Al abrir los ojos, todo lo que pude ver fue un gran techo blanco, al intentar moverme, un repentino dolor se hiso presenté en todo mi cuerpo, en cuestión de segundos un mismo dolor se originó desde mi cabeza solo que este fue mucho mas fuerte que el anterior, junto con el dolor los últimos recuerdos que tuve antes de caer inconsciente regresaron a mi como si de una avalancha se tratase, cuando pude controlar el dolor fue cuando me puse a investigar donde estaba exactamente; por las paredes blancas que estaba ami alrededor y la maquina de electrocardiograma que se encontraba ami lado izquierdo pude saber con exactitud que me encontraba en un asqueroso hospital. Al levantarme el mismo dolor que tuve hace algunos minutos regresó, haciéndome sacar quejido sordo que rebotó en aquellas paredes blancas, al revisar mi cuerpo y ver las vendas que cubrían todo mi torso era mas que evidente que tenía por lo menos dos costillas rotas, Ignorándolo por completó, me dirigí al casillero donde se encontraba mi ropa que tenia puesta hace algunas horas, al cambiarme por completó busque alguna forma de escapar del hospital sin ser detectado, al salir del cuarto camine por algunos pasillos buscando alguna posible salida, escondiéndome ocasionalmente de los doctores y doctoras que se dirigían a donde yo estaba, al dar vuelta por una esquina de los tantos pasillos que había pude ver ala lejanía una palanca de emergencia, acercándome a ella revisando a mi alrededor de no ser visto, al estar seguro de estar solo tire de ella haciendo que el sonido de la sirena se escucho por todo el hospital, los guardias de seguridad junto con los doctores corrían por todos los pasillos, evacuando a los demás pacientes, por mi parte solo me puse el gorro de mi suéter y me mezcle con los demás que estaban evacuando el edificio, al estar ya en las calles me escabullí entre toda la multitud que se encontraba de expectante.
Al estar lejos del hospital, tomé el autobús que me llevaría ala antigua casa donde viví y crecía, ala casa de "mi querida madre", con la casa de mi hermana totalmente destruida a causa de la explosión, mi única opción fue aquélla antigua casa, la casa donde mi madre fue asesinada.
Al llegar y abrir la puerta, la vista que vi era una que cualquiera se podría esperar después de haber dejado su casa sin ningún cuidado, la sala principal junto con los muebles se encontraban cubiertas de polvo, restándole importancia subí la escalera que conducían a mi antiguo cuarto y al cuarto de mi madre, al estar arriba pude divisar que en la puerta de su antiguo cuarto había una cinta amarilla en forma de equis que no permitía entrar, ignorando ese detalle por el momento me di la vuelta y abrí mi cuarto, las vistas eran las mismas que había abajo, todo lleno de polvo. Después de recoger todo y arreglar el lugar que iba a ser mi hogar de aquí en adelanté me deje caer sobre mi antigua cama, prendiendo el celular poco después de estar acostado, al encender las notificaciones de los E-mail se hicieron presentes, fue en ese momento cuando me acordé de lo que había olvidado, rápidamente ingresé al E-mail que había dejado como método de contestación, al revisarlo había un total de 20 correos. Algunos decían cosas estúpidas, tales como ''suena divertido el juego, ¿Puedo jugar?´´ otras como, ''¿Eres Sherlock Holmes?´´ pero hubo uno en especificó que me llamo la atención, ''Hola, es un placer poderme comunicar con usted, me presento me llamo Alessandro Costa, puede llamarme Sr. Costa, soy el oficial a cargo de la investigación sobre el caso de la muerte del alcalde, tenemos pruebas de que la persona que pusiste en el periódico es la misma que mato al alcalde, por lo tanto ¿Te importaría vernos en algún sitio? Me gustaría saber si posees información que nos ayuden a localizar al asesinó del alcalde, si es que si nos puedes ayudar estaré esperando tu mensaje, que tengas un buen día.´´
Al terminar de leer el mensaje, mi inigualable sonrisa de psicópata regreso completamente ami rostro, es evidente que aquél que mando el mensaje no fue nada mas y nada menos que el mismo carnicero, debe de pensar que la persona que está al otro lado del correo electrónico debe de ser un completó idiota capas de creer semejante estupidez sobre el oficial, Subestimarme será el error más grande que cometerás, para clavar el último clavó, en el mismo mensaje hace mención sobre el asesinato del alcalde, cuando el único que sabe quien lo mato… soy yo, ya que la única grabación existente sobre aquella noche la tengo en mi poder, eso deja mas que claro que los únicos que posen esa información soy yo y el mismo.
Despues de estar unos minutos en completó silencio, decidí contestar el mensaje.
''Hola, ¿que tal oficial? ¿Como se encuentra? Me alegró de recibir su mensaje, y respondiendo su pregunta, claro que si me gustaría verlo y poder ser de ayuda en la investigación de nuestro alcalde, ¿Le parece si nos vemos en mi casa a las 12 p.m.? Esa hora es perfecta para poder evitar ala demás gente y no generar confusiones, Le mando la dirección, es calle Aragón #354 estado de Conway, lo estaré esperando oficial, que tengo un excelente día.´´
Al finalizar de escribir la respuesta me senté en el borde de la cama, dejando mi celular aun lado de mi, mi mente trabajaba rápido tenía que crear un plan para poder matar al carnicero, la hora en que lo había citado era una hora mas que perfecta para poder matarlo sin ninguna complicación, los vecinos están durmiendo, las calles están vacías, el cielo esta oscuro, era la hora perfecta para cometer un asesinato.
Baje al sótano, donde anterior mente era el embalsamiento de los cuerpos que llegaban, con la mirada buscaba algún objeto que me fuera de ayuda para poder matarlo, al estar buscando por algunos minutos pude encontrar algunos frascos que combinados con un veneno para ratas podían crear una sustancia tóxica para matar de poco a poco a un ser humano, lo único que faltaba era algo que pudiera crear una cortina de humo del mismo gas toxicó, después de estar pensando que podía servir la conclusión golpeo mi cabeza, rápidamente fui al piso de arriba desconectando el tanque de gas y la manguera que conducía el mismo gas ala estufa, conecte una de las mangueras ala sustancia tóxica y la otra manguera la pase por arriba de la puerta que daba al sótano, me aseguré de que todo estuviera en orden, al estar satisfecho, me dispuse a bloquear la puerta con algunos objetos cercanos que tenia ami alrededor, al estar completamente bloqueada me dirigí ala puerta trasera del sótano la cual se solía utilizar para que los forenses pudieran depositar más fácil el cadáver en la área de trabajo, al llegar saque varios objetos que fueran pesados y firmes para poder bloquear la puerta por afuera, al encontrarlos los escondí por los alrededores de la puerta, con la misma oscuridad de la noche con el simple ojo humano sería imposible verlos, para finalizar el plan puse una grabadora que se activará desde mi celular, la grabadora era solo de precaución, había grabado mi voz invitando a pasar a mi visitante para haci no ponerme en riesgo y hacer que el carnicero entre ala trampa completamente sólo, al finalizar los detalles y estar satisfecho le di una rápida mirada al reloj que colgaba de la pared, faltaban tan solo diez minutos para que diera inició el espectáculo, con todo ya listo me dispuse a esconderme dentro de mi carro, mientras me fijaba en el retrovisor si alguien se acercaba, mediante el tiempo pasaba un solo pensamiento que cruzó por mi mente, un pensamiento que solo tuve una vez y que en esta ocasión se volvía a repetir, parecer que la señora weasley todavía me persigue después de todo.
«Era hora de mover la siguiente pieza».
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Los Demonios De Conway © ✔ (COMPLETA ✔)
Mystery / ThrillerLeonardo Smith es más que un simple humano, un psicópata que esconde un oscuro secreto. En el pasado se enfrento a dos demonios con habilidades excepcionales, pensó que todo había acabo, que todo se quedo en el pasado... Pero estaba más que equivoca...