Antojos

Capítulo 5

El padre de Yibo miró totalmente mal a Zhan, pero se debutó junto a sus guarde espaldas y sonrió alzando uno de sus brazos y extendiendo su mano. — Wang Yizhou.

Zhan miró a su omega nervioso pues el padre esperaba un saludo pero aún seguía cargando al omega. Como pudo extendió su mano y la tomó. — Xiao Zhan. Un gusto conocerle señor Wang.

El hombre asintió y soltó su mano dándose la vuelta. — Ayuden los con sus maletas.

El ambiente dejó de tensarse cuando el hombre pasó por la puerta del aeropuerto llendose completamente de ahí. Liying se acercó hacia la pareja un poco nerviosa. — T-tenemos que ir a casa de padre. Zhan acompáñame, y Yibo, no conviene que hables en estos momentos con padre, al parecer esta enojado y...Estas embarazado, sólo cuida tus emociones. Vámonos de aquí. — Dicho eso tomó sus cosas y se fue por donde el padre de Yibo. Zhan le siguió.

Estaba perdido, no conocía a nadie más que sólo a su omega, y ver a tantos leones le hizo sentirse totalmente atrapado.

Llegaron a una mansión, en medio del bosque. Yibo sonrió y tomó la mano de su alfa mientras se acercaba más hacia la ventana y divisaba el lugar.

— Han pasado tantos años...

Suspiro y el chófer se dio la vuelta. — Señorito Yibo, hemos llegado.

Yibo brinco feliz como un pequeño niño y salió rápidamente del auto sin esperar que el chófer abriera su puerta y lastimando un poco su espalda en el proceso. — Augh.

Arrugo su nariz y llevó su mano derecha a su espalda. Zhan escucho su quejido y salió del auto preocupado corriendo hacia el omega. — ¿Estas bien amor?.

Preguntó posando una mano en su espalda. Yibo le miró y sonrió negando. — Estoy bien, solo ayúdame que me he lastimado también el pie.

Zhan hizo lo que le pidió y ambos entraron a la mansión seguidos del chófer con sus maletas. Zhan miró sorprendido el lugar, era magníficamente grande y las paredes estaban talladas de mármol y candelabros de oro sobre el techo. El pulcro lugar blanco y reluciente. Zhan jamás pensó que Yibo podría haber tenido ese tipo de vida...

El alfa sintió cuando Yibo dejó de tomarle el brazo y solo se aproximó cojeando hacia enfrente, no se había percatado de aquella presencia hasta que Yibo llevó los brazos al cuello de aquel Alfa el cual tomó la cintura de su omega y le abrazo.

Algo dentro de él le hizo sentirse celoso, solo un poco pues no sabía de quién se trataba aquel Alfa. — Haoxuan, Wang Haoxuan.

El omega tomó los cabellos del alfa y Suspiro sobre su cuello. — Yibo, le había extrañado muchísimo.

Le soltó. — Hace mucho que no nos vemos y Wow, mírate. — Le alejo un poco tomando sus manos. — Estas en cinta.

Yibo asintió feliz y elevó sus manos hacia las mejillas del menor. — ¿Y tú? ¿Ya Conseguiste omega?.

El alfa cerró uno de sus ojos y asintió. El omega chillo sorprendido tapando su boca está vez. - ¿Quién es pillin?.

Preguntó a su primo y este río. — Va en la escuela junto conmigo Gege, el estudia enfermería y es más bajito que yo. Se llama Ji Yang, estoy seguro que se llevarán bien si llegan a conocerse.

Yibo rodeo de nuevo los brazos del alfa y puso su pequeña nariz sobre la covatura de su cuello y hombro. — Dios, has crecido demasiado, aún me acuerdo cuando jugábamos sobre el pasto cada fin de semana.

— Usted también cambió mucho Gege, yo no recordaba que antes de irse estuviera en cinta y tenia un alfa. Wang Haoxuan.

Llevó su mano hacia enfrente a la vista del híbrido de conejo. El conejito tomó su mano y le saludo. — Xiao Zhan.

— ¿Eres un conejo?. — Pregunto dejando las caderas del Omega y solo tomándolas de uno de sus brazos.

— S-sí. — Zhan respondió un poco tímido.

Haoxuan sonrió y soltó ahora si completamente la cintura del bajito dirigiéndose hacia Zhan y abrazarlo confiado. — Bienvenido a la familia, soy primo de Yibo así que no te pongas celoso.

Hablo juguetón y le soltó. — Supongo que mi tío te pareció un poco tradicional, el es así, solo basta entenderlo...Por mientras, ¿Por qué no comemos algo? ¡Me ruge el estómago! Y mi primo favorito debe de tener el doble de hambre. ¿Verdad bebé?

Preguntó cariñosamente hacia su Gege y este asintió.