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Llevaba varios minutos dando vueltas en la habitación se sentía preocupado más que eso, angustiado. Y no hiba a sentirse mejor hasta que se asegurará que Moran estuviera bien. Su hermano Albert no mencionó nada al respecto, pero tampoco permitió que fuera el quien llevara a William. la situación estaba peor de lo que imagino, se sentía mal y más por Sebastian.

La tentación por ir a verlo le estaba siendo difícil retener, y aunque se reprendia a sí mismo que hacerlo estaba muy mal terminó cediendo a su capricho.

Aprovecharía que su hermano Albert estaba metido en su estudio y su otro Hermano fuera de la mansión.

Salió de su recámara con un pequeño botiquín, camino por los pasillos con mucho cuidado. Ya era muy tarde y no quería despertar a nadie, tal vez Jack aun si seguía despierto y si lo escuchaba todo su escape fugas se iría al caño.

Llego a la puerta destinada y toco delicadamente, como no obtuvo respuesta se atrevió a pasar esperando el no inofortunar.

Se adentro, apreciando a Moran descansando, observo la habitación y se aserco a la orilla de la cama. La luz de la luna se colaba por la ventana abierta, dando contra el cuerpo del mayor, lucia tan tranquilo y sereno le causó gracia verlo con su cabello desordenado, sonrió inconscientemente -Sebastian durmiendo le pareció adorable- Noto que no traía puesta su camisa, sin quererlo su mirada viajo por todo su pecho y abdominales tuvo la tentación de tocarlo pero rápidamente borro ese pensamiento pecaminoso.

¿Desde cuando se había vuelto tan  sinvergüenza?

Se aserco más sin hacer ruido y observo con más detalle el rostro del mayor; buscaba algún indicio de un ematoma. La luz lunar no ayudaba mucho aún que estaba  clara seguía viéndose oscuro.

Con Moran dormido no había algo que pudiera hacer, solo se limitó a mirarlo. Después de un momento se levantó no quería ser curioso y hurgar lo que no es suyo pero algo en particular llamó su atención. Una foto de él siendo niño de ser otra circunstancia se sentiría indignado y un poco acosado solo que ese no era el caso. Volvió a dejarla donde estaba y nuevamente regreso a la cama. Todavía no entendía que sentía por él pero, fuera lo que fuera estaba empezando a agradarle todas esas emociones que le hacia sentir.

—señor Moran—susurró en un tono muy inaudible. Acaricio muy suave la mejilla en donde su hermano Albert lo golpeó, si supiera que estaba ahí seria capaz de asesinar a Sebastian, una posible tragedia que no le gustaría ni siquiera imaginar. Metido en sus pensamientos no se dio cuenta cuando el mayor había despertado, salió de la ensoñación dando un pequeño respingo. Moran tenía sujetada su mano con la cual lo acariciaba.

Alejo la mano de inmediato con un movimiento brusco, no supo que decir entró en pánico Moran lo había atrapado.

—E-sto no es lo que parece—negó, creando un movimiento gracioso con sus manos. En su rostro se noto lo avergonzado que estaba.

Moran se enderezo y rio a lo bajo, esa reacción de Louis le pareció infantil y tierna.

—es tarde y estas en mi habitación, ¿que puedo pensar sobre eso?

Louis lo observo avergonzado.

—No podía dejarlo así, estaba preocupado —la pequeña luz de la luna dejo ver un leve sonrojo en su rostro. Dejando ver cada una de sus finas facciones que a la vista de Moran eran perfectas.

Sonrio tonto denotando alegría, que el rubio se colará en su habitación le emocionaba, y de que manera. Es un gesto muy lindo de su rubio podría decir que después de todo Louis no le es tan indiferente. Aún así, aunque eso le gustará, seguro lo metería en problemas si por casualidad Albert llegaba a enterarse, y no buscaba eso.

NARCISOS [TERMINADA ✓]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora