"MALDITOS"

Capítulo 11: El brujo confuso

Capítulo 11: El brujo confuso

**Sen**

No veo nada, está todo negro. Siento como si anduviera a tientas por un espacio etéreo, confuso y desorientado, sintiendo mi corazón latir con tanta fuerza que me duele el pecho. Estoy completamente desnudo, ya que siento un súbito frío rodearme, por lo cual me abrazo a mí mismo hasta que noto como otros brazos ajenos a los míos, me agarran desde atrás, haciéndome jadear cuando me pego a un cuerpo caliente, tan tibio que mi nerviosismo desaparece.

-Senbonzakura...- escucho cómo una voz ronca susurra mi nombre y mi cuerpo se endurece ante el roce de sus grandes manos sobre mi piel. Ah, yo he sentido esto antes...este robusto cuerpo protegiéndome, esta sensación de plenitud, este deseo oscuro...por un hombre oscuro....

-Madre despierta...¡¡mamá! - abro los ojos de par en par al verme de frente con un furioso Tensa que me zarandea levemente. Sigo sentado en el suelo de su habitación...debí quedarme dormido tras lo ocurrido, tengo los músculos completamente entumecidos...

-Mamá ¿por qué estás desnudo? Y eso...- jadeo ruborizado cuando mi hijo señala el cerco húmedo que hay bajo mi culo al levantarme.

- ¿Te has orinado encima? -

- ¡Claro que no! ¿Cómo crees algo así? - Tensa frunce el ceño haciéndome carraspear. –Da igual, hijo ¿te encuentras bien? -

-Eso debería preguntártelo yo ¿Qué hora es? - veo como Tensa intenta acercarse a una de las ventanas hasta que me pongo delante para evitarlo.

- ¿Por qué has puesto muebles en medio? Así es imposible saber si es de día o de noche-

-Es una medida de precaución, Tensa, por ahora no me hagas más preguntas-

- ¿Precaución? - intento agarrar a mi hijo en su afán de quitar los muebles y veo como usa un hechizo para hacerlo desaparecer abriendo los ojos de par en par cuando los rayos del alba se filtran por los agujeros de la persiana.

- ¡Mamá!! ¡está amaneciendo!!! ¿Qué ha pasado? Oh no, el aquelarre...el abuelo tenía que venir a buscarme ¡¡qué demonios pasa, mamá!!-

-Shhh, intenta calmarte y te lo explicaré. - tomo su rostro mirándole con cariño pese a que él me observa furioso y sobre todo confuso. –Hijo...todo lo que hago es por tu bien. Si te perdiera...me moriría...-

-Madre ¿a qué viene esto ahora? Tú querías que me iniciara más que nadie ¡¡el príncipe se enfadará!!-

- ¡Que le den a ese demonio!! ¡¡no dejaré que te inicies con él!!-

- ¡No eres quien para decidir mi destino!!! ¡¡voy a ser el brujo que tú no pudiste ser! -

- ¡Tensa!!- jadeo cuando noto que mi cuerpo se ha quedado paralizado y caigo de rodillas viendo como mi hijo baja la mano que tenía levantada hacia mí antes de salir corriendo fuera de casa. Maldito...pequeño...atacar mágicamente a tu propia madre merece más que unos azotes....

Consigo rodar en el suelo, obligándome a chocarme contra la pared para desbloquear mi parálisis corporal a base de golpes y cuando empiezo a notar de nuevo sensibilidad en los músculos, cojo un yukata rápidamente para salir tras Tensa sabiendo en la dirección en la que ha ido. Oh dioses que llegue a tiempo...que ese demonio no siga ahí....

-Tensa...¡¡Tensa!!!- abro los ojos de par en par cuando encuentro a mi hijo totalmente paralizado viendo una escena dantesca en mitad del bosque. Todo el aquelarre congregado de anoche está aquí...pero todos sus miembros han sido descuartizados y desangrados de una forma tan cruel que aún puedo oler el aroma a carne putrefacta....