🐉 House Of The Dragon 🐉
Valyria Targaryen. Hija de Viserys I. Nombrada como la antigua ciudad por ser el lugar de donde sus ancestros provenían , los señores Dragón. Se les consideraba más poderosos que los mismos dioses y más fuertes que ninguno...
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Tras el consejo , Valyria decidió que no era momento de volver a sus clases de Valyrio. Su mente estaba lejos de querer atender a aquellas enseñanzas, en su mente había algo que ocupaba toda su atención... y aquello era el destino que había tomado las andaduras de su tío.
Caminó hacia la dragonera y bajó en busca de Beyron. Valyria era la única persona que podía bajar a aquel lugar a excepción de los adiestradores y guardianes de los dragones, Valyria tenía algo especial con ellos, ningún dragón la veía como una amenazada... inclusos los adiestradores creían que Valyria sería capaz de montar cualquier dragón aún sin ella ser su jinete.
-Hola pequeño- Saludó a su dragón caminando hacia él con una pequeña sonrisa acariciando su gigantes hocico- ¿Has echado de menos a mamá?- Comenzó a caminar hacia la gran cadena que ataba la pata del dragón para que no escapase del lugar.-
Cuando este ya estaba libre ,Valyria sonrió mirándole para después caminar hacia él. A diferencia de los demás dragones, Beyron no necesitaba ser controlado para que no se escapase, no necesitaba ser controlado para que no se pudiese rebelde, no necesitaba nada. Ella sola sabía dominarlo, ella sola sabía retenerle... o más bien, solo ella sabía hacer todo aquello.
Subió a lomos de aquel grandísimo dragón y le dio unas caricias en su cuello
-Sal de aquí Beyron. Vayamos a volar- Le indicó sonriente-
Este así hizo. Comenzó sus andares hacia la salida de la fosa y una vez fuera este soltó un gran gruñido que se pudo escuchar en todo Desembarco, la furia negra había salido a disfrutar. Tras aquello se alzó en vuelo y no tardó mucho en llegar una enorme sombra a desembarco que duró por unos largos segundos. Era tan grande la inmensidad de Beyron que oscurecía el sol por ahí donde pasaba.
- Vayamos a Rocadragón pequeño- Le llamaba con cariño-
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Daemon se encontraba sentado en la mesa de planificación de mando de la isla. Mesa en la que estaba tallado el mapa de los siete reinos. Mapa en el que podría crear estrategias para conquistar lugares, o amenazar si quería las tropas de su hermano, Viserys era "cobarde" jamás entraría en guerra con él, si quería molestarle lo conseguiría fácil, y así conseguiría todo lo que él quisiese.
Pero lejos estaba esa idea de la cabeza de Daemon. A decir verdad su acción de robar el huevo solo había sido una forma de llamar la atención de Valyria, era lo único que añoraba de Desembarco... a su pequeña sobrina.
