Paris, la ciudad del amor.
TN Roccuzzo, viaja a París después de ser el nuevo fichaje del PSG femenino. En Paris, se va a vivir con su hermana, se reencuentra con su mejor amigo de la infancia y conoce en persona a su... ¿Alma Gemela?
Después de pasar la tarde con Bellingham regrese a casa, le conté mis planes a Antonela.
-¿Ahora sí es vuestra primera cita, no?- Me dijo Antonela entre risas. Igualita que Bellingham.
Voy a mi habitación y me cambio, escojo la otra opción de vestido que tenía ayer pensada para ponerme.
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Me maquillo bastante natural, no me gusta tener tanta base de maquillaje en mi cara, siento que no soy yo misma.
Me siento en la cama, pensando en lo que pasará mañana. Es mi debut. Malos pensamientos invaden mi mente, ¿Y si me sale mal? No quiero quedar en ridículo delante de todos los espectadores. Sigo sobre pensando las cosas, hasta que el timbre de la casa hace que todos los malos pensamientos se vayan y que vuelva a la realidad. Salgo de la habitación y bajo al salón, abro la puerta y efectivamente, estaba ahí Neymar.
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(Vistiendo ese mismo traje)
Miro a Neymar de arriba a abajo y le miro a los ojos, haciendo que se me escape una sonrisa.
-Hola, hoy estás más guapa que ayer.- Me mira Neymar, centrando su mirada en mi vestido.
-Gracias, tu también, estás más arreglado.- Salgo de casa y cierro, sin poder de dejar de sonreír.
-¿Quieres que vayamos a cenar?- Me dice él, empezando a caminar tranquilamente.
-Por supuesto.- Le miro de reojo mientras ando, estaba muy guapo.
Caminamos los dos juntos hacia un restaurante al cual me guía Neymar.
-Es aquí.- Me abre la puerta para que pase, entro y entra detrás de mi.
El camarero nos lleva a una mesa, nos sentamos y empiezo a mirar la carta.
-No tengo mucha hambre.- Sigo mirando la carta
-No te preocupes, come lo que quieras, invito yo.- Dice él.
-Bueno, no te voy a rechistar.- Río levemente.
Llega el camarero y pedimos la comida, minutos después nos llega y empezamos a comer.
-Esto es mejor que la comida de Anto.- Sigo comiendo, algo rápido por lo bueno que estaba.
-Pues si que tienes hambre...
-Esta buenismo.
Después de que terminemos de cenar, Neymar paga. Salimos del restaurante.
-¿Quieres ir a por unos helados?
-Claro.
Vamos a por helados. Estaba bastante nerviosa, no me gusta estarlo ya que quizás al verme tan nerviosa, Neymar piensa que estoy enamorada de ella, cosa que no es así, bueno, ni yo lo sé, nunca entiendo mis sentimientos. Llegamos a la heladería y pedimos nuestros helados, nos sentamos en un banco mientras nos lo comemos. Ya era de noche y estaba todo oscuro, solo había la luz de las farolas y de la Luna. Levanto la mirada y miro el cielo lleno de estrellas mientras lamo mi helado.
-Es...Una noche mi estrella.- Dice Neymar, mirando también el cielo.
-Si, es muy bonito.- Bajo la mirada para mirar a Neymar, mientras los dos lamemos el helado. Me mira haciendo contacto visual conmigo, intentando disimular, desvío la mirada hacia el frente. No suelo hacer contacto visual con las personas, y con Neymar me pone muy nerviosa.
-¿Sabes que mañana tengo mi debut?- Vuelvo a mirar a Neymar mientras lamo mi helado.
-¿Si? ¿Quieres que te vaya a ver?- Neymar sonríe.
-Como quieras.- Sonrío también.
-Iré. No tengo partido ni nada, así que si puedo iré.- Sigue lamiendo su helado.
-Te dedicaré algún gol.- En ese justo momento me llega un mensaje. -Perdon...- Cojo mi teléfono y era un mensaje de Bellingham.
-¿Cómo va? ¿Ya os habéis besado?
-Aun no jajaja, estamos tomando unos helados.
-¿Ya tocaría declararte, no?
-Que no, que no, yo no le gusto. Te dejo de hablar ya que tengo que disfrutar el momento.
-Ya está.- Guardo el móvil.
-¿Era el novio?- Me dice él terminando el helado.
-No, no tengo novio.- Termino mi helado.
-Bueno, yo tampoco.- Neymar se levanta.
Me levanto después de él y empezamos a caminar.
-TN, ¿No tienes frío? Tienes la piel de gallina.- Me dice mirándome, tocándome un poco el brazo.
-Bueno, estoy bien.
-Toma.- Se quita la chaqueta y me la da. -Pontela.
-Gracias.- Sonrío y me pongo la chaqueta, huele mucho a él. Agarro su mano cuidadosamente. -Estas muy caliente.
-Ya, no tengo frío.- Me toma bien de la mano, como si fuéramos novios. Sonrío un poco más, le estaba tomando de la mano a Neymar.
Minutos después llegamos a mi casa.
-Ya es muy tarde y mañana tienes partido. Y quédate la chaqueta.- Me suelta de la mano, sin dejar de sonreír.
-Muchas gracias.- Me acerco un poco a Ney sonriendo.
-Ya me voy...
Sin decir nada le doy un abrazo con fuerza, el corresponde el abrazo agarrándome de la cintura. Me pasaría toda la vida así abrazada, sintiendo como sus brazos cálidos me rodeaban la cintura. Me separo un poco del abrazo y le doy un beso en la mejilla, me separo del abrazo.
-Adios, Ney...
Me despido de él y entro a casa. Se puede decir que he pasado la mejor noche de mi vida, voy a mi habitación y me cambio, me acuesto en la cama sin poder dejar de sonreír.
