Capítulo 22: Verdad

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Walburga.

Algo andaba muy mal con mi marido. Sí, nos casamos por obligación y no por amor, pero siempre se preocupó. Siempre se preocupó por mí y por los chicos, incluso si Sirius era una molestia. Después de que echara a Sirius tan... tan violentamente, me pregunté en qué se estaba convirtiendo mi marido. ¿Era la presión adicional del Señor Tenebroso? ¿O realmente era tan despiadado como para torturar a su propio hijo, sólo porque le faltaban el respeto? No, no lo creía, tenía que haber otra razón. Además, mi Reggie. Era tan distante y siempre parecía tener miedo de Orión. Siempre se escondía en la biblioteca y sólo hablaba con sus tutores y con Kreacher. ¡Kreacher! ¡Eso era lo que podía pedir! Lo llamé a mis aposentos.

"¿Si ama?" dijo Kreacher.

"Hay una tarea que necesito que hagas" hice una pausa "pero tienes prohibido decirle a Orión"

"Si, ama" respondió Kreacher.

"Debes espiarlo. Incluso con el Señor Oscuro. Debes decirme qué ha cambiado en él. ¿Por qué ha estado tan distante y enojado? No debes ser atrapado, y si lo haces, no confieses por orden de nadie". Dije. Mi corazón se aceleró por lo que acababa de pedir.

"Si, ama, lo descubriré lo mejor que pueda" Kreacher asintió.

Odiaba tener que depender de un pobre elfo para completar un trabajo. Al menos a este elfo no se le permite desobedecer.

Regulus.

No pasaron ni 5 minutos de que mi madre llamo a Kreacher cuando el volvió.

"¡Maestro! Su madre sospecha que algo esta mal con el maestro Orión" Kreacher dijo desesperadamente "Ella quiere que lo espié"

"Pensé que estaba siendo un poco extraño, sólo pensé que era el cambiar de los tiempos. Entonces, ¿eso significa que ya no puedes hacerme compañía?" Pregunté.

"Desafortunadamente, eso es correcto maestro Regulus" dijo Kreacher.

"Esta bien, es mejor que regreses a tu trabajo entonces" respondí.

El desapareció en un rápido pop y yo comencé a arreglarme para el baile.

Lily.

La entrada al baile era exactamente lo que esperaba. Una gran sala de reuniones en la que los invitados serían registrados en la lista y se les permitiría entrar en el salón de baile. El salón tenía una enorme lámpara de araña que iluminaba el inmenso espacio. El techo era como el de Hogwarts, sólo que, en lugar de un cielo, parecía el espacio exterior. Me sorprendió, como mínimo. Sev me tiró de la mano,

"Por aquí Lily" dijo firme, nos guio hacia un guardia.

"Severus Snape y esta es mi acompañante Lily Evans" dijo de manera importante, el guardia nos miro de arriba abajo y nos dejó pasar.

Esa fue la parte fácil.

El salón de baile era gigantesco. Casi más grande que todo el gran salón de Hogwarts. Había una zona para bailar y había música en directo. Había mesas y un buffet. Había políticos sentados en una larga mesa, en profunda discusión. Severus nos llevó a una mesa en la esquina con tres personas sentadas en ella.

"Hola Severus ¿Por qué trajiste a una Sangre sucia como acompañante?" pregunto Lucius.

"Exacto, traje un acompañante" Sev dijo. Sabia que no me iba a defender, pero aun así dolía.

"¿Es este tu joven amigo Lucius? Es bastante... interesante. ¡Y es la sangre sucia más adorable que he visto! ¿Verdad, cariño?" Dijo la señora del pelo enloquecido. Lucius se erizó.

Why I Now Hate DraperyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora