(Necesito mi receta)
1 de abril de 2021. Halsey Morrison.
Habían pasado ya dos semanas desde que Shirley y Barry habían obtenido los alimentos, tenía que comenzar a planear cómo obtener el medicamento, además, solo conocía el nombre de la medicina de Andrés, pero el de los demás era un misterio, esto me ponía las cosas más difíciles.
— Aún no sé cómo lo lograré... — Le externaba a Shirley mientras tomábamos nuestros alimentos de la barra, apenas nos íbamos a poner a desayunar, eran recién las 7:35 a.m.
— Descuida, saldrá bien, ya pensarás como — me tranquilizaba la rubia, tomando a la par la bandeja con su almuerzo para comenzar a caminar de manera calmada hasta nuestra banca habitual.
— Oye, me encanta tu vestido, tu estilo es muy lindo — le decía a la chica.
— ¡Gracias! Es un preciado honor que te guste, solo pocos captan su tan apolíneo encanto... tu vestuario no está nada mal — respondía entonces ella, con una cara de seguridad, halagando mi camiseta roja con blanco y mi short de mezclilla negro, nada que ver con su vestuario. Al estar hablando con ella no presté atención a lo que había frente a mí, así que, ahora sí que sin querer, choqué con la enfermera Ivonne, provocando un completo desastre en el suelo de la cafetería, pues, la enfermera, aparentemente tampoco me vió caminar, haciendo que chocásemos, derramando mi alimento en el suelo y un poco en el delantal de la mujer, afortunadamente, era un delantal.
— ¡Niña idiota! Esto amerita un severo castigo. — Gritaba acercándose con velocidad la enfermera Janeth, preparándose casi que para golpearme, sin embargo, Ivonne se puso en frente de mí, como si estuviese protegiéndome, abogando por mí en ese momento, exclamando las siguientes palabras.
— Descuida, Janeth, no hizo ningún daño, no veo por qué alarmarse — dijo ella.
— ¿De qué hablas? El suelo está totalmente repleto de su comida, no puedo creer que la defiendas, esta troglodita arruinó el suelo recién trapeado. — Decía la enfermera despotricando contra la pobre de Ivonne, sin embargo, ella no se quedó atrás y respondió, nuevamente, por mí.
— Relájate, Jany, solo ensució el suelo... podría quedarse a limpiar conmigo, si de verdad quieres castigarla, después de la hora del almuerzo puede quedarse aquí como castigo, mientras ustedes cuidan a los chicos que estén tomando clases. — Janeth seguía bastante molesta, sin embargo, no le quedó alternativa más que aceptar la oferta de Ivonne, haciendo así que se calmara el ambiente en el lugar, dándome así otro almuerzo para poder comer algo (afortunadamente no me quedé sin comer) y después quedarme a ayudar, al final, fué Ivonne quién terminó recogiendo la comida en el suelo.
Después de un rato, mis amigos se fueron al aula de clases junto con el profesor/director y las otras dos enfermeras, quedándome entonces sola con Ivonne. Una vez acabado el desayuno, me dirigí a la cocina con mi mochila en brazo, pues, la traía para las clases, sin embargo, después del incidente, me tocó llevármela conmigo hasta donde me esperaba la enfermera para comenzar a asear.
— Bueno, cariño, lamento tanto el malentendido de en la mañana, una disculpa por haberme tropezado contigo. — Creo que estaba de sobra decir que la enfermera Ivonne se diferenciaba de las otras dos por su amable y radiante carácter, ella era una muy buena persona en realidad, siempre intentó velar por nuestra salud, aunque claro, entiendo que no era fácil lidiar con una enfermera loca y con otra mediocre sin corazón.
— No tiene por qué, señorita, en todo caso, me disculpo yo, iba distraída y la verdad es que no la vi... — dije disculpándome ahora yo con aquella mujer.
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Si las paredes hablaran...
Bí ẩn / Giật gânMe han abandonado aquí para "sanar", mi "madre" jamás se preocupó mucho por mí y ahora se deshace de mí de esta manera... El manicomio, el último lugar en el que quieres acabar, el único lugar donde todo se vuelve más miserable de lo que ya era en u...