Rulos//Los 100 (1º libro)

Tú y yo c17

-Nala, despierta. - tenía a Bellamy llamándome desde la entrada de mi tienda.

Lo miré de reojo estando tumbada en el colchón de John.

-Vete a dormir Blake, no te vendría mal. - me giré para seguir durmiendo.

La noche estaba bastante entrada, había sido un día muy largo y lo único que me apetecía era descansar.

Suspiró.

-Acaba de aterrizar una nave y creo que hay personas dentro. - me soltó de golpe.

Repentinamente mi sueño había desaparecido.

-Podías haber empezado por ahí. - me levanté y me hice una trenza rápidamente.

-Le he dicho al resto que saldremos al amanecer.

- ¿Entonces para qué me despiertas si saldremos mañana? - me quejé aunque lo pensé mejor. - Vale, veo por dónde vas.

-Tú y yo vamos a ir ahora mismo. - salimos de la tienda hablando- Seguramente haya alguna radio o algo para comunicarse con el Arca. Hay que destruirlo.

Salimos del campamento sin que nadie lo supiera ni se diera cuenta ya que se suponía que lo que íbamos a hacer no estaba bien.

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- ¿Me recibe? - se escuchaba entrecortado desde cerca.

Bellamy y yo lentamente nos acercamos y abrimos la compuerta. La nave me sonó mucho en cuanto la vi; había leído cosas de ella en los libros de mi habitación.

Allí estaba una chica con traje de astronauta. Estaba inconsciente. Bell se dedicó a coger lo que él estaba buscando cuando vi sangre en el traje de ella.

-Está herida. - le informé al pecoso.

-Ya lo tengo. - me contestó ignorándome.

Él empezó a andar en otra dirección y con pesar dejé a la chica en la pequeña nave, al día siguiente la ayudaríamos.

Llegamos a la orilla de un río para tirar la radio y perder toda posibilidad de comunicarnos con el Arca.

- ¿Estás seguro? - le pregunté a Bellamy.

- ¿Quieres volver a ser presa de los experimentos? - me preguntó él a mí. Bajé mi mirada- Pues sí, sí estoy seguro. Más que nunca en mi vida.

-Dime algo. - le corté- ¿Por qué lo haces?

- ¿El qué?

-Huir del Arca.

-Es una larga historia, Nala...- me miró intentando pasar de la conversación 

-No me ignores. ¿Por qué?

-He hecho una cosa para poder venir. Pero déjame contarte más tarde.

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Ya nos habíamos deshecho de la radio e íbamos por mitad del bosque tranquilos cuando escuchamos a Clarke llamándonos.

- ¡Vosotros! - nos giramos-¡Bellamy!¡Nala!

Nos pilló. Ya era de madrugada y podía ver los rayos de luz por detrás de las montañas.

- ¿Dónde está? - nos preguntó la rubia.

- ¿Qué hay Clarke? - le dijo el pecoso gracioso- ¿Dando un paseo?

-Arriba se preparan para matar a 300 personas para ahorrar oxígeno. - le contestó- Os aseguro que no serán miembros del consejo. Serán trabajadores; los que trabajan para ti. - le señaló a Bell.