Besando a un demonio

Capítulo 17 - "También me gustas"

"También me gustas"

Enamorado, ese era su estado. No podría detallar el momento inicial. No sabía el momento, pero entendía que el querer estar con él, querer sentir el calor de su ser y todo lo demás; Hablaba más de un sentimiento de amor. También sabía que Lan Zhan no lo amaba y probablemente no lo amaría nunca. Pero que él contrario no sintiera lo mismo tampoco le impedía sentirlo.

Lan Zhan estaba asustado, no podía asustarlo otros tipos con armas, la lluvia fuerte, incluso los animales salvajes más que el amor. No podía permitirse el abrir su corazón por otro ser, pero si otro ser lo hacía por él. También dolía porque él sabía que no podría darle el amor que Wei Ying deseaba, no podría brindarle tanto. 

— Wei Ying.

— Está bien, Lan Zhan... mis sentimientos son puros por ti. ¿Quieres asustarte más?

— No estoy asustado.

— Hazme el amor.

— ¿Amor?

— Como quieras llamarlo, quiero estar contigo desde la piel hasta el alma.

— ¿Qué dices? Yo solo quiero cogerte hasta hacer que olvides tu nombre.

— Pareces asustado.

— El asustado debe ser Wei Ying, no sabes mis alcances.

— Lan Zhan tampoco sabes los míos.

Wei Ying empezó a desvestirse frente a Lan Zhan, sus ojos incitaban a más. Queriendo tentar al alfa, pero ¿Hasta dónde daría su alcance? Se desvistió tan lento que parecía una eternidad, se desvistió en totalidad, en plena luz del día.

—Haré que te sientas bien Lan Zhan.

Inmediatamente sin alguna advertencia se sentó e introdujo todo el esplendor de su esposo adentro de él. Lanzo un suspiro fuerte y lo besó, el alfa era un cobarde, pero no Wei Ying, si tenía que hacerle el amor suave, brusco, lento, rápido, mojado, seco o como fuera lo haría hasta hacerle entender sus sentimientos.

Lo besó con desesperación, lamió la lengua de su esposo sintiéndose triunfante ante el control que tenía, intentó subir y bajar sus caderas de una manera lenta y sensual. Pero su ser deseaba más así que no tardó mucho en acelerar su ritmo torpe gracias a su poca experiencia, sintiendo su cuerpo adaptarse y tener por tan esperada sensación. Su ritmo fue subiendo, haciendo la piel chocar en un "papapa" de emociones.

El alfa fue tomado por sorpresa, no sabía qué hacer en ese momento más que aceptar las sensaciones y disfrutarlo, pero mientras lo hacían, mientras ese éxtasis llegaba a ambos él y su corazón querían explotar y desaparecer.

El interior del omega era demasiado sensible y satisfactorio para su cuerpo, la piel, que lamió y mordió era su vicio. Se aferró a sus caderas con desesperación esperando no soltarse jamás, Wei Ying siguió su ritmo, conociendo la resistencia de Lan Zhan procuró concentrarse en sus futuras palabras, concentrarse en aquello que ha estado pensando pero que no pudo confirmar hasta ese momento cuando ambos tuvieron a los conejos.

Días atrás incluso cuando lloró en los brazos de su hermano sintió que podría decirlo, pero no se atrevió a tanto, ahora lo entendía. Entendía porque siempre quería dormir abrazado a Lan Zhan, porque su olor era su lugar seguro, porque siempre de manera involuntaria dormía en su hombro mientras viajaban. Le gustaba comer juntos, le gustaba tomarlo de la mano mientras estaba dormido en el auto, haberlo convencido de bajar las ventanas y disfrutar la briza fresca por la mañana.