Capítulo 18

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Narra Samuel:

Estoy al lado de Guille recordando las miradas inquietas de él a los demás asientos, viendo como los demás se arrancan el alma con los labios. El color Escarlata de sus mejillas abultadas y sus ojos de miedo cuando... cuando mordió mi dedo. Nunca creí que tendría que resistirme para besar a un hombre; pero duele no poder besar a Willy a mi antojo.

-Te odio.-Dice Willy sacándome de mis pensamientos.

-¿Qué?-volteo y está tapándose la boca.

-Nada.

-¿Que me odias?- pregunto acercándome a el con una sonrisa maliciosa.

-Eh, Emm.-Dice colocándose aún más rojo que antes y yo acercándome cada vez más.

-¿Porqué no mejor jugamos videojuegos?-pregunta y se corre rápidamente. Camina unos pasos y mira atrás.- Ven.- Dice, y yo siento que me desinflo, quedando como un pringao.

-Voy.- Digo resignado.

...

-¿Pe... Pero qué? Vaya tela chaval. -Digo después de ver que Willy me mata por tercera vez en Mortal kombat sin tener la oportunidad de yo golpearle. Él sigue cargándose de risa. -¿Has hecho trampa?.

-Eh visto algunos tutoriales.-Dice aún riéndose.

-Ya no quiero jugar.- Digo haciendo un puchero y cruzando los brazos, a lo que el responde imitando mi gesto.

-¿Qué quieres hacer entonces?.- «qué no te quiero hacer» dice una voz en mi cabeza y la reprendo. No sé de dónde vienen esos pensamientos. Willy tiene un rostro tan delicado y dulce que mis pensamientos carnales y sexuales difieren de hacerle algo a él que no sea cuidarlo. - Hola. Willy llamando a Sam.- Dice chasqueando los dedos enfrente mío.

-No sé ¿Y vos?.

-¿Qué horas son?- pregunta él buscando su celular. -las once, todavía no me quiero dormir.- y me mira.

-¿Qué quieres hacer para no dormir? -le pregunto guiñando un ojo. Me quita la mirada y sus cachetes cogen un tono rojizo.- ¿Vemos una película?- pregunto aún sabiendo que sólo hay televisores en los cuartos. Él empieza a mirar el techo y demás cosas de manera pensativa mientras yo cruzo los dedos internamente.

-Vale.

Narra willy:

Y Le brillan los ojos al pringao, vaya chaval. Y además voy a ver otra película...

Me levanto, me baño y cuando vuelvo al cuarto de Samuel lo encuentro a él sentado en la cama. Dudo si sentarme al lado hasta que me mira, entonces hecho todos mis miedos e inseguridades a tomar por saco. A la mierda si mi cabeza me grita ingenuo o si después voy a resultar lastimado, porque ahora quiero estar Solo con Samuel a mi lado.

-Mmm ¿Qué película quieres ver? Había comprado insurgent hace poco, es la más reciente pero ahí tengo más...

-No, insurgent está bien.-Digo, mientras recuerdo toda la Saga.

Nos acostamos; yo recostado contra Samuel, y él sobre el marco de la cama y almohadas. Tal vez sea mucho exceso de confianza pero ahora me importa un bledo.

Estoy viendo la película que ya casi termina, y escucho unos suaves ronquidos, así que me volteo un poco y me encuentro a un Samuel totalmente dormido. Casi muerto. Tal vez no me he dado cuenta cuando se durmió por estar con mis comparaciones con el libro y echando más de una queja, aún así me gusta la peli.

Se acaba la película y yo me volteo totalmente para observar a Samuel Dormir. Entonces mientras que los créditos pasan detrás mío me quedo observando cada detalle de él con la poca luz que existe. Toco con mi mano su áspera barba y demás facciones. Siento su pecho y el calor que transmite. Aunque sé que está sonando la canción de los créditos, atrás no escucho nada más que no sea mis latidos y mi respiración. Siento su perfume natural y el calor que recorre toda la habitación. Empieza a apretarme un bulto en mis boxers; algo que hace que mis cachetes ardan más. Nunca había sentido esto por nadie, y no creo poder ser capaz de poder tener algo con él.

Me olvido de lo que tengo en la entrepierna, y me concentro de nuevo en sus perfectas facciones. Tocando sus labios con las puntas de mis dedos. Y después veo como él abre sus ojos; me conmueve saber que no se sorprenda, y yo tampoco. Rozando con mis dedos  su cara y cabellera, sintiendo como me quema tal contacto.

Tal vez sabría que ya tendría que pararme e irme a dormir, si no fuera por el calor y atracción que producen en mí sus ojos;  haciéndome perder en ellos, haciéndome desear no querer nunca que tener que abandonar esa mirada y sentimiento de protección.

Tal vez sea idiota que un joven como yo se enamore ya, y aún de una manera tan rápida como lo hice yo, pero no me estoy arrepintiendo de nada, tal vez lo haga mañana, tal vez no, pero ahora sólo quiero sentir su compañía, sentir que alguien está conmigo.

Él cierra sus ojos y yo me acomodo al lado suyo para que los dos compartamos del mismo sueño.

...

Despierto. Estoy rodeado por unos grandes brazos y antes de abrir mis ojos ya tengo tatuada una sonrisa en mi cara. Yo no sé cómo él puede interpretar de que yo le estuviera observando mientras dormía. Vamos Willy, que sólo hay unas pocas maneras de interpretar «eso» y ningún sólo amigo lo hace.

Me separo de sus brazos y voy a por agua, tengo que estudiar hoy aunque sea sábado, aprender unas cuantas cosas más y ver todas las noticias que me perdí en la tarde de ayer.

Desayuno, y después le llevo a Samuel el suyo.

-Samuel.-Susurro. -Samuel. -Digo más fuerte, y me acuerdo que él es el mismo que se cayó de espaldas contra mi pie y no despertó. Así que lo empiezo a tocar con el dedo. - Eh, Samuel. Samuel, despierta.

-Eh Ho... Hola.

-Desayuno.- Digo, levantando la bandeja que traigo y la coloco en sus piernas después de que se acomodó.

-¿Qué horas son?-pregunta con comida en la boca.

-Emm, las ocho.

-Vaya.

-Si, al parecer te estoy arruinando tus rutinas de correr a las cinco de la mañana.

-No me importa si quien me las arruina eres tú.-Vaya, el pringao sabe como hacer que mi cara cambie de color como un semáforo.

-Vale, tengo que ir a... repasar unas cosas, así que no creo que salga de mi habitación hasta la hora del almuerzo.-y me mira escéptico mientras come.-Bye.

Cierro la puerta de mi habitación detrás mío y exhalo una gran bocanada de aire sintiendo como si todos los sentimientos flotasen. sentir más que sólo hambre y sueño es más complicado de lo que pensaba ¿No habrá ningún tutorial, libro que me ayude a controlar todas estas hormonas? Ahora sólo quiero dedicarme a leer mis gordos y feos tomos de política.

-¿Willy?- tocan la puerta. Mierda.

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Hola:3

No me maten, ya sé. Me he demorado en subir un capítulo, y además es éste corto, pero en lo que resta de esta semana intentaré subir uno o dos más (-¿Enserio?. -Si, enserio.) Vale, Gracias a todos los que leen la historia y la votan. Bye, nos vemos en el siguiente capítulo *Salida con humo*

Posdata: cambié la portada (otra vez xD) de la historia, vosotros díganme si prefieren esta o la anterior, los estaré leyendo en los comentarios <3. Vale, ahora sí adiós

(~*0*)~

La cama de al ladoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora