♯005 - ρяєραяαтινєѕ

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Metí a mi boca una porción de arroz

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Metí a mi boca una porción de arroz.

—Inosuke, no nos habías dicho que tenías una aprendiz—dijo uno de los amigos de Inosuke, el chico de hebras rojas.

Nos encontrábamos en la habitación. Yo, acostada, comiendo un plato lleno de arroz, e Inosuke y sus amigos sentados en las camas cercanas a mí, hablando.

—¡Especialmente no nos habías dicho que era ella!—exclamó Zenitsu, apuntando su dedo hacia mi con expresión confusa—Pensé que no la conocías—volvió a decir el rubio.

Continué comiendo sin hablar.

—¿Y qué tiene que tenga mi propia aprendiz?—dijo Inosuke como respuesta—Es exitosa. De los cientos espadachines de la prueba, sólo ella la pudo pasar. Está a otro nivel.

—¿Por esto actuabas tan extraño? ¿Porque estabas entrenando A UNA CHICA TAN BELLA, a nuestras espaldas?—exclamó Zenitsu indignado. El chico pelirrojo trató de calmarlo. Solté una pequeña risilla.

—Debe ser muy fuerte—dijo el otro chico con ilusión—Solo la has entrenado por uno o dos meses.

Continuaron hablando. Inosuke de vez en cuando soltaba un comentario egocéntrico, Zenitsu me halagaba constantemente, y el otro pelirrojo comentaba amablemente. Miré hacia ka ventana y por allí se acercaba mi cuervo Kasugai bicolor. Este se posó suavemente en la ventana. Lo tomé con cuidado y acaricié sus plumas. Este me susurró con apuro;

—Tu katana está siendo forjada—susurró el pajarraco—Será entregada en dos semanas.

Los tres chicos me miraron confusos, y devolví la mirada con el triple de confusión.

—¿Tu cuervo no te grita?—preguntó el colorado, mirando mi cuervo y luego a mí—Qué suerte que tienes. Te ahorrarás más de un dolor de cabeza.

Le sonreí.

Un par de horas más tarde, no necesitaba más descanso; pues mis heridas no eran de gravedad y cicatrizarían a los pocos días. Me encontraba caminando por el pasillo, con un par de toallas para tomar un baño, cuando me topé con el pelirrojo de antes.

—Hola de nuevo. No te he preguntado tu nombre, ¿cómo te llamas?—pregunté precipitada.

—Hola, yo tampoco te he preguntado el tuyo. Mi nombre es Tanjiro Kamado, es un gusto conocerte—me dedicó una cálida sonrisa.

—Mi nombre es Kotoha Matsuyama—le devolví la misma sonrisa.

—Me sorprende que Inosuke tenga una tsuguko. Él es algo... Ya sabes. Salvaje—dirigió su mirada al piso—Pero es un buen chico. ¿Asumo que tienen la misma edad?—preguntó.

—No. Soy un año menor, y para ser sincera, no había blandido una espada hasta que me comenzó a entrenar—solté una risilla—Confío en lo que me dices, Tanjiro. Nos vemos luego—lo saludé con la mano y este me devolvió el saludo.

𝙉𝙄𝙂𝙃𝙏𝙁𝘼𝙇𝙇 𝙏𝘼𝙇𝙆𝙎. ➪ Hashibira Inosuke X OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora