Narra Samuel:
Me despierto como siempre a las cinco a trotar- igual a las demás personas normales¿No?- y cuando llego a las seis de la mañana me encuentro con un compañero que tiene una mirada capaz de incendiar el piso por si sola. Empiezo a hacer el desayuno y sirvo los dos platos. Cuando terminamos de comer él saca un pastel ancho, pero bajo, que tiene algo escrito.
-Voy a dejar que se enfríe un poco.-Dice, aunque en verdad no creo que esté caliente. Y se pira por el pasillo.
Yo me quedo lavando mi plato. Y, después, con un pequeño toque de curiosidad, me acerco un poco para ver las pequeñas letras del pastel, que en verdad forman un párrafo.
«La curiosidad mató al gato, o en este caso, lo dejó sin expresión»
Cuando estoy leyendo la frase, siento que están empujando mi cabeza, y sin poder reaccionar mi cara ya está en la crema del pastel; Bueno, o lo que creía que era crema, porque no sabe rico.
Cuando levanto la cara, escucho una foca pariendo, y me doy cuenta que es mi compañero que se está asfixiando por reír tanto. Empiezo a quitarme pastel de la cara y la siento cada vez más pesada. Pero... ¿PERO QUÉ ESTÁ PASANDO? ¿Le echó algo al "pastel"?¿Le untaría algún anestésico?Mi cara se volvía más pesada.
-¿Qué le hijiste al patel?-le reclamo, con un tono idiota, porque tengo dormida toda la cara y la lengua. Se caga aún más de la risa al escucharme y me daría gracia si sólo no tuviese toda la cara como una papa.-¡Guilelmo!-Digo sin poder pronunciar bien.
-Sólo es un poco de anestésico, por ser tan Fisgón- Dice-Ya se te pasará.- Y eso hace que mi rabia aumente un poco¿Ésta es su forma de desquitarse? Pues vaya que se a pasao,¿Qué será esa crema?¿Lidocaína? Ni sé, tantos anestésicos que hay. Y ahorita me tengo que ir.
Guillermo lava lo que se ensució en su broma. Y yo me fui a bañar mientras empezaba a sentir que la lengua ya no me llenaba la boca. Vaya que en verdad el chaval hace unas bromas muy pesadas. Cuando estoy en la sala lo veo sonriente con su cara de angelito y me voy.
Empiezo a salir para donde Andrea, donde nos vamos a encontrar en el parque. Empiezo a pensar en el camino en lo que pasó esta mañana y la mirada de Guille. El Maldito... Tal vez un poco de mí se lo merece.
Narra Willy:
No sé si me he pasao, lo único que sé es que no puedo dejar de reirme al ver a Samuel con la cara como una papa. Pero si él esperaba que con esa nota quería que le perdonara, ni la cara de zombie le alcanzó . Me he puesto a leer información de la Universidad hasta ser ya casi las doce; entonces empiezo a cocinar. Termino unas pastas que ya había puesto desde hace mucho y no me sirvo hasta que lo veo llegar por el borde de mi computador.
-¿Qué más?¿Cómo te ha ido?-le pregunto, con un tono coloquial y una sonrisa en mi rostro.
-Bien, hoy a sido un buen día. Sólo que no esperaba tener la cara dormida por una hora.-Dice mientras nuestras miradas se encuentran, atravesando me como si intentara ver mi interior, a lo que me avergüenzo y bajo la mirada.
-Esto... ¿Y qué has hecho... después de que oliste mi pastel y saliste por la puerta?-me mira como si quisiera restregar mi «besha» cara contra los spaghettis, así que me acomodo sentando me bien.
-Fui a ver a Andrea y con ella le he contado todo lo que me ha pasado desde que llegué a mi departamento anteayer. fuimos a ver una peli y nos separamos cada uno a su departamento.-ahh, y... ¿Qué respondo a eso? ¿Cool?.
-Y... ¿Quién es Andrea?¿También estudia acá?
-si, es mi novia, la conocí acá en Washington, y entramos los dos a Medicina. Está en los departamentos del otro lado de la Universidad, donde están las mujeres.-Ahh, me siento idiota ¿Cómo el señor perfecto no iba a tener una novia? Era hasta obvio.
-Bueno, me voy a bañar e irme a mi clase.-Digo, mientras lavo mis platos.
-Vale, yo también.-Creo que ya estamos bien, como un mano a mano.
-Hay pastel en la nevera, si quieres.-le digo mientras le guiño un ojo, a lo que me responde con una gran sonrisa blanca.
Me voy a bañar y a recibir mi clase de economía. Que bueno que mi inglés es casi perfecto, casi nunca me pierdo y mi vocabulario es muy extenso, el único problema es que no he hablado mucho con personas nativas como método de práctica.
Narra Samuel:
Estoy comiendo pastel después de todas las pruebas que le hice y sí, esta bueno y no tiene sustancias que afecten el funcionamiento de mi cara. Me alisto y voy a mi clase de Anatomía Humana (de 2pm a 5pm) que termina una hora después que la de Guille.
Después de mi fantástica clase voy al departamento donde me encuentro una nota que dice que mi comida está en el horno, y ahí está, todavía muy caliente. Cuando terminó de comer voy al cuarto de Guille para agradecer le, por qué en verdad estaba muy rica la comida.
-Hola Guille, ¿cómo te fue?-pregunto en un tono bajo.
-Bien- me dice volteando hacia mi. Tiene en las piernas un libro que podría pesar más que yo.-¿Y a ti?
-Bien, si. Gracias por la comida, estaba muy rica.
-Es parte de nuestro acuerdo¿No?
-Si, pero te quedó demasiado bueno.-silencio incómodo de cinco minutos- Bueno... Adiós.
Asiente con la cabeza y me voy. Vaya, pues al parecer es mejor no hablar mucho con él cuando está estudiando; como que tiene otra alma que se le mete a través de esos libros.
Después de bañarme me dispongo a dormir, recordando todo el día y pensando en las palabras estúpidas que dije atormentado me hasta las dos de la mañana por todas las respuestas inteligentes que pude haber dicho.
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Hola:D
Espero que les esté gustando leer la historia como a mi escribirla. (/-\) por favor díganme si les está gustando, y voten:3
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La cama de al lado
FanficGuillermo Díaz empieza la vida Universitaria, proponiéndose que éste año será un nuevo comienzo para él, dejando de lado cualquier distracción y concentrándose en los estudios; pues los años pasados no sacaba tan buenas calificaciones por problemas...