Mi amiga la demonio [Lumity Adaptación]

▪︎Nombre perfecto▪︎

Después de disculparme con el idiota, salí de mi habitación exhaltada, emocionada. Tenía una ensalada de sentimientos. Muchos pensamientos. Su compañía me hacía mal. Ahora solo estoy confundida. Me hacía sentir rara.
 
Todas esas cosas que dijo, ¿en serio le gustaba verme nerviosa? Ja, vaya enfermo. Bueno, supongo que no se puede esperar menos de una demonio.
 
Mi dilema existencial es, ¿En serio esas cosas que dijo son verdad? Su corazón latía rápido conmigo, y no quiero llegar a pensar que es por sentimientos hacia mí. Sería catastrófrico. ¿Un demonio enamorado de una humana? Por Dios. Si es así, me jodí bien jodida. Me encuentro en serios problemas.
 
¿Debería hacer algo para alejarlo? Creo que la respuesta es sí...

No solo por mí, si no por mi familia. Según élla, se alimenta de sufrimiento, y no puedo permitir que su fuente de alimento seamos mi familia y yo. Por mí, se puede morir de hambre.
 
Y ahora que lo pienso bien. Todo esto está pasando por mi culpa. Si tan solo yo no hubiera vuelto a esa casa, estaría feliz y contenta soñando tranquilamente con Cameron Boyce o con Harry Styles. Pero claro, como la suerte nunca está de mi lado, ahora tengo que aguantar a una Demonio caprichosa.
 
Creo que lo mejor es que luego de que Boscha la conozca, ir a una casa de brujas para hacer algo contra élla.  Y así evitaría muchas cosas.
 
Sin mencionar de que dentro de poco tendré que volver con las clases de piano en el conservatorio. Mis dulces vacaciones se acaban y no creo poder aguantarla mientras trato de practicar.

.....
 
Bien, creo que sería una buena venganza contra Boscha por todas las cosas que me ha hecho ùltimamente. Un simple susto. Uno muy bueno dado por mi buena amiga la demonio. Será genial... O eso pienso yo...
 
-BOSCHA! Grandes noticias...- Dije cuando me encontré con mi amiga en la cocina.
 
-Ya te sientes mejor?- Dijo tocándome la frente.
 
Aparté su mano y le sonreí.
 
-Nunca estuve enferma. Gracias por preocuparte idiota.- La abracé tiernamente para luego separarme- Volviendo a lo que te decía, hoy podrás ver a...
 
-YA ERA HORAA! Desde que llegué estoy esperando esas palabras...- Dijo riendo.

Rodé los ojos y reí con ella.
 
Mi madre entró a la cocina y realizó el mismo acto que Boscha cuando me vió, puso su mano en mi frente.
 
Yo solo sonreí y aparte su mano lentamente.
 
-Mamá. No estoy enferma, vale?
 
Ella me abrazó y rió.
 
-Ya te sientes mejor? Entonces me comeré este chocolate yo- Rió y sacó de su bolsillo una barra de chocolate. Eso es jugar sucio. Maldad pura y dura.
 
Traté de arrebatárselo pero lo apartó. Luego de varios intentos fallidos me lo entregó.
 
-Y deja ya de molestar, pesada.- Dijo tocándome la nariz.
 
Le saqué la lengua y lo abrí. Me hacia falta comer algo dulce, chocolate específicamente.

Mi madre salió de la cocina, iba a hacer las compras y nos dejó solas en casa. Edric estaba en su cuarto, pero no creo que salga hasta la cena, así que relativamente estamos solas.
 
-Oye... ¿Tu madre sabe todo lo que hemos hecho?  Eso de lo sobrenatural y los espíritus...- Preguntó Boscha con curiosidad.
 
-¡¿Estás loca!? No lo sabe y tampoco pienso decírselo- Abrí mis ojos- Me mataría si se enterara. El que si sabe, es mi hermano.
 
Su rostro se volvió un gesto de sorpresa. Se acercó a mí y susurró.
 
-En serio?
 
Asentí lentamente apartándome de ella.
 
-Y te creyó?- Volvió a acercarse.
 
-Más que tu? Si.- Afirmé haciendo un gesto de desprecio.

Ella bufó y rodó los ojos.
 
-Lo siento, pero yo tengo que ver para creer...-Dijo en su defensa.
 
Platicamos un rato tranquilamente. Me olvidé de esos luceros rojos por unos minutos. Boscha hablaba y hablaba sin parar, yo solo la escuchaba y asentía con la cabeza a todo lo que ella decía.
 
Estuvimos así un rato hasta que mi querido hermano bajó.
 
Tenía el pelo revuelto y como de costumbre no tenía camisa. Por su cara pude deducir que estaba durmiendo.
 
Boscha lo miró fijamente y le sonrió coqueta. Edric solo la miró y saludó con la mano.
 
-Hola, bello durmiente- Dije burlándome de su aspecto.
 
-Callate...

Reí y le di un poco de chocolate.

-Tengo muchos mareos- Dijo comiendo.
 
Así desperté yo. Muchos mareos.  Pero la vida es cruel y demonios inútiles también.
 
-Quieres que te cuide?- Preguntó mi amiga.
 
Edric alzó una ceja y negó. Yo reí ante su rechazo.
 
Boscha suspiro y me pegó un codazo.
 
Yo me quejé. Seguimos hablando y luego le dije a Boscha que quería ir a la habitación. Ella solo asintió.
 
Salí de la cocina y comencé a subir las escaleras.
 
Contrólense nervios estúpidos.
 
Ustedes se preguntarán ¿Por qué quieres subir a la habitación si ahí está una demonio acosadora?

Pues, la respuesta es sencilla. Me gusta ser acosada.... Nah, no es cierto. Quería subir para revisar si mi amiga estaba en ella todavía, si no estaba, subiría tranquilamente con Boscha. Pero si estaba, bajaría de nuevo y revisaría después.
 
Caminé por el pasillo y todo estaba en silencio. Abrí la puerta de mi cuarto y estaba normal. Todo muy normal, con la iluminación que tenía siempre y todo lo normalmente normal. Miré a todas partes, el closet, el escritorio, la ventana, la bicho raro acostada en mi cama durmiendo, la mesita de noch.... LA BICHO RARO ACOSTADA EN MI CAMA! .... Y yo que creía que por fin me había librado. Pero no.
 
Hice una mueca y me acerqué un poco para comprobar si estaba realmente dormida.
 
Estaba acostada mirando hacia arriba, respirando calmadamente, con su pelo castaño cubriéndole parte del rostro.

Suspiré y me dí la vuelta para volver a la cocina. Pero Boscha abrió la puerta de golpe haciendo MUCHO ruido.
 
Me tapé los oídos y cerré los ojos fuertemente por el escándalo.
 
-TENGO UNA IDEA BUENÍSIMA!!- Dijo a penas entrar.
 
La miré tratando de parecer tranquila, pero no lo podía estar.  La bicho raro estaba durmiendo y seguramente se despertó de golpe por el ruido. Si no me mató antes, me matará ahora junto con Boscha.
 
-Ah si?- Dije volteándome a la cama disimuladamente para ver si seguía durmiendo.
 
Joder...
 
Cuatro palabras: Ojos rojos, mirada, odio.

Estaba sentada en la cama, respirando profundamente, con esa mirada de asesina que no me gusta nada.
 
-La mataré....-Dijo entre dientes.
 
Reí nerviosa, agarré a Boscha por los hombros y la saqué fuera de la habitación. Cerré la puerta cuidadosamente a mis espaldas.
 
Suspiré.
 
-Por los pelos...- Susurré.
 
-A ver. Se puede saber, QUÉ TE PASA?!- Me pegó un manotón.
 
-Nada, nada... Yo ya iba a bajar- Traté de esquivar un golpe, pero no lo logré y me dio justo en la nariz.
 
-Casi me caigo por tu culpa, hija de tu mamá!- Seguía regañándome.
 
Reí tratando de calmarla, pero ella solo se limitaba a mirarme mal y con el ceño fruncido.

Estabamos justo en frente de mi cuarto. Yo, con el corazón en la mano, asustada, pensando que en algún momento mi amiga saldría del cuarto y mataría a Boscha. Cosa que nunca pasó gracias a Yisus. ¡Alabado sea el señor!
 
-Como te decía, se me ha ocurrido una gran idea...
 
Hice un gesto de asombro.
 
-Desde cuando usas el cerebro? Me sorprendes. Creía que tu cabeza estaba hueca- Dije alzando un poco los hombros.
 
-Pues si, fíjate que últimamente lo he usado mucho...
 
-Y que idea se te ocurrió?
 
Hizo una pequeña pausa y sonrió.
 
Ay no.
 
Esa sonrisa no me gusta.

-Pienso que sería bue...
 
-NONONONO OLVÍDALO!- Dije interrumpiéndola y moviendo las manos haciendo que se callara.
 
Acto seguido mi cara me dolía mucho. ¿Puedes adivinar por qué? Claro, es algo obvio. La mano de mi amiga se estampó en mi bella y delicada cara.
 
-Como decía, he pensado que sería buena idea buscarle un nombre a tu amiga...- Sonrió y cruzó los brazos- Pero no un nombre cualquiera... Uno que le quede a la perfección.
 
Para mi "bicho raro" está muy bien. Y ese le queda a la perfección.
 
Y su segundo nombre es "Chucho" .
 
Bicho Raro Chucho De las Nieves Mendoza.
 
Vaya nombre, pff. Más perfecto imposible xD.

-Nombre?-Susurré confundida- Ella ya tiene nombre.
 
-"Bicho raro" no es un nombre- Atacó.
 
Bufé con pesadez y terminé aceptando.
 
Ahora buscaremos un nombre perfecto... Que gran idea.
 
Bicho raro me gusta :C
 
Pero conociendo a Boscha, seguramente quiera llamarla Martina... Solo espero que hayan mejores nombres que Martina.
 
Ahora solo buscaremos un buen nombre, digno de una demonio y luego esperar para jugar la Ouija y que mi amiga pueda ver a Bicho raro...
 
Nombre perfecto? Jahh. Por dios.
 
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