De regreso a "Casa" [Luckity]

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Una luz brillante sobre sus párpados cerrados era su única forma de despertar de esa pesadilla.
La oscuridad que lo rodeaban, su cuerpo caer desde lo alto, se inclinó un poco hacia adelante con lágrimas en los ojos queriendo alcanzarlo, quería hacerlo...pero no podía. Las cadenas jalaba de sus alas y solo podía ver como el cuerpo caía desde lo alto de la torre.
Viendo con desesperación en sus ojos al ser de verde.

No podía salvarlo...

— Está bien...no necesitas hacer más Quacks.

Una voz suave contra su oído hizo que abriera lentamente los ojos, sintiendo la cálida mirada de su amado sobre él, oh era verdad...talvez se había desmayado, aún sentía su cuerpo temblar por el acto pecaminoso pero placentero que estaban cometiendo ¿En qué momento había perdido la consciencia?

¿Te sientes bien patito? —preguntó el de ojos negros e iris rojizos al notar las lágrimas en sus ojos a la vez que volvía a la conciencia— vamos a parar ¿si?

¡No! —por alguna extraña razón, tenía miedo a soltarlo, no quería dejarlo...caer— estoy...solo...no lo sé.

El castaño entendió el dilema en el que estaba metido su patito, no lo culpaba, toda esta presión podría matarlos de manera literal.

Es verdad...

Morir ¿eh? Ya no tenían esa opción de volver a reaparecer en este mundo.

Sus vidas ilimitadas fueron reemplazadas por una sola vida canonica al pisar DSMP, esa fue una de las condiciones de DreamXD, es por eso que el miedo invadía a ambos, por más que el pequeño pato fuera un semidios y el otro fuera un guerrero de lo más fuerte.

¿Quién no tenía miedo a la muerte?

Y lo que conyeba morir uno, haciendo sufrir de manera inconsciente a las demas personas.

El castaño se acercó a besar las lágrimas de tristeza que desbordaban de los ojos del menor que anteriormente eran de puro placer, y con cuidado cambio la posición en la que estaban para poner al menor encima de él, tratando de no lastimarlo en el proceso, claro, no pudo evitar que este se removiera inquieto por la repentina profundidad.

Patito, escucha —acarició con sus dedos la mejilla del híbrido viendo lo vulnerable que era...lo vulnerable que eran ambos— yo...ya no puedo decirte que todo va a estar bien, porque ambos sabemos que no es así.

El pelinegro asíntio con tristeza tomando la mano del mayor y empezar a frotar su mejilla contra ella, disfrutando del consuelo que le brindaba.

—Pero lo que si puedo decirte es que hemos cambiado y madurado con el tiempo...es gracioso pensar que talvez...solo talvez en Karmaland los dos pudimos haber sido también felices.

—...¿Te arrepientes?

Nunca lo haría —respondio de inmediato sin darle tiempo al menor de cuestionarse— esto ya no es solo por nuestra "liberación" al pasado, con el tiempo me dice cuenta de que es mucho más que eso. nunca dude y nunca dudaría el seguirte hasta el fin del mundo...aunque talvez este sea nuestro final jajaja.

El menor sintió las mejillas sonrojarse y soltó una pequeña risa, bajando su cuerpo hasta quedar pegado a su amado, juntando su pecho desnudo con el contrario.

Es tan dulce y tan triste esto
He tenido varias pesadillas...no se, talvez recuerdos o talvez premoniciones —suspiró cansado mientras que dejaba al castaño acariciar su cabello quitando el gorro de su cabeza— desde que Los Dioses me hablaron directamente sobre estos poderes...aveces pienso que es mejor no tenerlos.

Aunque también tienen sus ventajas ¿no? —el híbrido soltó una risa y asíntio, a la vez que abría sus alas por debajo de las sabanas haciendo que estás colgarán provocando una risa en el contrario— ¿ahora eres un fantasma?