Agapanthus (✿⁠) Jeongjin/Hyunin

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JeongIn quedó más enamorado al ver como se veía Hyunjin con una de sus pijamas, se abalanzó a él dándole un montón de besitos por todo su rostro, acto que le saco una sonrisa al menor.

— ¡JeongIn, ya! basta, son muchos.

— No, nunca serán suficientes — Dió un último beso y con su pierna lo jaló hacia él acostandolo en la cama, lo abrazó por detrás de su espalda.

— Cómo lo dije hace tiempo, soy afortunado de tenerte — Besó su cuello — Todo lo que te dije esa noche fue cierto.

El pelinegro sonrojado volteó su cuerpo quedando rostro a rostro con el mayor.

— ¿Desde cuándo te gusto?

— Siendo sincero, no sé, pero la primera vez que te vi en la fiesta de Changbin sentí algo al verte, mi intuición me decía que me acercara y sin darme cuenta, había caído ante ti — Acariciaba el contorno de los labios de Hwang con la yema de su dedo índice entretenido — ¿Y yo cuando gusté?

— Cuando nos conocimos, me preguntaba, ¿quién eras? creo que el hecho de la forma rara que nos encontramos la primera vez fue emocionante para mí pero yo recién intentaba algo con Eunji así que no pensaba en esto, pero en el campamento comencé a sentir cosas por ti — Tomó un respiro y sujetó la muñeca del chico — Me alejé de ti porque creí que no te gustaba, mis sentimientos eran fuertes y la idea de que no estaría contigo me hacía daño, por eso tomé esa desición.

— Yo... — Entrelazó su mano con la del menor y prosiguió a hablar — Nunca fue mi intención jugar contigo de esa forma. Después de la fiesta de Changbin, estuve un buen rato buscándote porque quería conocerte más y que no solo se quedara en algo de una noche, hasta que vi que íbamos en la misma universidad pero tú... ya salías con alguien y lo acepté — Soltó una risita — Al parecer fui el primero en enamorarse.

Y ahora Hyunjin rió.

— Sí, fuiste el primero, dejemos de hablar del pasado que ya no importa — Besó castamente los labios del peliazul — El presente es que ambos nos gustamos.

JeongIn podía jurar que explotaría de amor por el menor.

— De verdad, me gustas demasiado, estoy enamorado de ti.

— Yo también estoy enamorado de ti, JeongIn — Acarició el pelo del mencionado.

El momento se sentía tan bonito, los dos hablando tan cerca, era íntimo.
Maki ladró desde el suelo y se subió a la cama, se acostó en el espacio entre ambos chicos.

— Oh, te ves más grande — Hyunjin acarició la pancita del animalito.

Y JeongIn lo observó como sí fuera lo más hermoso de su vida.

Apagaron las luces y se cubrieron con las cobijas, durmieron pegaditos, JeongIn abrazando por la espalda a Hyunjin quién, dejó reposar su mano por encima de las manos del mayor.