capítulo 12

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Jungkook

-Jamás lo hare.- le da una sonrisa para darle seguridad.
Con cuidado tratando de no ser brusco como realmente quería y asustar a su Ángel, lentamente comenzó a quitarle la remera (que por cierto era de el) revelando los grandes senos que no estaban siendo cubiertos con nada.

No le sorprendía pues desde que empezaron a dormir juntos Tae muchas veces buscaba su calor y se pegaba completamente a el haciendo que sienta sus prominentes pechos por eso le era inevitable no despertarse a mitad de la noche con un dolor insoportable en su entrepierna, pero por obvias razones jamás se atrevió a tocar o a vérselas en contra de su voluntad, solo recuerda haberlas visto el primer día que llego a su casa y fue por pocos segundos.

No las recordaba tan hermosas.

Sus tetas eras bien paraditas y redondas con unos hermosos pezones color rositas, y sumamente deliciosas.

Un gruñido de puro gusto salio del fondo de su garganta y sin poder evitarlo se lanzó a esas hermosas tetas y empezó a chuparlas como si se tratara de un bebé.

-A-ah Mm~ kookie.- Taehyung estaba muy avergonzado, nunca pensó que disfrutaría tanto estos tipos de actos.

-Joder Taehyung, como me pones... mierda- dijo jungkook separándose de su menor para poder quitarse la camisa con desespero para después volver a tomar los labios de Tae y esta vez besarlo esta vez con más hambre. Lentamente fue bajando sus besos a su cuello dejando marcas de paso para el que lo viera supiera que esa hermosa criatura tenía dueño. Fue bajando más de nuevo a sus tetas volviendo a meterlas a su boca, definitivamente ahora que las había probado nunca se despegaria de nuevo de esos bonitos pechos.

Siguió el recorrido por el plano abdomen besando de paso su ombligo y bajando hasta ese magnífico dulce que estaba muriendo por probar.

-hy-hyung que...qu-¿que va a hacer?.- escucho Jeon decir al más pequeño.

Sin contestarle abrió sus piernas lo más que pudo sorprendiéndose de la flexibilidad que tenía su princesa.
Bajo su mirada y vio su gordo coñito rosado, totalmente lampiño y muy mojadito. Su pene dolía horrores y estaba a nada de correrse sin siquiera haberse tocando... Era la primera vez en su maldita vida que deseaba tanto alguien al punto de querer tener su pene enterrado las 24 horas del día en ese codiciosos agujero que se cerraba y se abría en busca de que algo lo llenará soltando cada vez más exisitos jugos.

Un mangar que solamente el y nada más que el se comería a partir de ese momento.

Mio. Solo mío

Sin poder resistir un poco más enterró su cara en ese hermoso tesoro y paso su nariz por todo el lugar empapando su cara de los jugos ricos que seguía soltando tete escuchando el grito de placer que soltó Taehyung. Y ese hermoso grito fue la gota que derramó el vaso, su pene soltó tiras y tiras de semen manchando de paso el cuerpo debajo suyo.

-Mierda... mira princesa, solo vos podes lograr que salpique de leche sin haberme tocado y todavía seguir terriblemente duro.- agarro la pequeña mano y la llevo a su pene notando la carita de asombro del nene.- nadie más que tú podria provocar esto.

Tae solo sintió como más jugos salían de su vaginita, no sabía porque pasaba pero desde que vio totalmente desnudo no paraba de mojarse y eso aumento cuándo lo vio enterrado entre sus piernas.

Seojoon ya había echo eso una de las tantas veces que había abusado de el pero no se habia sentido así para nada, todo lo contrario en ese momento solo había sentido asco.

-kookie me... me duele mucho.- gimoteo el menor con un puchero en su boca abriendo más sus piernas mientras llevaba una de sus manos hasta su coño y se tocaba sin despegar su mirada de Jeon, estaba seguro que los ojos de este se habían oscurecido aún más.

Flores-???????????????????????????? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora