Agapanthus (✿⁠) Jeongjin/Hyunin

05

— Wow Eun, luces muy hermosa — No podía dejar de mirarla, el vestido era casual, corto blanco con estampado floreado rosa, nada formal pues, era solo una pequeña fiesta a la que irían unos cuantos amigos de la cumpleañera y sus familiares.

— ¿Verdad? — Alzó sus brazos para que tuviera una mejor vista de su outfit — Este vestido lo compré esta semana, Yeonmin me ayudó a escogerlo — Con una sonrisa grande sujetó el brazo de Hyunjin colocándose a su lado, la diferencia de estatura de ambos era notable y tierna — ¿Vamos?

Hwang asintió y fueron al automóvil.

Condució hasta la casa de la mejor amiga de su novia, ahí sería la fiesta.
No quedaba muy lejos así que, llegaron después de 20 min. Abrió la puerta dejando salir a Eunji quién agradeció, entrelazó su mano con la de él y fueron juntos caminando hasta la entrada de la casa, parecían una pareja feliz.
Un familiar que parecía ser el tío de la chica les abrió la puerta.

— ¡Hola!, que bueno que vinieron — Saludó a ambos con la mano.

— ¡Yeonmin! — Dijo emocionada Eun cuando la vió y se abrazaron — Feliz cumpleaños, Hyunjin y yo escogimos este regalo para ti — Le entregó una bolsa de cartón decorada de un morado claro en particular y sellada con cinta — Espero te guste.

— Muchas gracias a los dos — Dijo mirándolos con una sonrisa — Pasen, tomen asiento. En el comedor hay comida, refresco y cervezas, me avisaron que ya viene el pastel.

Ambos fueron a sentarse en el sillón no sin antes haber saludado a los demás amigos y familiares de Yeonmin, la madre de la chica parecía ser alguien muy amable pues fue a dónde estaban ellos y les regaló unos cuantos dulces.
Hyunjin estaba feliz, la señora le había regalado su dulce favorito, chocolate amargo que no dudo en comérselo en tan solo un segundo en cuanto lo tuvo entre sus manos.

— Amor, tengo calor.

— ¿Te traigo un refresco o una cerveza?

— Una cerveza por favor, que esté bien fría — Llevó sus manos a su cabello largo acomodándoselo por un intento de estar fresca.

— Ya vuelvo.

Fue al comedor, tomó la lata de cerveza más fría que pudo haber encontrado para su novia y para él, una lata de refresco.
Notó que Yeonmin movía las latas haciendo espacio en la mesa, la ayudó moviendo la comida al otro extremo de la mesa dejando un gran espacio vacío, la chica le agradeció.

Entraron unos chicos cargando el pastel, Hyunjin los miró por curiosidad hasta que su cerebro hizo corto circuito al encontrarse con un chico conocido quedándose sorprendido por la coincidencia.

— Aquí dejen el pastel, en la mesa por favor y JeongIn ten cuidado, no lo vayas a tirar.

— No lo voy a tirar, Chan lo está tambaleando — Se quejó el mencionado.

— Te puedes callar JeongIn, me desconcentras — Y el peliazul rió por las palabras, afortunadamente dejaron el pastel intacto en la mesa.

— Le diré a mamá que casi tiran mi pastel — Les soltó un golpe en el hombro a ambos con un rollo de periódico.

JeongIn se sobaba el brazo cuando sintió una mirada encima de él, giró encontrándose con el chico de la fiesta de hace dos meses atrás, ambos hicieron contacto visual por un par de segundos. Hyunjin apretó la lata de la cerveza entre su mano y tragó saliva, su corazón latía frenéticamente por el inesperado encuentro.

La voz de Yeonmin llamando a JeongIn los interrumpió, siendo Yang el primero en desviar la mirada y salir del comedor sin decir ninguna palabra.

Hyunjin atónito por la situación regresó con Eunji, la pelirroja se sentía confundida por la manera rara que su novio actuaba. Entrelazó sus manos llamando la atención del chico.

— Amor, ¿qué tienes? te noto distraído.

— Nada — Hizo una pausa a sus palabras buscando que decir — Solo me acabo de acordar que en dos días debo entregar un proyecto y aún no lo termino.

— ¿Es muy importante? mejor me despido de Yeonmin y le digo que nos surgió una emergencia — La chica se levantó el sillón y tomó su bolso decidida a hablar con su amiga.

— No, no hace falta eso. No tiene mucho que llegamos y sería grosero de nuestra parte irnos tan rápido — Apesar que Hyunjin quería irse de ahí no podía hacerlo, pensaba en Eunji y que para ella sería también molesto irse del cumpleaños de su mejor amiga.

— Ummm bueno — Fue lo último que Eunji dijo de la situación.

Se quedaron por un rato más, comieron y conversaron con los amigos de Yeonmin, después, la cumpleañera los llamó para que estuvieran presentes en la repartición del pastel, fueron al comedor y Hyunjin se sentía tenso, hizo su mejor intento de fingir que nada pasaba y volvió a ver a JeongIn, estaba hablando con el otro chico que lo ayudó a cargar el pastel, ¿Chan? ese era su nombre, al parecer.

En toda la celebración evitó el contacto visual, cantaron las mañanitas y felicitaron a Yeonmin por cumplir veinte años, cortaron el pastel y todos se llevaron su rebanada contentos.

Eunji se quedó a hablar con Yeonmin de cosas entre ellas, Hyunjin no quería interrumpirlas porque Eun se veía feliz así que, fue a la cocina a dejar los platos sucios que habían ocupado, sentía que era maleducado dejarlos arrumbados.

Abrió el grifo del agua y lavó cada uno de los platos, concentrado en la tarea no escuchó el sonido de la puerta cerrar.
Una voz reconocible sonó en la cocina.

— Ha pasado tanto tiempo sin vernos, ¿no crees?

Hwang lo miró, era extraño encontrarlo después de dos meses sin un rastro de él, creía que nunca lo iba a volver a ver, después de todo había sido algo de una noche.

— JeongIn, ¿que tal? me sorprende que nos hayamos encontrado.

— A mí también me sorprende este reencuentro, es una obra del destino — Cruzó sus brazos y relamió la yema de su dedo índice, gesto que Hyunjin lo vió tan jodidamente sexy — Después de la fiesta de Changbin ya no supe más de ti.

Para Hwang, era emocionante seguirle el juego a JeongIn.

— Oh, la fiesta de Changbin, lindo recuerdo — Mordió su labio inferior de manera provocativa y Yang caminó hacía él, lo tomó de la cintura recargandolo en la mesa de la cocina, sus cuerpos quedaron pegados uno con el otro.

Sujetó su mentón y chocó sus labios, por primera vez en meses, en un beso no tan intenso pero demostrando la necesidad de los dos chicos por besarse otra vez.

Hyunjin enredó sus piernas en la cintura de Yang sentándose sobre la mesa, se separaron del beso y JeongIn apretó el muslo del pelinegro, se miraron directamente a los ojos y volvieron a besarse, está vez, subiendo un poco la intensidad.
Yang dejaba caricias en el cuello del chico, desgraciadamente fueron interrumpidos por la voz de un familiar que estaba próximo a entrar a la cocina.
Hwang se separó del chico y rápidamente se bajó de la mesa, tocó sus labios sintiendolos ligeramente hinchados.

— Esto no acaba — Respondió JeongIn y fue a la otra parte de la cocina simulando hacer algo.

La persona entró por un par de servilletas ignorando a los dos chicos.