Levantarse es más difícil cada día, dar la cara tras derrotas, fallos y errores que se repiten una y otra vez.
Hacer uso del humor para reprimir la importancia que le das a la situación, y sonreír cada tanto para decir que estás bien.
Es cansado fingir que nada te hiere, y sobreponer a los demás pensando que de igual forma te quieren.
Esperar a que pidan perdón es agotador, pues aunque ya les diste el perdón esperas ver arrepiento de haberte herido.
Dar más de lo que recibes, estar ahí para los demás, llorar cuando lloran y reír cuando ríen, buscar soluciones a sus problemas, pero...
¿Cuándo han estado para ti?
¿Cuándo siquiera te han escuchado?
¿Les importas un poco?
Todo este tiempo eso no te ha importado, sabes amar sin necesidad de que sea recíproco, pero cada vez se vuelve más tedioso.
Intentas dar lo mejor de ti pese a que no lo valoran, y cuando fallas esperas al menos una palabra de aliento, ¿y qué es lo que recibes?
Críticas, malos comentarios, dicen cosas que tú ya sabes, sabes que estás mal, que eres un fiasco, cosas que día a día te repites.
No todo es color de rosas, pero aun así intentas que sea así, al menos para los demás. Deberías de priorizar tu bienestar, pero siquiera te importa.
Así que una vez más te toca, colocarte una máscara de "estoy bien" ponerte de pie, sonreír y volver a iniciar otro fatídico día más.
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LETARGIA.
PoetryCon letras ordinarias en historias de la vida diaria, disfrazadas de metáforas imaginarias, esto es LETARGIA.