Capítulo Nueve

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- Tae - Dijo moviendo el cuerpo del chico para que este despertara - Tae, despierta.

Poco a poco los ojos del menor se empezaron a abrir. Al despertar trató de ver donde se encontraba. Pero solo pudo ver a Jin a su lado y una habitación un poco oscura.

- ¿Dónde estamos? - Preguntó Taehyung viendo a Jin mientras se acomodaba.

- En el sótano.

- Oh, mierda - Maldijo.

Taehyung sabía que ahora esto realmente se había ido a la mierda.

- Debemos salir de aquí.

- ¿Y cómo haremos eso? - Preguntó Jin.

- Primero debemos quitarnos estas molestas esposas - Dijo viendo las esposas que se encontraban en sus tobillos.

Justo en el momento en que Jin iba a empezar a hablar, ingreso al lugar la madre del menor.

- Seokjin, nunca debiste entrar a nuestra casa - Dijo negando con su cabeza, fingiendo decepción.

Y ahí Taehyung y Jin se dieron cuenta de algo, y era que realmente se habían jodido.

[...]

Los tres chicos conducían lo más rápido que podían. Jungkook por alguna razón tenía un presentimiento, no sabía que significa ese presentimiento, pero quería averiguarlo.

Tardaron unos minutos en llegar al lugar, se apagaron sus motocicletas y se bajaron rápido de estas. En el lugar ya se encontraban varios guardaespaldas, y eran solamente los mejores.

- Este es el último lugar en donde se supo que estaba Jin - Dijo Namjoon viendo la casa que se encontraba frente a ellos.

- Debemos entrar - Dijo Jungkook sacando su arma.

- Esto debe ser rápido, ya que sí no está aquí, Jin puede estar en peligro.

Tanto los chicos como los guardaespaldas empezaron a caminar. Namjoon adelante, seguido por Yoongi, Jungkook y Hoseok, y atrás de todos ellos iban los guardaespaldas.

Uno de los guardaespaldas se adelantó y abrió la puerta rápidamente, se apartó y dejó avanzar a los chicos, los cuales traían un arma en mano y estaban alertas por si pasaba algo.

Mientras avanzaban cuidadosamente se pudieron escuchar unos gritos los cuales pusieron alerta a todos. Y por alguna razón el lobo de Jungkook reaccionó ante esos gritos.

Nuestro alfa, hay que ayudarlo.

Dijo el lobo de Jungkook, algo enojado y preocupado a la vez.

- Mierda - Maldijo Namjoon - Esos gritos son de Jin y Tae.

- Vienen del sótano - Mencionó Hoseok.

Jungkook no espero mucho y se adelantó, estaba siendo guiado por los gritos, los cuales cada vez eran más desgarradores. Los ojos del omega se tornaron de un color rojo intenso, lo cual significa que su omega había tomado el control, y estaba realmente enojado, ya que normalmente cuando su omega tomaba el control, sus ojos se tornaban de un color dorado.

El omega llegó a la entrada del sótano y pateó la puerta con fuerza, dejándola destrozada. Lo primero que pudo ver al entrar al lugar y bajar un poco las escaleras, fue a Taehyung siendo golpeado y a Jin gritándole a una mujer diciéndole que parara de hacerlo, ya que lo estaba lastimando. Y ver todo eso solo causó que este se enojara más de lo que ya estaba.

No lo pensó mucho y decidió guardar su arma y se empezó a acercar hacia la mujer que suponía que era la madre de Taehyung. Y cuando la tuvo cerca, el omega agarró la cabeza de la mujer, obligándola a mirarla, para luego proporcionarle un golpe en el rostro y el cual la tiro al suelo por lo fuerte que fue.

- ¿Qué carajos? - Preguntó confundida mientras se levantaba del suelo y masajeaba la zona en donde fue proporcionado el golpe. Aunque el omega no dejó que se levantará por completo y le proporcionó otro golpe en el estómago, tumbándola al suelo.

El omega no esperó mucho y se acercó al hombre, el cual se encontraba grabando todo con su teléfono y le proporcionó varios golpes en el estómago, mientras que el contrario trataba de cubrirse. Ante el último golpe el hombre calló al suelo adolorido y cubriendo la zona en donde había sido golpeado. El omega de Jungkook se dio la vuelta y agarró lo que al parecer era un gran tubo de metal que se dirigía a su cabeza, el cual era sostenido por la mujer.

- ¡Jin! - Gritó Namjoon corriendo hacia él.

El menor decidió ignorar el grito y le arrebato el gran tubo de metal de las manos de la mujer y lo tiro a un lado, para lograr proporcionarle un golpe en el rostro y varios en el estómago, tumbándola al suelo otra vez.

Los ojos del omega cambiaron nuevamente al color natural de los ojos del omega, lo que significa que su parte humana había tomado de vuelta el control. Jungkook se dio la vuelta y se acercó a Taehyung, el cual se veía realmente mal, ya que tenía varios golpes y heridas, además de que se encontraba inconsciente. Se agachó y observó el estado en el que se encontraba el menor, lo cargó en sus brazos y se levantó, estaba decidido a salir de ese lugar lo más rápido posible, pero fue detenido por una persona.

- Tanto tiempo, Jungkook.

- Hola Seokjin - Saludo mientras se daba la vuelta para poder verlo.

- Seokjin mis huevos - Dijo Jin enojado - ¿Por qué no me has llamado?

- He tenido mucho trabajo últimamente.

- Ay, ajá.

- Es la verdad hyung, y sí no me cree, es su problema.

- Como digas.

Jungkook solo pudo reír ante su respuesta.

- Me tengo que ir, Taehyung está grabé.

- Cuídalo, porque sí le pasa algo, yo mismo te mato - Le advirtió Jin - Después quiero una explicación de cómo lo conoces.

- Tranquilo hyung, lo cuidaré - Dijo Jungkook y sonrió un poco - Nos vemos luego chicos.

El omega se despidió de todos, se dio la vuelta, y empezó a caminar para salir del lugar. Después de caminar un rato ya se encontraba fuera de la casa en donde lo estaban esperando varios de sus hombres. Se acercó al auto y uno de los guardaespaldas le abrió la puerta del auto, Jungkook primero recostó con cuidado a Taehyung en el asiento y después cerró la puerta para poder entrar desde el otro lado del auto. Entró en este y se sentó en el asiento, no sin antes quitar con cuidado la cabeza de Taehyung, para que este se recostara sobre sus piernas. Jungkook empezó acariciar la cabeza del menor con mucho cuidado, estaba preocupado por la salud de aquel chico, ya que se veía muy débil en ese momento.

Jerarquías sobrevaloradas | Kookv |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora