Antojos

Capítulo 7

— Debe de ser muy raro para ti esto, ¿Verdad, Hijo?. — Pregunto el abuelo de Yibo.

Era de noche y la familia como era de tradición cuando alguien nuevo llegaba a casa, decidían hacerle un festín como una fogata.

— B-bueno...Al principio. — Contestó tímido el alfa.

— Me imagino. Debes de estar espantado con muchos leones y lobos por aquí, me imagino. —Suspiro el hombre mayor — Pero descuida, aquí nos comportamos como gente civilizada.

Zhan sonrió y solamente asintió agradecido. La noche transcurrió entre risas y gritos de los niños pequeños que corrían por el bosque alegres. La familia a pesar de haber abandonado a Yibo con una familia de gatos estaba feliz de que regresará a casa, y aún así no entendía mucho como es que Yibo cambio todas las versiones de su historia.

— Oh, no. — Hao Xuan se escondió en la espalda de su Gege el cual comía por décima vez en la noche ensalada.

Yibo miró a Hao Xuan sobre su hombro y Hao Xuan solamente apuntó a un lugar al frente. El mayor volteo y miró hacia aquel, casi caía su ensalada sobre el suelo sino hubiera sido por Hao Xuan el cual sostuvo de ella.

— ¿Qué hace el aquí?. — Susurro Yibo a Hao Xuan.

— Al parecer padre aún no acepta que este con un conejo y trajo al líder de la manada de lobos. Lo siento Gege no pude detenerlo...

— Pero...

Fue interrumpido ya que un olor fuerte a tabaco y especias llegó a su nariz como un torbellino. Los lobos, eran alfas de alto rango. No cualquiera de metían con uno, eran seres más altos y más prominentes en la sociedad. Su sangre era pura y muy en casos especiales nacían betas.

— Yibo. — La voz fuerte y rasposa hizo eco sobre el lugar.

La piel de Yibo se erizo por un momento y sus orejitas bajaron de su cabeza con sumisión. Era un omega marcado y no debía pasar, pero, era un lobo pura sangre, tres veces que mejor que uno normal.

— B-Bowen... — Trato de sonreír con todas sus fuerzas, como si fuese un placer saludarle.

El alfa de traje negro sacó sus manos de sus bolsillos y llevó su mano hacia en frente. El omega miró cada una de sus acciones y de igual manera lo hizo tomando su mano y saludándose de esa manera.

— ¿Tendrás cachorros, me imagino?. — Pregunto Bowen mirando su vientre hinchado.

El pequeño omega asintió un poco incómodo.

— Hmh, ¿Un conejo?. — Yibo volvió a asentir y el alfa río un poco sin pena. — Pensaba más de ti Bobo. Tienes mucho potencial solo para estar con un alfa de conejo.

Bowen llevo sus largos dedos a la barbilla del omega y apretaron de esta. Las palabras asidas fueron tragadas por Yibo y frunció su ceño al mismo tiempo que quitaba la mano del alfa sobre su cara.

La tensión crecía en aquellos dos y Hao Xuan fue a avisarle a Zhan el cual ya estaba cerca de la escena y apartó en un pequeño empujón al alfa de lobo. — No toques a mi omega.

Utilizó su voz de mando. Zhan era un pura sangra alfa de conejo. Era débil para su especie, pero su voz de mando podía hacer maravillas. Li Bowen gruñó y solamente se fue de ahí dejando a los dos solos.

Los labios del pequeño hicieron una sonrisa y se dio al vuelta mirando los bonitos ojos de su conejito haciendo juego con la luz de la luna. Recargo sus manos en sus hombros y de puntitas dio un beso sobre su nariz. Un tierno beso.

Zhan tomó su cintura y le alzó besándole frente a los presentes sin importar. Dejando en claro que era solo suyo y de nadie más. Nadie le quitaría a Yibo.