Capítulo 8: El brujo descubierto
**Ginrei**
Miro a la lejanía mientras los ecos de los gemidos de los brujos fornicando a mi alrededor me ensordecen brevemente haciéndome chasquear la lengua molesto. Abro los ojos cuando noto que un camarada tira de mi brazo desequilibrándome para intentar besarme y que me una a la orgía, pero le lanzo una descarga oscura haciéndole gruñir.
- ¿Qué demonios te pasa, Ginrei? Ah...entrégate al placer...únete al rito carnal ¡estamos alabando al príncipe oscuro! -
-Yo ya estoy mayor para esto- me aparto del círculo esquivando los cuerpos desnudos que gozan tirados en la hierba, todos entremezclados y cuando más me acerco a la mesa del banquete ubicada a pocos metros del círculo orgiástico, más me llegan los gemidos delirantes de mi nieto Tensa, al que veo sentado sobre el regazo del príncipe oscuro, de espaldas a él y de frente a mí, siendo elevado y bajado por el impulso de las caderas del demonio, metiendo y sacando esa enorme polla de su agujero, con Tensa jadeando con los ojos cerrados, salivando y aferrándose al cuello de su poseedor disfrutando del éxtasis que está recibiendo.
Aprieto los puños y cierro los ojos con dolor al recordar a mi hijo Sen en este momento. Agradezco en mi fuero interno que mi hijo haya reencarnado sin recordar su vida anterior, porque de otro modo, todo se habría torcido de nuevo peligrosamente....
-Ahora lo entiendo todo- jadeo volviendo mi vista atrás cuando escucho la voz de mi hijo Soujun al cual veo tras de mí, cubierto por una túnica negra y capucha, con una máscara negra cubriendo sus ojos.
-No pensé que serías capaz de permitir esto, padre-
- ¿Qué demonios haces aquí?? ¡si te descubren estás muerto! ¡insensato! -
-Sabes que no me quieren a mí, quieren a Kiba y no le cederé tan fácilmente. Padre...Sen ha vuelto a renacer...y ese demonio, esa apariencia...-
-Cállate y deja el pasado atrás, hijo. Tu hermano merece...una vida normal...-
- ¿Normal? ¿una vida de brujo sin poderes? Y para colmo le entregaste en brazos del demonio que no le correspondía ¡¡él no era el sacrificio de tu rey!
-No se le puede negar nada a un demonio ¡y menos al mío! -
-Estás tan enajenado con el rey oscuro que eres capaz de joder a tus hijos en su beneficio ¡padre!!!- le gruño mirándole amenazante y mi hijo invoca en su mano una katana poniendo el filo en mi garganta haciéndome estremecer.
-Estás loco, hijo...no te metas en esto, lo hago por el bien de Senbonzakura...-
-Yo sí que estoy actuando en defensa de mi hermano, el cual merece recuperar lo que es suyo igual que yo hice al reclamar a Kiba...-
-Métetelo de una vez en la cabeza, Soujun, no eres el dueño de ese lobo ¡¡Kiba te salvó por su propio interés!!! ¡¡eras su sacrificio!!! ¡¡él es el dueño de tu alma! -
- ¡Aún sigo vivo para contarlo!!! ¡¡para complacerlo!!!- abro los ojos cuando escucho a mi hijo jadear y veo que se lleva una mano a la boca, soltando la katana, lo que me deja margen para ir hacia él y sostenerlo.
-¡¡Hijo!!! ¿Qué te pasa? ¡Soujun!!-
-Ah...estoy...mareado...llevo...días así...- toco su frente comprobando el sudor frío que tiene y por instinto apoyo mi mano en su vientre abriendo los ojos de par en par.
-Oh hijo...es imposible...- veo como sus ojos se anegan de lágrimas antes de soltar una carcajada nerviosa mientras me mira con una expresión tan risueña que hacía siglos que no veía. Prácticamente desde que le arrebataron esa luz que tenía...sus sueños, sus deseos...todo....
ESTÁS LEYENDO
"MALDITOS"
FanfictionSueño tu boca cada anochecer. Recuerdo cada aliento, cada suspiro, cada sílaba susurrada de manera candente y cantarina. Tus labios destilando amargura, traición. El nacimiento de una maldición. Oscuras noches, lúgubres luces, cánticos de adoración...