-ay Ana por favor, debe de ser de color azul
-que no el rojo es más llamativo y elegante
-si que es más llamativo pero en este caso debe de ser de color azul
-que no!!
-que si!!
-bueno bueno dejen de discutir, y Ana no seas tan terca hazle caso a tu novia
-hola doña Isabel
-pero mamá
-pero nada, pero querida en qué quedamos que me tendrás que decir
- suegra ya lo sé pero se me estaba olvidando, ya que su hija- mira ana- no quiere aceptar que le queda el azul y no el rojo
-mi hija puede ser aveces un poquito terca
-poquito no , es terca a morir
-oigan oigan, estoy aquí, no estoy pintada
-lo siento cariño pero es la verdad
-si hija es la pirita verdad, bueno venía para decirles que dentro de tres hora va a llegar el ejecutivo
-ay es cierto gracias madre por recordarme
-bueno yo ya me voy
Doña Isabel o como ahora le tenía que decir suegra gracias a Ana, nombre todavía no le perdono el que aya dicho que si, bueno por el momento me voy a concentrar en el color del vestido de Ana, si ella odia los vestidos pero su mamá y su papá la obligaron, pero es más terca que una mula, por dios en que me metí, aún no lo creo ya casi dos meses con esta enorme mentira, causa de los pleitos que tengo con Ana.
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-ana en donde estas- abrí la puerta de su despacho ya que sabía que no necesitaba tocar pero cuando abrí me encontré a Ana y a una chica besándose, Ana la agarraba de la pierna y la chica del cuello, me dio un tremendo coraje y no se el por qué pero me dio un coraje que quería agarrar de las greñas a la chica, lo único que hice fue cerrar con fuerza la puerta, y fui hasta el elevador quería irme de ahí, el mendigo elevador estaba en planta baja y como tardaba en subir, no quería ver a ana estaba tan enojada.
Narra Ana
Estaba disfrutando de un rico beso cuando de repente escucho como cierran la puerta de me despacho tan fuerte que mordí a la chica, le pedí disculpas y salí para ver quien fue el que cerró tan fuerte mi puerta, no había nadie al abrir me asomo y había una persona esperando al elevador, tremenda sorpresa fue cuando vi quien era.
-veronica?- al principio no me contestó, así que volví a hablarle-vero
-que quieres Gabriel
- viste algo
-lo suficiente para terminar lo que nunca empezamos
-ohh no por favor no Vero, eso no ya mis padres lo saben, no los quiero decepcionar- estaba realmente enojada pero por qué si ni siquiera somos algo, lo somos delante de la gente
-pues hubieras puesto seguro a la puerta- se voltio, me vio a los ojos, dios en sus ojos verdes se miraba que me queria matar y no tengo escapatoria
- Vero estás celosa de que la bese a ella y no a ti
-celosa yo por favor, aparte no necesito de un beso tuyo
-que no necesitas dices, entonces por qué eso reacción
-por que pudo aver entrado tu madre y le hubiera dado un paro cardíaco
-sisisi me madre, pero mi amor tú y yo no somos nada para que andes de celosita
-QUE NO ESTOY CELOSA!!
-ya por qué te enojas que bese a otra
-ay por mi besa a cuántas se te plasque pero que no sea en las galerías
-que bese a las que yo quiera, entonces no te molestas si fueras tu- no deje que me contestara la agarre de la cintura y la pegue a mi, la bese al principio fue un beso literalmente forzado, intentaba soltarse de mi, e incluso usaba una fuerza tremenda para apretar sus labios y no besarme, pero después se fue calmando, y aceptando que ya había atrapado sus labios, me correspondió después de unos minutos, puso sus brazos en mi cuello y yo tenía las manos en sus caderas, nuestros labios poco a poco se fueron coordinando, la suavidad con la que me daba el beso, su sabor a fresas, su mano jugando con mi cabello y las mía en una de sus piernas, las apague a la pared, subió su pierna lentamente, sentía el calor subir por mi cuerpo, la necesidad de tocar más entro en mi, mi lengua pidiendo acceso, ambas lenguas jugando, de su boca salió un hermoso gemido, mi mano subia por su abdomen hasta llegar a uno de sus senos, otro gemido salió, la excitación estaba al borde del colapso.....
Continuara......
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Un Amor...
Fantasyse trata de una historia de amor fugaz, entre una empresaria muy prestigiosa de Miami y de su secretaria.... Pero antes de ese amor se podrían decir que el odio puede llegar a muchos destinos y uno de esos es al amor