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Bien, lo bueno de esto es que ya no estaba en el bosque...

Lo malo es que ahora estaba siendo tratado como un bebé ... Aunque lo es, pero en realidad no lo es... Pero lo parece ...

YA NI SABE QUE ES.

spreen estaba lleno de vendas, acomodado en un pequeño sofá que era para animales, algo así como las camitas para perros.

Mientras Mariana, su empleado de confianza, le hacía algo de comer, al parecer tuvo la mayor suerte del mundo, porque Mariana era el protector de los animales.

Y spreen es un animal ahora, así que llegó la hora de que todo el mal karma que tuvo se convierta en buen karma.

Vio como Mariana se acercaba y le dejaba un plato con comida ... Algo extraña ...

Bien, parecía comida para perro y el no comería eso, es un oso delicado.

- vamos, come, tiene todo lo que un oso necesita -

"Tu vieja va a comer eso "

Spreen se negaba a comer, pero el castaño no lo iba a obligar, seguramente el pobre animal estaba asustado y no confiaba en él todavía.

Acaricio la cabeza del osezno con suma delicadeza, Spreen no sabe porque pero eso le gustaba demasiado.

- me preguntó porque estabas solo, los oseznos no suelen estar lejos de su madre -

- aunque te me haces familiar ... ¿No eres el oso de drako? -

Spreen levantó sus orejas al escuchar el nombre de drako, eso confirmo las sospechas del de gafas.

- yo sabía que ese idiota no merecía tener una mascota, mira cómo te dejo -

El osito gruño, drako no tenía la culpa, pero tampoco podía hacer nada ahora.

Mariana se fue, dijo algo de tener que cuidar de los otros animales, spreen miro el plato de comida, aunque le diera asco, decidió probar un poco.

No sabía tan mal, estaba decente ...

Le dió otra probada, ahora sabía muy bien.

Le dió otra, dios su sabor era excelente

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Al medio día Mariana estaba bañando al osito, lavando cuidadosamente su pelaje, acariciando al pequeño.

Spreen estaba disfrutando de lo lindo, estaba muy cómodo, sonreía internamente, está es una de las ventajas de ser pequeño y tierno.

Cuando el baño termino Mariana comenzó a secar el pelaje del osito, le curo un poco las heridas que todavía estaban algo frescas y las vendo, ya estaba casi como nuevo.

Y digo casi porque el pobre osito cojeaba y no podía caminar bien.

En la tarde un invitado llegó, génesis.

- y ¿Ahí noticias del patrón? -

- no, es como si se lo hubiera tragado la tierra -

Spreen escuchaba todo mientras recibía mimos de parte de génesis, si supieran que él era EL PATRON se cargarían de risa en su cara.

- la última vez que lo vieron fue en la casa de zorman ... -

Vaya, al parecer iba a volver a ver a zorman.

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Queremos a Mariana

𝐁𝐞𝐛é 𝐨𝐬𝐨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora