09

12 4 0
                                    

Me costó entenderlo, pero creo que ya me quedó claro.

No soy tan importante para ti en realidad.

Sí, puedes repetírmelo cuantas veces quieras, pero tus acciones embarran cuanta palabrería me des.

Me gustaba buscarte y darte conversación. Me parecía lo mejor, ya que temías tomar la iniciativa... O al menos eso creía.

Luego me percaté que era solo indiferencia. Si no te saludaba, posiblemente ni te acordaras de hacerlo tú también. ¿Que cómo lo sé? Porque he visto cuán fácil lo haces con los demás.

Dime, cuando tenías un problema, ¿siquiera se te pasó mi nombre por la cabeza? ¿Al menos pensaste en contarme? Porque siempre te ofrecí mi ayuda, solo para verte después quejándote de que nadie lo hacía.

¿Soy egoísta? Esa pregunta ha rondado por mi cabeza muchas noches. Fue hasta que analicé tus palabras que entendí que no. ¿Sabes por qué? Porque yo no me autoproclamé tu "mejor amigo".

Eso me lo dijiste tú. Yo solo tuve la culpa de creerlo.

Nunca confiaste en mí realmente, y eso está bien. Solo lo hubieras dicho y ya; no escapar al tema o fingir que no era así.

Porque, aunque me hubiera dolido, al menos no sería tan fuerte como lo siento ahora.

Y quiero creer que no eres consciente de ello. Porque si lo hubieras sido... Mejor no pensarlo más y comenzar a tomar distancia. Ya no quiero sufrir más.

Relatos cortos (Elle Goshi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora