1981 SEPTIEMBRE

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Se viene, si no me equivoco, el último relleno de este libro! Espero que lo disfruten, es corto pero vale la pena leerlo.

Se viene, si no me equivoco, el último relleno de este libro! Espero que lo disfruten, es corto pero vale la pena leerlo

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Cada vez faltaba menos para el nacimiento del bebé de Artemis, faltaban días o tal vez semanas. Lo que más le aterraba a la joven era que la encontraran, se había escapado de su hogar por miedo a que maten a su bebé, decidieron esconderse junto con Lily y James en el Valle de Godric, obviamente que en casas distintas. Artemis creía que estando juntos los mantenía fuertes y se sentía protegida. Cómo era una noche de Luna llena, Lupin decidió irse de la casa para esconderse y no lastimar a su mujer o a su bebé que estaba a punto de nacer.

Artemis se encontraba en el sofá de su hogar, mirando su álbum de fotos donde ella estaba con sus amigos, sonrió un poco pero desapareció cuando recordó en qué situación se encontraba, estaban en guerra, ella temía por su vida y por la de su hijo, cualquiera la querría muerta por su poder. Sin embargo, se sobre salto al escuchar el golpe de la puerta de su casa, no dudo ni un segundo en tener su varita en la mano, lista para atacar quien fuera que esté en la puerta, pero al abrirla había suspirado, se sintió aliviada al ver la persona que se encontraba del otro lado de la puerta. Era su mejor amigo Peter Pettigrew, llevaba con el un ramo de flores

—Peter! Me alegro tanto de verte, ven pasa—dijo Artemis alejándose un poco de la puerta para dejar pasar a su amigo

—Ten, son para ti—le entregó el ramo de flores

—De verdad? Muchas gracias, Peter son hermosas—dijo Artemis mientras que olía las flores—Huele delicioso—. Se dirigió a la sala para poner el ramo de flores en un florero con agua, con su varita elevo el florero para ponerlo sobre un mueble que contenía algunas fotos con sus amigos

—Por supuesto que son para ti, estoy emocionado porque llegue el bebé

—Si, con respecto a eso... Quería comentarte algo, ven siéntate—comentó Artemis mientras que su amigo se sentó en el gran sofá de la sala—¿Quieres un poco de té?

—Si por favor. ¿Dónde está mi amigo Lupin? —preguntó curioso, mientras que su amiga le preparaba su té favorito

—Tuvo que irse... Ya sabes, es luna llena—dijo encogiéndose de hombro mientras que le entregaba el té a su amigo—¿Qué tal estás tu?

—Bien, estaba algo aburrido y vine a visitarte... Y dime que querías comentarme

—Ah si, eso... Bueno lo estuve pensando bien y no falta mucho para que mi bebé nazca, como Sirius ya es el padrino de Harry me gustaría que tu fueras el padrino de mi bebé—dijo Artemis muy segura

Peter se quedó asombrado, nunca imaginó que su mejor amiga o quizás la persona que siempre estuvo enamorado, le pidiera eso. Peter sonrió, pero con algo de tristeza. Por unos segundos recordó toda su vida en Hogwarts junto a ella. Peter estaba fascinado por su amiga Artemis, ella era gentil, encantadora, hermosa y una muy buena amiga, siempre lo ayudó en los momentos que más la necesitaba, en realidad era una persona que le gustaba ayudar a todo el mundo sin importar el precio y eso a Peter le encantaba, fue lo que más lo enamoró, su gentileza con las personas, para él ella era una reina, él deseaba con toda su alma que ese hijo fuera suyo

—Peter... ¿Estás bien? ¿No te gustó la idea? —le preguntó Artemis. El joven no se dio cuenta de que su amiga le estaba hablando, se había distraído con sus sentimientos, y por más que ya fuera tarde él estaba animado a decirle todo lo que sentía por ella

—Si... me gustaría la idea obviamente... Artemis necesito decirte algo, tal vez el día de mañana estemos muertos y no quiero morirme sin decirte esto—le dijo Peter, con lágrimas en los ojos

—¿Qué tienes? ¿Estás bien? —preguntó Artemis preocupada por su amigo, se acercó un poco para analizarlo

—No tengo nada, tranquila. Pero, quiero que sepas esto... Artemis yo siempre estuve enamorado de ti—le dijo sin dudarlo, Artemis se quedó sorprendida, eso no se la esperaba—. Se que suena raro, pero siempre lo estuve y... Se que ahora es tarde y estoy arrepentido de no habértelo dicho en su momento... Tenia celos por todo, celos de como mirabas a Remus, celos de como eras con él, cómo lo cuidabas. Cuando te propuso ser tu novia sentí que mi mundo se vino abajo... Pero me puse feliz por ti, eras feliz con él y eso era lo que me importaba. Sin embargo, tengo miedo de que algo malo te pase si estás junto a él, ya sabes de que te hablo...

—Remus jamás me lastimaría... Por algún motivo se va de aquí cada vez que es luna llena

—¿No piensas decirme nada con respecto a lo que te acabo de comentar? ¿Sólo vas a defenderlo? —preguntó Peter algo alterado

—¿Qué quieres que te diga? ¿Qué voy a dejar a mi esposo por ti? No, eres mi mejor amigo y te quiero. Lamento mucho por no quererte de la forma que tu querías...—Artemis no sabía más que decirle, encontraba a su amigo angustiado y se sentía culpable a pesar de que ella no hizo nada, solo se enamoro de Remus, no pudo controlar sus sentimientos hacia él, ella lo amaba con todas sus fuerzas, pero también sentía mucha pena por su amigo

—Lo entiendo... —Peter se levantó del sofá secándose las lágrimas, arrepentido de su confesión hacia su amiga—Espero que después de esto... Quieras seguir siendo mi amiga—dijo de repente, sin poder mirarla a los ojos

—Por supuesto que sí, esto no va a cambiar nada y también serás el padrino de mi bebé

Hubo un silencio incomodo en la sala, Peter parecía que temblaba de la rabia que sentía, pero luego se calmó se despidió de su amiga y caminó con pasos ligeros. Artemis lo miraba desde la ventana, triste por su amigo, pero lo que ella no se imaginaba es que en la persona que más confiaba la iba a traicionar. 

 

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Por ser cortito voy a subir otro jiji

Diana Lupin y El Prisionero de AzkabanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora