Sesshomaru y los chicos estaban de regreso a la prisión. El viaje había sido silencioso, solo se escuchaba al helicóptero en movimiento.
Una vez en tierra firme, Rin y Kohaku volvieron a sus respectivos trabajos. Cuando llegaron fueron recibidos por Sango, Kagura, Jinenji, Miroku y Totosai
- Hermana!!! - Kohaku corrió a abrazar a su hermana - Te he extrañado mucho
- Y yo a tí, le estaba rezando a Kami para que vinieras sano y salvo - Dijo Sango con lágrimas en sus ojos
- Hola Rin, ¿Cómo has estado? - Le preguntó Kagura a la chica
- He estado bien, bueno, más o menos - expresó desanimada
- ¿Sucedió algo? - Preguntó preocupada la de ojos rubíes
- Solo estoy cansada, voy a ir a... - No terminó la frase ya que sintió a alguien detrás de ella
Rin giró la cabeza hacia atrás y vio al peliplata, este tenía una sonrisa diabólica en su rostro.
- Que hermoso encuentro, pero lástima que no me gustan los finales felices - Dijo burlón
- Amo!!! - Dijeron todos y se arrodillaron ante el
- Kohaku, un trato es un trato - Dijo sin más
- Si, amo, solo déjeme despedirme. Se lo ruego - expresó preso del pánico
- Bien, te doy 2 minutos y empiezas desde ya - expresó aburrido
- Kohaku, ¿De qué habla? - Dijo Sango preocupada
- A cambio de salvar a Rin... Yo.. - le costaba decirlo - Yo... Me ofrecí para ser su muñeco de tortura - Dijo al fin
Todos estaban boquiabiertos, Kohaku entregó su vida a cambio de salvar a Rin, esta tenía la cabeza baja, mirando al suelo. Sus ojos derramaban lágrimas silenciosas, se sentía culpable por eso.
- Rin, tranquila. Estaré bien, creo - Lo último lo dijo en un susurro
- Pero... Pero.. - seguía derramando lágrimas - ¿Por qué lo hiciste? - Dijo enojada de sí misma
- Lo hice porque todos confían en tí de que los salvarás y... - Tomó las manos de Rin - Y... Porque estoy enamorado de tí, Rin
Rin se quedó sin palabras, eso no lo sabía, levantó la mirada para encontrarse con la de Kohaku, estaba diciendo la verdad, pero lamentablemente ella no sentía lo mismo, solo sentía un sentimiento de hermandad.
- Yo no puedo decir lo mismo, perdón Kohaku, yo... Yo no te amo - Dijo dolida
- Lo sé, yo sabía desde hace mucho que no era el indicado - Dijo sin más aunque por dentro estaba triste por el rechazo de la chica - Y también quería... - Fue interrumpido por el peliplata
- Se acabó el tiempo, camina mocoso - Dijo empujando al chico
- Espera!!! - Gritó Rin y fue corriendo hacia el - Espera, llévame a mi en su lugar - Dijo segura
- Jajajajaja!!! - Se reía a carcajadas - ¿Pero qué podría ofrecerme una niñata como tú? - Seguía riendo hasta que sintió una mano sujetando la suya
- Por-por favor, déjame ir en su lugar - Dijo al borde de la locura
- Déjame pensar, mmm - Miró a la chica, ahora que recordaba ella estaba con Naraku, sonrió malicioso - Bien, vendrás conmigo, niña con suerte
- Pero Rin... - Los labios de Kohaku fueron callados por uno de los dedos de Rin, la miró fijamente buscando respuestas y la encontró, abrió los ojos como platos
- Adiós, Kohaku - Quitó el dedo de los labios del contrario para irse junto al peliplata
Ambos desaparecieron de las vistas de todos.
- ¿Qué estará pensando Rin sobre esto? - Dijo Sango preocupada
- Confiemos en ella, pero a cambio tenemos que ayudarla y se cómo lo podremos hacer - Dijo Kohaku seguro de sus palabras
Todos iban a cooperar para lograr salir de aquel lugar.
Continuará
Hola a todos, Perdón por publicar tarde, entre la escuela y el cel que me está fallando es difícil actualizar.
¿Qué será lo que trama Rin?
¿El peliplata se dará cuenta?
¿Los prisioneros lograrán salir?Datos de la historia:
- Sango y Kohaku mantienen una fuerte hermandad
- Naraku y Kagura no se llevan tan bien pero se soportan el uno al otro
- La persona que le hizo la Katana a Sesshomaru es Totosai
Eso es todo. Próxima actualización el Martes. Hasta la próxima 👋🏻.
PD: ¿Pueden recomendar esta historia? Si quieren, claro
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Psicópata [Completa]
FanfictionEsté mundo, un mundo donde algunos viven felices, otros no tienen la suerte de vivir feliz. Yo soy uno de ellos, a la vista de muchos soy un monstruo, a la vista de otros soy el diablo en persona. Saben, si todos me consideran así, porque no serlo...