Date with Genshin Boys

Olor a uva

Ya llevan varios días lloviendo en Mondstadt , una bendición de invierno para muchos, para otros no tanto y menos si no disfrutas aquellos deliciosos campos verdes y el aire cálido de tu bella Monstad.

Entre suspiros y aburrimiento, buscas que hacer en el cuarto día de lluvia, tu compañera de viaje Paimon dormía plácidamente después de ver comido un gran banquete qué le hiciste con cariño y amor, la miras con ternura y acaricias su suave melena platinada, mientras te regala una sonrisa, tu mira vuelve a concentrarse hacia la hermosa ciudad sin un alma, hasta que tu mirada capta una figura alta, con gabardina cubriendo su cabeza, sin poder ver el rostro de aquel extraño.

Pero un delicioso aroma de uva golpea tus fosas nasales y tu corazón da un brinco de emoción, sin hacer ruido sales a prisa de tu cuarto de hotel para acompañar a aquel invitado, tratando de no ser tan obvia en aparecer frente a el pero no puedes evitar acercarte a saludarlo con una radiante sonrisa.

- Buenas tardes Diluc-

El pelirrojo voltea con a verte con esa penetrante mirada mientras te regala una pequeña sonrisa, únicamente solo para ti.

- Buenas tardes t/n, ¿qué te trae por aquí?-

Su voz suave y sería acaricia tus oídos con aquella sinfonía, tornando tus mejilla con un leve sonrojo.

-Te mire por la ventana de mi cuarto, admiraba la lluvia pero me gustaría que Monstad pudiera recibir la calidez del sol y salir a más aventuras- respondes su pregunta - ¿Vienes a laborar?-

- Algo así, de hecho venía a comprar unas cosas para el hogar....pero estaban en contra qué saliera con este clima, al igual que tu también estoy algo disgustado del clima después de varios días-

- Jejeje ya me imagino la reacción de Adelinde al enterarse qué estas fuera de la mansión-

Suspira algo cansado

- No lo dudes-

-Será mejor que continúes con tus compras, por suerte algunos puestos siguen laborando pero no estés mucho tiempo fuera y vayas a coger un resfriado-

-......Gracias t/n aprecio la preocupación-

Momento de silencio.

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Ambos sin saber que más contribuir a la conversación te pones nerviosa y decides despedirte para dejar qué continúe con su camino, no sin antes de que el pelirrojo tome de sorpresa tu muñeca deteniendo tu paso.

-Espera-

- ¿S-si?-

-Ah....perdón, no era mi intención de asustarte- suelta con delicadeza -....¿gustas venir en mis labores?-

Tu sonrojo por suerte pasa desapercibido con el frio de la lluvia, asientes tu cabeza y ambos continúan con las compras, apesar de que Diluc es un hombre de pocas palabras o no socializar bastante, siempre tenia tiempo para ti para establecer una conversación, cuando regresas de tus aventuras le escribes cartas sobre lo que ha pasado y le mandas algunos pequeños obsequios qué conserva en su oficina(¿como sabes esto?, digamos que una adorable sirvienta te contó a escondidas de el).
Una pequeña conversación con el se realiza mientras caminando juntos disfrutando de aquella lluvia, por suerte encontraron todo lo que necesitaba, te invita al bar a tomar una bebida caliente y a tu suerte la casa paga aquella bebida, dando un brinco de emoción sin percatarte de una pequeña sonrisa en el rostro de tu amor platónico.

Para mala suerte de Diluc al entrar al bar, se encuentra con Kaeya, Venti y Rosaria, esta última le agradaba más que el par de borrachos qué la estaban acompañando, corres a saludar a tu querido amigo bardo mientras qué Diluc pide las bebidas para ambos.