Resiliencia (Steter)

Capítulo 13: Final

Esa mañana el viento soplaba muy frío, avisando que quedaba poco para que los termómetros pudieran bajar hasta los cinco bajo cero. Stiles dejó salir, el vaho de su boca mientras veía al sol salir por el horizonte, hoy por fin se decidiría quién sería el verdadero líder de ese territorio. La pantera se planteó acercarse a su pueblo caminando, calculaba que estaba a una hora más o menos, pero su pensamiento iba más allá de ganar la pelea. Él quería instalarse en la casa del líder, romper el mandato autoritario y cruel de Septhis para imponer el de los Stilinski, él que siempre había controlado al Clan. Sabía que eso no sería fácil, Septhis se había ganado un gran grupo de adeptos, pero el estatus de Stiles lo clasificaba casi como una deidad dentro de su raza, así que lo que él dijera sería ley. Sin embargo, primero tenía que centrarse en ganarle al cabrón que le había usurpado lo que le pertenecía. Subió al coche y les sonrió a los otros dos antes de arrancar y conducir hasta su poblado. Al ser una visita sorpresa esperaba pillar a Septhis un poco desprevenido, que eso jugaría a su favor, pero tampoco había puesto todas sus esperanzas en ello.

Stiles entró por el camino de tierra, notando su ansiedad subir por su pecho, si la usaba como había aprendido jugaría a su favor, si no sería una piedra más en la batalla. Pero había algo que lo dejaba tranquilo, el regalo de Raj y Sauda. Una daga creada con una piedra muy poderosa de los Rakshasa, con ella no solo le daba toda la fuerza de los demonios, sino que se creaba un pequeño trato entre ellos. Si la batalla salía victoriosa a su favor, él tendría que volver y devolver la daga en algún momento.

Cuando las casitas comenzaron a verse y las panteras salían a mirar el coche que iba directo a la plaza, supo que ya no había vuelta atrás. Aparcó en la plaza y puso la daga en su cintura antes de girarse a mirar a Peter, se acercó y besó los labios de este, dándole una seguridad extra ante aquel reto. Le dio una mirada rápida a Isaac antes de bajar y detenerse delante del coche, las panteras pronto empezaron a murmurar entre ellas sorprendidas de volver a ver a Stiles. Pero él hizo caso omiso y se quedó mirando la casa que presidía esa plaza, dónde el líder vivía.

- ¿¡Qué es tanto revuelo!?- Preguntó Septhis abriendo la puerta con rabia y quedándose sorprendido al ver a Stiles delante de él, los demás panteras del Clan los miraban sorprendidos y Septhis sonrió con maldad.- Pero bueno, si el hijo pródigo ha vuelto.- Dijo este acercándose, sin importar que estuviera únicamente con un pantalón y descalzo.- ¿Quieres que te mate de una vez por todas Stilinski?- Stiles sonrió acercándose a él, pero el ruido de las puertas del coche cerrándose distrajeron a todos, creando un ligero murmullo lleno de quejas y repulsión.- Acompañado de lobos, muy osado por tu parte.- Stiles sonrió poniendo sus ojos naranjas y haciendo que todos se callaran como acto de sumisión involuntaria.

- Y de un pueblo de Rakshasa, para más inri.- Dijo Stiles divertido sacando la daga que estos le había dado, provocando muchos jadeos de sorpresa.- Pues Septhis, resulta que vengo a reclamar lo que es mío.- El moreno se rio mientras ponía sus ojos verdes fosforitos, que no imponían ni la mitad que los de Stiles.

- ¿Ellos no te han matado y vienes a que lo haga aquí?- Preguntó con burla el moreno acercándose a él.

- No, como te he dicho, que pareces gilipollas...- Dijo rodando sus ojos y mostrando sus colmillos.- Vengo a reclamar mi puesto de Alpha.- Septhis arremetió un puñetazo en su dirección, pero lo esquivó sin apartar la mirada de los ojos del líder actual.

- Voy a hacer lo que tendría que haber hecho cuando mate a tu padre.- Dijo sacando sus garras y haciendo crujir su cuello. Los ojos de Stiles brillaron con más intensidad al analizar las palabras dichas por la pantera.

- ¿¡Que tú qué!?- Gritó antes de lanzarse y clavar la daga en el hombro de la pantera, este gritó lleno de dolor separándose de Stiles, viendo como la daga brillaba de un color verdoso afirmando la magia que en eso había. Se la sacó emitiendo otro grito de dolor, su brazo no estaba sanando y apenas podía sentirlo.- ¡Mataste a mi padre!- Gritó Stiles fuera de sus cabales, cosa que hizo temer a Peter que olvidara todo lo que había entrenado.