Y ahí estaba yo, una pequeña adolescente asustada. Y ella, un bicho raro extremadamente guap... NOO! FUERA.PENSAMIENTOS INPUROS! FUERA!... Ahí estaba ella, examinando mi cuarto entero.
Eran las 8 de la noche y el olor a empanadas inundaba mi cuarto. Yo estaba quieta en mi cama viendo como la bicho raro revisaba todas y cada una de mis cosas. Cuando digo todas, me refiero en serio a TODAS (Incluida la ropa interior -.-)
-Qué se supone que es esto?- Dijo agarrando un paquete de toallas sanitarias.
-Cosas de humanos...
-Y esto?- Dijo agarrando mi caja de ahorros.-DEJA ESO AAaaahí- Cambié repentinamente mi tono de voz de alterado a tierno y ella me miró raro... Ay no... Amity cagándola desde tiempos inmemorables.
-Cómo dices?- Me miró con cara de pocos amigos... La cagué...
-Que por favorcito dejes eso en su lugar- Dije tiernamente con mi mejor sonrisa, tratando de ocultar mi tono nervioso.
Me volvió a mirar mal y sacó todos los billetes y monedas, tirándolas por todo el lugar.
Inhala, exhala.
Uno, dos, uno, DOS, UNOO, QUE ESTÁ HACIENDO?! IDIOTA DE...
Descubrió mi caja secreta de chocalates y chuches y.... SE ESTABA COMIENDO TODOS LOS CHOCOLATEEES! *Llorando* *agarra un cuchillo y se mata alv* ok no...Me paré, caminé hasta llegar a su lado y...
Me devolví a mi lugar porque me ganó el miedo. Soy una miedosa. Pero es un demonio, no cualquier idiota. Esta es un demonio idiota.
-Como se llama esto?- Dándole otro bocado a mi tan preciado chocolate.
-C-Chocolate- Dije con un tono lloroso.
-Por qué hablas así, pequeña?- Me miró extrañada.
-P-Porque me costó mucho COMPRAR ESA MIERDA!....-Oh no, OH NO! -Emmmm... Discúlpame, no fue mi intención (si lo fue. LO DIJE CON MUCHAS GANAS)...
Se acercó a mi. Alzó una ceja. Tomó otro chocolate entre sus manos y.....
SE LO COMIÓ DELANTE DE MÍ LA MUY DESGRACIADA.EN SERIO LA ODIO.
-Deberías comprar más... Ya se acabaron.- Dijo dándome la basura del empaque. *llorando y chillando como niña chiquita*
Tendré que cambiar mi escondite.
Después de ver unos cuantos minutos más, como desordenaba mi cuarto, hablé...
-Creo que debería bajar a cenar... Si gustas, puedes quedarte aquí.- Caminé hacia la puerta sonriendo falsamente.
-Creo que bajaré contigo...
Hija, de, su, mamá... Bueno capaz y no tenga madre.
-No hace falta p...
-Bajaré contigo. Seré invisible para tu familia. Solo tu me podrás ver, pequeña.Eso justamente era lo que no quería... Verla a ella.
Abajo estaría mi hermano. Eso traería problemas.
Quien sabe con que idiotez saldrá mi hermano esta vez y eso seguramente a esta bicho no le agrade.
-Vale. Solo te pido algo, no hagas nada estúpido. Quédate lo más quieta posible y NO le hagas nada a mi familia. -Dije firmemente. No sé de donde saqué tanto valor.
Mala idea.
MUY MALA IDEA.
Me miró serio, se acercó de nuevo a mí peligrosamente. Agarró mis muñecas y empujó de mí hasta que caí sentada en la cama. Se paró en frente y clavó su fría mirada en mis dulces ojitos.Traté de apartar la cara pero me lo impidió agarrando mi mandíbula.
-Déjame decirte algo, humana. Yo hago lo que quiera en este mundo. Tu, no puedes prohibirme nada. Entiendes?- Amenazó con una voz gruesa.
Sentí miedo.
Solo asentí rápidamente varias veces con los ojos muy abiertos.
-Recuerda lo que te dije...
No hagas molestar a la bestia Amity... Por lo que más quieras.
Como la idiota que soy, solo seguí asintiendo con la cabeza hasta que por fin me soltó.
En mis muñecas quedaron unas marcas rojas. Me dolían. Pero era mejor que morir.
Suspiré y salí del cuarto siendo perseguida por la idiota bicho raro.-Tu casa es pequeña...
Idiota.
Bajé las escaleras y fuí directo a el comedor a cenar.
Ahí estaban todos sentados.
Me senté junto con ellos y mi nuevo amigo se sentó arriba de la mesa. Había una silla vacía, pero claro, el prefirio poner su culo en la mesa... Inhala, exhala Amity.
La miré disimuladamente y pude observar como sacaba un cigarro y lo encendía.
El humo no tardó en salir y formó una gran nube encima de la mesa.
Abrí mis ojos y empecé a "Espantar moscas" exageradamente, tratando de producir el viento suficiente para sacar el humo.
La muy imbécil se estaba riendo.Mi madre y padre me miraban raro. Y Edric, bueno el solo me ignoraba y seguía comiendo.
-Que estás haciendo?- Cuestionó mi padre.
-Em... Hay muchas moscas!
Y seguía riendo mientras fumaba. Me miraba con una sonrisa torcida. Sus ojo rojos no se desviaban.
Agarré una empanada tratando de ignorarla pero fue imposible. Ella, literalmente me la quitó de las manos y la probó.
La miré enojada. Esto no se iba a quedar así. Me las va a pagar.
Tomé un sorbo de jugo y lo escupí directo hacia donde estaba élla, mientras rompía en carcajadas. La empapé toda de jugo. Y yo solo reía.
-Que te sucede?!- Preguntó mi madre alzando la voz.- Es que *Risas* Me acordé de un chiste muyy bueno! *Más risas*.
La joven demonio me miró con odio, limpiándose la cara y aplanando los labios. Estaba molesta.
-Estás muerta....-Dijo mientras fruncía el ceño.
Adiós, Mundo cruél! Hasta aquí llegué.
Pero valió la pena.
Nadie me quita mi comida.
Agarré otra empanada y me la comí felizmente, dirijiendo una sonrisa a mi amiga.
Élla me devolvió la sonrisa y se levantó de la mesa.
La ignoré totalmente. No me importaba hacia donde fuera. Solo quería cenar en paz.Seguí comiendo. Con una sonrisa triunfante.
De pronto sentí una respiración en mi nuca. Joder...
Mi piel se erizó.
Y dejé de comer.
-Será mejor que volvamos a tu habitación, YA!- Susurró- A menos de que quieras que a tu querido hermano le pase algo.
Su mano paso al lado de mi cabeza moviéndola de una forma extraña, haciendo figuras con su dedo.
Mi hermano comenzó a rascarse la frente.
-Agh...- Se quejó Edric tocándose la frente esta vez con las dos manos- Me arde...
Yo lo miraba atenta.Tomé otro sorbo de jugo y me paré de la silla. Me despedí de todos y miré mal a la estúpida demonio.
Subí las escaleras rápidamente. Literalmente corriendo.
Entré a mi cuarto y cerré la puerta fuertemente dejando a la bicho raro en el pasillo.
Suspiré y cerré los ojos un momento.
No podía permitir que se metiera con mi familia. Sobre mi cadáver.
Cuando abrí los ojos pude ver a mi "amiga" acostada en la cama con los brazos atrás de la cabeza cómodamente.
¿CÓMO? QUE ALGUIEN ME EXPLIQUÉ!.
Definitivamente no aguantaré esto mucho tiempo más. Es insoportable.-Se puede saber por qué me escupiste? - Dijo con los ojos cerrados.
Dios mío.... Me va a matar.
-Responde!-Insistió con una voz fuerte, demasiado diría yo.
-Me acordé de un chiste...- Respondí nerviosa.
-Ah si? Y cómo es ese chiste?
Estoy jodida.
-Emmm... Había una vez un pollito que respiraba por el culo, se sentó y se murió.- E hice un intento de risa... El cual se convirtió en una risa real al darme cuenta de mi pésima elección de chistes.
-Buen intento.- Se levantó y volteó a verme.- Si vuelves a hacer algo parecido, dile adiós a tu hermano.- Amenazó. Sus ojos me daban miedo. Todo daba miedo.
Me quedé callada.¡No podía meter a mi hermano en esto! Eso es trampa.
-Ya vuelvo...- Me sacó de un golpe de mis pensamientos. A dónde iba? No. No me importa! Que haga lo que quiera...
Volteé la cabeza un poco y cuando la volví a poner en su lugar, él ya no estaba...
Me acerqué a mi closet y busqué una pijama. Una de flores moradas. De mis favoritas.
Me cambié y me acosté a mirar el techo, pensando en como deshacerme de esa alimaña.
Cerré los ojos.
Respiré profundamente.
Me levanté rápidamente. La razón? Simple, escuché un grito. De quién? DE MI HERMANO.Salí corriendo y fuí directo a donde salían los gritos. El baño.
Abrí la puerta bruscamente y me encontré con Edric, quien se estaba tapando la cara con las manos enfrente del espejo.
-Eres tan feo que al ver tu reflejo te asustaste?- Pregunté.
-A-alguien estaba ahí!!!!-Dijo señalando el espejo.- Tenía los ojos rojoss! Y se estaba riendo!- Continuó, asustado.
Con eso me lo dijo todo... Al parecer mi amiga salió a molestar a mi hermano.
- ESTOY SEGURO DE QUE AHÍ HABÍA ALGUIEN!- Gritaba Edric en mi cara señalando con fuerza el espejo.
-Debes tener sueño Edric. Por qué mejor no te vas a acostar y descansas un poco?-Amity... Ahí había alguien. Lo juro!
- Tranquilo. Ve a dormir! Diosito te cuida desde arriba- Dije dándole palmadas en la espalda.
Cuando por fin aceptó irse a dormir yo hice lo mismo. Fui a mi habitación y me acosté en la cama. Me relajé por unos minutos.
Por fin paz y tranquilidad.
Hasta que pude quedarme dormida.
......
-Pequeña!. Donde se supone que voy a dormir.- Me despertó una voz que conocía muy bien.
-...Acuéstate en donde quieras...
.Y así, dormí junto a una demonio.
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Mi amiga la demonio [Lumity Adaptación]
RomanceDonde Amity invoca a una entidad demoníaca con la ayuda de su mejor amiga, Boscha. Nada volverá a ser igual. -AAHHHHHHH! UN FANTASMA! -Corrección, una demonio... -AAHHHHHHH! UNA DEMONIO! -Un gusto conocerte! Una historia en donde Amity ama romper l...