Elle: Te extrañé (le dijo mientras hundía la cara en su cuello).
Matt: Yo a ti.
Estuvieron un buen rato abrazados en una esquinita. Matt le pasaba su mano por la espalda acariciándola, pero cada vez iba bajando más.
Matt: Qué bien te queda esta falda.
Elle: Deberías ver cómo queda cuando la levantás (-dijo casi sin pensar-.)
Matt la puso contra la pared y comenzó a besarla intensamente, con su lengua movía la de ella y la presionaba contra su cuerpo agarrando por debajo de la falda sus nalgas.
Elle: Aquí no, vamos a otro lugar (le dijo al notar su miembro crecer en el pantalón-.)
Matt: No aguanto hasta el departamento, quiero hacerte mía ahora!!! (le susurró al oído, poniéndole la piel erizada)-.
Él sabía perfectamente lo mucho que la excitaba que le hable así. Lo tomó de la mano llevándolo al baño de hombres. No le importó el señor que se estaba lavando sus manos cuando entraron, apenas cruzaron la puerta comenzó a besarlo.
Se metieron en un cubículo besándose mientras con las manos recorrían el cuerpo del otro. Primero le desabrochó la blusa, botón por botón. Sacó sus pechos, dejándolos fuera del sostén de encaje negro que llevaba puesto. La apretó contra la pared, chupando una de los pezones mientras jugaba con el otro. Puso su cara entre medio y la llenó de besos desde la clavícula hasta los hombros. Le mordió los lóbulos de las orejas mientras ella acariciaba su erección por arriba del pantalón.
La dio vuelta, poniéndola de espaldas a él. Levantó su falda y corrió su ropa interior para pasar un dedo por su vagina. Elle arqueaba la espalda mientras Matt metía dos dedos en la vagina y con la otra mano estimulaba el clítoris.
Con sólo eso bastó para que él la abra más de piernas e introduzca su pene dentro. Lentamente, de la punta a la base. Al principio era lento pero decidido, y de a poco empezó a aumentar la velocidad. Ahora tenía una de sus manos agarrándola del cuello mientras que con la otra le tiraba suavemente del pelo. Comenzó a moverse más rápido para guiar el ritmo de las penetraciones.
La tomó de la cadera y empezó a moverse de arriba a abajo. El ritmo y la intensidad de las penetraciones iba variando pero nunca paraba. Pasaba su lengua por el cuello volviéndola loca. Estuvieron varios minutos así.
Sentía que estaba por explotar, sus pechos rebotaban a más no poder y ya veía venir un inminente orgasmo. Matt estalló dentro suyo, Elle apenas unos segundos más antes de arquear la espalda y sentir las contracciones de ese delicioso orgasmo.
La ayudó a acomodarse la ropa y ella a él antes de salir del baño que por suerte en ese momento estaba vacío (tampoco les importó mucho).
Salieron del aeropuerto, de buen humor, y fueron por la hamburguesa.
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Círculo de amigos
RomanceMatt; Elle, Harry y Florence son amigos desde la infancia. sus vidas tomaron rumbos diferentes pero mantienen la unión a pesar de todo.