♟️16: 15 de junio♟️

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Isabella Victoria Morgan

Paso un mes desde que aquel viaje tan catastrófico y desde el momento que tuvimos sexo conscientemente, jamás pensé que podría llegar a pasar, pero bueno, lo que tenía que pasar paso sin previo aviso.

Y como dirían en una película en concreta lo que queda en Miami queda en Miami.

Estaba completamente dormida, no quería levantarme ni nada por el estilo pero el feliz cumpleaños por parte de mí padre y mí madre me hicieron levantarme con una sonrisa de felicidad, aunque no me gustaba muchísimo festejar mí cumpleaños intentaba dar lo mejor de mí.

Ya tenía 22 años y podría hacer mí vida como yo quería aunque siendo sincera ya lo estaba haciendo, estoy orgullosa por saber quién soy y  lo que seré en un futuro lejano.

-Feliz cumpleaños mí niña - dice mí madre contenta, viene abrazarme cuando estoy sentada en la cama - tenemos una sorpresa para ti abajo, ¿O no Jonathan?

-Si - asiente mí padre para después acercarse y abrazarme - feliz cumpleaños

-Gracias a los dos - les sonrío todavía media dormida -Quiero ver la sorpresa

-Vamos - dice mí padre emocionado

-Déjenme vestirme y voy

Ellos salen de la habitación dejándome sola, me paro de la cama yendo directo hacia mí armario lleno de ropa. Agarro un vestido corto y blanco con unas sandalias de vestir, pero antes de cambiarme me baño tranquilamente y cuando ya estoy salgo me cambio para después ir hacia abajo.

Me quedo sorprendida encontrándome con un gran desayuno; jugo, café, tortitas, galletitas, jamón y queso, frutilla cortada al igual que la banana y la manzana. Y en el medio de la mesa puedo ver una caja color rosa, me acerco dudosa mirando a mí padres.

-¿Para mí?

-Si, es tu regalo. Espero que lo disfrutes - me dice mí padre con cariño, yo le sonrío agredecida

Abrí la caja con emoción encontrándome con unas llaves, me quedé mirando con cara de espectadoras y la voz de mí madre hizo que la observará de golpe

-¿Quieres ver de qué son esas llaves?

-Me imagino algo, pero es mejor ver lo que es antes que ilusionarse ¿No?

-Claramente. Primero desayuna y después vamos

-Bien

El desayuno paso entre risas y charlas de momentos de cuando era pequeña, la comida estaba riquísima, como muchísimo y tome mucho café frío que mí mamá había preparado.

Rato después ya estábamos los tres en su coche, me habían tapado los ojos y yo claramente no veía nada así que algo emocionada y asustada golpeaba el piso con mis sandalias.

-Ya llegamos, dejame ayudarte - me dice mí padre y yo bajo

Siento como me sacan lo que me habían puesto y cuando abro los ojos para poder enfocar mejor mí vista y acostumbrarme veo el edificio menos esperado.
Ya daba por hecho que era llaves de un departamento, pero no sabía cuál hasta ahora, ese mismo departamento era en el que vivía Alexander Collins, estoy más cerca de que mis padres creen y es algo emocionante.

-Tu piso es el 20, el más alto por supuesto.  Ya está amueblado, tiene todo lo que necesites.

Me seguí sorprendiéndo porque en ese mismo piso vivía Alexander, no puedo creerlo que mí padre haya comprado este departamento sin saber que nuestros supuesto enemigo estaba detrás de esas paredes, aún así lo disimulé cuando papá me miro a los ojos.

Juegos peligrosos [Completa] +18 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora