ELLA ES MÍA © [E.E.M.1.]

CAPÍTULO 6: TE QUIERO, KELSY.

CAPÍTULO 6: TE QUIERO, KELSY.

"Y es que el amor no necesitaba de entendido, simplemente necesita ser demostrado"

-Paulo Coelho.

Desde que llegué aquí, lo único en lo que se ha convertido mi vida ha sido una montaña rusa, pensé que irme a otro lugar donde nadie me conociera y así comenzar una nueva vida sería realmente sencillo, pero no lo es, todo esto que me está pasando es verdaderamente extraño, lo de la pelea de Derek y Dylan me tiene un poco confundida y no es para menos.

Mi bolsillo comienza a vibrar indicándome que tengo una llamada entrante.

-Hola. - digo esperando que alguien me responda, pero solo se escucha una respiración, después de un tiempo, cortan.

Miro la pantalla del celular confundida, tal vez la persona se confundió de número y al escuchar mi voz se avergonzó y después colgaron, reviso el registro de llamadas.

Número desconocido.

Guardo el teléfono, es una simple llamada perdida, con ese pensamiento me dirijo a mi siguiente clase, matemáticas.

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- Señorita Horts, señorita Horts-dijo la profesora de matemáticas, la verdad es que no estoy para nada dispuesta a poner atención en ésta, y esa señora me ha hecho el ojo desde que pisé el aula.

- Lo siento, ¿que decía? -pregunté levantando mi vista y encontrándome con sus intimidantes ojos detrás de esos lentes.

- Decía que salga de mi clase, ahora. - dijo apuntado hacia la salida.

- Bien. -dije mientras recogía mis cosas y dedicándole una última mirada fulminante.

Mientras me alejaba del aula escuché a la profesora de matemáticas pegar un fuerte portazo, al parecer esa señora tenía un carácter del demonio.

Decidí salir a caminar por la ciudad, ya que aún no he conocido nada más que el camino de mi casa al instituto y sus alrededores muy poco, ya después regresaría por mi auto al instituto.

Me encontré un parque, decidí sentarme a la sombra de un árbol y saqué un libro que he estado leyendo y verdaderamente me tiene atrapada: Hermoso Desastre. Sentí una mirada que me penetraba, pero no sabía de donde, así que levanté mi vista y me encontré con Dylan.

- Hola, ¿qué haces aquí? - pregunté mientras él se sentaba a mi lado.

- Bueno la verdad es que te vi en los pasillos, vi que te ibas molesta...-se rascó nervioso la nuca. - ...te seguí, lo siento.

-  Tranquilo, ¿quieres sentarte? -lo volví a ver y ahora que lo tenía cerca de mí a escasos centímetros de mi cara podía notar nuevamente lo lindo que era, sus ojos negros, su nariz larga y su boca con sus labios carnosos, es verdaderamente hermoso.

-   Kelsy, quería pedirte si ¿quisieras ser mi cita para el baile de otoño?, y antes de que digas algo, sí, nunca he invitado a una chica a un baile así que no sé muy bien cómo les gusta a las chicas que nosotros las invitemos. Tengo varios: Modo patán. -dijo. Levantó una ceja y acomodó su cabello. - Oye nena, tú, yo un baile. No sé, piénsalo. - me reí por eso, detrás de sus ojos oscuros no es más que un chico normal como el resto. - O también tengo el tipo realmente meloso y poético: Kelsy, desde el momento en que te vi lo supe, quería que fueras mi cita, que ilumines el lugar con tu hermosa sonrisa al igual que lo hace la luna, que tu carisma me llene por completo y los dos juntos seamos los reyes de nuestra propia dimensión.

>> Kelsy, sé que no comenzamos bien y que el motivo real fui yo, sé que tienes curiosidad del por qué actué así, te prometo que pronto conocerás la verdad, la tienes que saber. Quiero que esta invitación sea un nuevo comienzo, quiero que me conozcas y me permitas entrar en tu vida y hacerme el honor de acompañarte al baile, comencemos de ahí y veremos a dónde nos lleva la vida después, ¿Qué dices? - respire profundo, sé que le dije Sofía que el baile era una verdadera pérdida de tiempo y que no quería verme implicada, pero al ver a Dylan, su extraña forma de invitarme y todo su discurso es imposible el negarme.

Veo como su rostro iluminado y lleno de esperanza se comienza a apagar y ahí supe que nunca quería ver de nuevo esa expresión, quería verlo sonreír y lo que me dejó aún más confundida era que quería ser yo el motivo de sus sonrisas, quería ser yo quien lo ayudara, acompañara y alentara a lo largo de su vida.

-   Acepto ser tu cita para el baile.

- ¿Enserio? - asentí en respuesta, una sonrisa se expandió por rostro.

-Te prometo que será la mejor noche de tu vida, Luna mía. Te quiero, Kelsy.

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Esa misma noche recibí una llamada de Sofía diciendo que estaba muy emocionada de que sí fuera al baile y que tenía que ir a comprar un vestido.

Según ella era de temática disfraz/fantasía, porque lo que con Jason se vestiría de caperucita y el lobo.

En resumidas cuentas, ahora me encuentro en una tienda de vestidos probándome miles de vestidos hasta que, según Sofía logré encontrar el disfraz perfecto para mí y así pueda a la vez buscar algún personaje que pueda ir con el vestido.

Aproximadamente dos horas después por fin habíamos conseguido el vestido que según Sofía era el ''ideal'' para mí.

Se trataba de un vestido de dos piezas color turquesa, tenía un crop top escote corazón con un diseño de flores delicado mientras que la falda era simple con unos vuelos, al ver más detalladamente tenia pequeños brillos incrustados.

Elegimos unos tacones plateados simples junto con unos pendientes pequeños para no sobrecargar el conjunto, era un disfraz, pero aun así era un baile formal.

También compré un vestido azul rey corto con encaje en la parte superior del vestido en una tienda de segunda mano por tan solo $40. Quería cambiarme después de un rato de ''lucir'' el vestido, no tenía en mente permanecer toda la noche con ese vestido largo e incómodo para caminar.

Con respecto a los tacones, podría quitármelos cuando quisiera así que eso no me preocupaba demasiado.

Lo que me preocupaba realmente es que mi cumpleaños es el día antes del baile y es dentro de tres días por lo que tendré que viajar y volver el mismo día a como dé lugar.

Pero necesitaba saber qué tenía mi difunta madre para mí en San Francisco.