Capítulo 8

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Estaba sentada en la cafetería esperando a mi amiga Anna, fue a hacer unas compras, mientras esperaba a que ella llegara, yo leía unos versículos de la Biblia acompañada de una taza de chocolate, noté que dos personas se habían asomado a la puerta principal de la cafetería. 

Giré mi mirada y lo vi a él, George venía junto con Will. 

Me levanté de la mesa, tomé la revista en mis manos y caminé hasta la puerta para abrirla, con cada paso que daba, sentía que mi corazón se iba rompiendo, jamás pensé que George viniera a buscarme, mucho menos que volviera aquí. 

—Hola, George, ¿Vienes a mentirme de nuevo?— Dije con decepción mientras le enseñaba la revista. 

—Alyssa, hola... Veo que ya te diste cuenta de esa fea noticia... Estoy aquí para explicarte todo, es la verdad y nada más que la verdad— Dijo apenado. 

—Disculpe que me entrometa, pero George tiene razón, señorita Alyssa, él vino para aclararte todo, créame que va a entender esta versión de la historia— Agregó Will con una sonrisa. 

—Está bien, te escucharé— Dije mientras los dejaba pasar. 

—¿Desean café, chocolate, capuchino, repostería?... La casa invita— Mencioné con una débil sonrisa dándoles algunas opciones. 

—Yo deseo un capuchino y una dona, por favor— Contestó George apenado. 

—Muchas gracias, señorita Alyssa, a mí me puedes traer un café con un sándwich de pavo, pero... Primero iré a caminar un poco por la ciudad mientras ustedes dos hablan— Decía Will mientras caminaba hacia la puerta. 

—Will... No te vayas, por favor— Mencionó George en tono de súplica. 

—Oh, no, amigo, es tu chica, no quiero interrumpirlos, yo ya regreso— Decía mirándolo con sonrisa en el rostro. 

Will salió rápidamente por la puerta, sin fijarse en el camino, no había notado que mi amiga Anna venía con unas cajas pequeñas en ambas manos. 

Los dos chocaron y cayeron al suelo, Anna se disculpaba una y otra vez con Will. 

—¡Dios mío, qué vergüenza!, perdóname, por favor, venía rápido y no vi por donde iba— Decía mi amiga levantando las cosas del suelo.

—No te preocupes linda, déjame ayudarte— Replicó Will con una sonrisa mientras la ayudaba a levantarse. —Por cierto, mi nombre es Will, Will Brown— Agregó con una sonrisa. 

—Mucho gusto en conocerte, Will, soy Anna Davis— 

—Encantado de conocerte, Anna— 

Ambos estrecharon sus manos con una sonrisa que no se borraba de sus rostros.

George y yo veíamos todo desde la ventana, Anna y Will reían nerviosamente mientras juntaban las cosas del suelo, parecía como esas películas románticas que le encantan a mi pequeña hermana Alexandra. 

Anna metió las cajas en su auto, que estaba estacionado frente a la cafetería, me hizo una señas de que ya volvía y se fue caminando con Will, yo le sonreí. 

—Bueno, eso sí fue un bonito accidente— Decía George mirando por la ventana con una sonrisa. 

Él giró su mirada hacia mí, nos sentamos en la mesa, y él tomó mis manos. 

—Alyssa, escúchame, por favor... perdóname por no haberte dicho la verdad anteriormente, pero yo no quería que pensaras que estaba tratando de impresionarte por mi apellido, dinero o lujos— Decía apenado.

Estaré En Tus Brazos Esta Navidad (Novela Cristiana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora