.

Jimin asiente tomando la mano del azabache para entrelazar sus dedos.

Yoongi boqueó al sentir lindas sensaciones en su estómago al poder tocar la hermosa y suave mano de su amor.

¿Era así lo que sentía el amor y felicidad?

Porque quería serlo y sentirlo siempre.

Se sentía eufórico y agradecido al saber que no lloraría más porque su lindo castañito este al lado de otra persona, él solo únicamente estaría a su lado desde ahora en adelante y eso le encantaba.

— Y a mí lo cursi — Sonrió casi riendo. — Somos el uno para el otro — alzó sus cejas con coquetería.

Yoongi río y sin evitarlo, tirando su timidez y vergüenza por está vez, acercó su rostro hacia el del castaño y llevando su mano derecha a su mejilla izquierda de Jimin, unió sus labios una vez más causando únicas sensaciones que solo ellos podían experimentar con solo el pequeño toque y unión de sus labios.

Fue un suave y anhelado tacto.

— Me gustas mucho... — Confesó sobre su labios, Yoongi sintió que nuevamente la vergüenza se apoderó de él, pero no quería apartar su rostro de el castaño, solo estaban a centímetros de poder besar nuevamente esos adictivos belfos rojos.

Jimin no puedo evitar volver a sonrojarse, ¿y como no hacerlo? Su Yoonnie le estaba diciendo nuevamente que le gustaba, eso lo hacía más que felíz.

— También me gustas demasiado, Yoon — Dijo tímido.

Yoongi sonrió completamente enamorado.

— Dilo otra vez... — pidió casi rogando.

Jimin ríe. — Me gustas — Habló.

Only Love Can Hurt Like This ©(Yoonmin/Jimsu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora