Antojos

Capítulo 10

- Wow, realmente no tienen... - Miró de nuevo ajustando sus lentes sobre la caída de su nariz. El pequeño aparato que hacía el ultrasonido se guiaba por todo el abdomen de Yibo o bueno, su vientre tratando de encontrar algo.

- ¿Hay algún problema Zanjin?. - Él omega mayor negó y sonrió mirando al jefe de la manada el cual estaba en una esquina del cuarto mientras Zhan estaba en otra esquina mirando por la pantalla dos pequeñas figuras.

- Ya están los exámenes señor Zanjin. - Esta vez fue Lía quien entró hacia la sala con una carpeta en sus manos.

Miró a los presentes y dio un suave saludo mientras sonreía hacia Yibo. - Aquí están. - Zanjin asintió y los tomó agradeciendo por su acción.

- Espérenme unos minutos, ahora les doy los resultados. - Se dio la vuelta y fue hacia su escritorio donde empezó a visualizar los resultados.

Yibo mentiría si no dijera que se sentía nervioso. Zhan se acercó lentamente en cuanto Zanjin se fue hacia su escritorio y tomó su mano dando un suave beso en sus nudillos. - ¿Estas bien amor...?.

Para ese momento los ojitos de Yibo estaban ya hundidos en aquella tristeza. Lágrimas pequeñas empezaron a bajar en cascada y sus mejillas de pusieron rojizas. Rápidamente Zhan  tomó sus mejillas apretándolas levemente y sintiendo que estas se acoplaban a sus grandes manos. Se acercó y dio un suave poquito sobre sus labios ante la mirada del Alfa líder.

Yizhou miró a los dos chicos desde el umbral de la puerta. Desde pequeño Yibo había nacido para formar una familia, tener un Alfa y dar un heredero líder a la manada. Pero simplemente no haber pasado sus momentos de adolescencia, sus primeras citas, todo aquello que como padre debió haber dado cuenta, le hacía sentir triste y demasiado apenado. Era su hijo, desde que era un bebé y supo que era un omega lo vio como un objeto que podía regalar y arreglar matrimonios. Sin embargo ahí estaba su chiquillo, su niño, teniendo una familia, un Alfa que sabía que le cuidaría aún estuviera tan orgulloso.

Una sonrisa surco por sus labios. Zanjin volvió hacia los chicos y de nuevo volvió a poner sus lentes. - Wow, esta situación es demasiado complicada. Tendrás que comer el doble Yibo. - Dio una suave risa mientras miraba de reojo a Yizhou el cual se sonrojo un poco ante la mirada del atractivo omega.

Yibo se quedó estático en su asiento. Zhan miró a su omega y después pasó su vista al doctor. - ¿Eso significa...?

- ¡Felicidades, esperas dos cachorros!. - Contesto felizmente aplaudiendo un poco.

Él corazón de Yibo empezó a latir de felicidad y sus lágrimas incrementaron. Tomó las mejillas de su Alfa y ambos se vieron a los ojos con felicidad, el universo entero en ellos. Se abrazaron, Zhan sintiendo el relieve en su estómago y Yibo sintiendo el suave pecho de Zhan con un suéter gris de lana.

- ¿Mellizos o...?

- Aquí esta el problema. Viendo que tu cuerpo es el de un león pero tu gestación será la de un conejo. - Zanjin llevo una mano a su barbilla. - Tus cachorros son híbridos de conejo. Los resultados no aparentan dar aparición de cromosomas de león, así que...

- ¡Es por eso que he estado teniendo antojos de verduras!. - Contestó felizmente el omega llevando su mano a su vientre.

- ¿Eso es posible doctor?. - Preguntó Zhan desde su lugar.

Zanjin asintió.  - Totalmente. Cuando hay una combinación entre una especie y otra puede que ambos cromosomas se junten, pero sinceramente en los resultados indicaba que ambas especies de los dos cachorros eran conejos. Así que, te daré un recetario, tendrás que tener otros tipos de cuidados por que a diferencia de un embarazo de león donde tienen más capacidad para luchar y moverse, en un conejo el cuerpo se vuelve más débil y los bebés más pesados.

Yibo asintió mordiendo su labio. Yizhou pasó los ojos desde Yibo hasta Zanjin, el cual dio media sonrisa. Yizhou estaba feliz aunque aquella primera camada de su hijo sean lindos y adorables conejos...

- Aunque...El comportamiento derivará...Puede que los cachorros presenten actitudes alfas por aquellos pequeños cromosomas de león y sean más agresivos que una especie de conejo. Osea, el cuerpo de un conejo, la actitud de un león.

- ¿Eso no es genial Zhan? Serán pequeños conejitos, ¡no he pensado los nombres! ¿Deberíamos de hacerlo Ya?. - Él omega hablaba mientras caminaba por toda la habitación mientras ponía su ropa para dormir.

Él Alfa asintió feliz y tomó de las caderas a su omega acercándole a su cuerpo. Dio un suave beso en su cuello y después en su mejilla. - Deberíamos. Pero ahora tienes que dormir amor, sino quieres que nuestros bebés empiecen a pedir verduras.

Yibo frunció su ceño y cruzó sus brazos sobre su vientre. - ¿Sabes? Si me lo dices tan así me dejaran de gustar las verduras.

Ambos rieron.

Eran la una de la mañana cuando Yibo sintió rugir su estómago. No quería despertar al Alfa que dormía junto con él así que solamente tomó un pequeño suéter y sus pantuflas con sus pies para empezar a salir de su cuarto. Ya fuera, camino por los grandes y alfombrados pasillos de la mansión. Llegó hasta la planta más baja de la casa después de que bajó las escaleras de mármol y empezó a escuchar unos ruidos provenientes del despacho antiguo de su padre.

Sintió ciertos escalofríos. Se escuchaban respiraciones entrecortada, gemidos y palabras ofensivas. Se acercó lentamente y agradecía que la puerta no estuviera completamente cerrada. Fue ahí cuando por el rabillo de la puerta pudo ver a aquel omega el cual era su ahora "doctor" siendo besado apasionadamente por su padre mientras se restregaba en su regazo.

- Y-Yizhou , ah - Gimió Zanjin tapando su boca con una de sus manos. Yizhou sonrió seductoramente y llevó al omega hacia su escritorio acostandolo completamente.

- ¿Quieres que te haga otro hijo?. - Dijo coqueto.

¿Otro...Hijo?. Los orbes de Yibo se abrieron sorpresivamente cuando su padre volvió a besarlo de nuevo delineando sus caderas con sus finas y morenas manos.

Zanjin soltó un quejido y se separó del Alfa mirándole con deseo. - Con Ji Li y Wei Ying esta bien.

¿Ji Li Y Wei Ying?....¿Quiénes son ellos?.

- ¿Sabes?, quisiera presentarles a mi otro hijo a la manada, pero se darían cuenta del engaño. -Sus ojos miraron hacia la cabellera oscura de Zanjin y toco sus hebras. El doctor omega le miró con tristeza y se apartó un poco.

- Ji Li y Wei Ying preguntan por ti todos los días. Preguntan por qué no les has visitado desde hace un año, el te ama Yizhou. - Tomo la corbata del Alfa. - Aparte tu me preñaste por que tu esposa no te dio un Alfa como querías, yo te di dos omegas también, pero aún me tienes que corresponder, sabes que Ji Li y Wei Ying necesitan un padre.

Yizhou asintió. - Lo sé, pero, no sabría como decírselo a Yibo. ¿Engañe a tu madre cuando apenas eras un pequeño y tengo un hijo?...Eso es...

Antes de que terminará los labios de Zanjin se juntaron de nuevo junto con los del Alfa. - Siempre estaré para ti Yizhou, mi hermoso Alfa.

Un quejido salió de los temblorosos labios del omega león. Un quejido fuerte que fue escuchado por ambos individuos que se encontraban en su mundo. Con lágrimas en sus ojos y un enojo latente en su corazón salió de ahí, sin dar vuelta atrás.