♯009 - ηιgнт

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-Inosuke, ¿podemos hablar?-oí la voz de la menor atrás mío en los pasillos. Sonaba seria, así que me volteé para verla a la cara.

-¿Qué?-

-Que si podemos hablar-repitió con seriedad.

-Eh.. Si, cla...--interrumpió mi respuesta

-En el techo al atardecer. No me dejes esperando-dijo antes de retirarse.

¿Qué le pasaba? ¿Y que era eso que quería discutir? ¿Por qué tan seria? Tenía un millón de preguntas, y me quedé un par de segundos allí parado antes de continuar con mi día.

Faltaba solo un día para que la herida de Kotoha sanara por completo, y podría volver a entrenar, lo cual me alivió un poco sabiendo que ya está mejor aunque últimamente hayamos tenido problemas raros porque le quise hacer algo y no quiso. Desde eso, no nos hablamos como antes y la mayor conversación hasta ahora fue hace semanas. Realmente extrañaba tener alguien a quién hablarle, pero no pensaba disculparme hasta que ella lo hiciese primero. Sonó cursi, espero Zenitsu no pueda leer mentes. No hice nada en todo el puto día hasta que el sol se estaba poniendo. Subí al techo donde se supone que me iba a encontrar con Kotoha, y allí estaba, sentada jugando con mechones de su propio pelo con nerviosismo. Las tejas del techo crujieron bajo mis pies y ella se dio vuelta con brusquedad, y me hizo una seña tímida para que me sentase.

Eso hice.

Hubo un silencio incómodo por un par de minutos. Había viento, hacía frío, podía predecir que venía el invierno.

-Entonces...-la pelirosa se dirijo hacia mí-¿Recuerdas la última vez que estuvimos juntos en el techo?-asentí, y después de tomar aire continuó-Pues... No... Quise decir, yo no estaba lista en ese momento, si no tengo una idea equivocada de lo que querías hacer. ¿Comprendes?

-Ah..-aclaré mi garganta-No creas nada extraño-miré para otro lado, avergonzado.

-Ya veo.-nos volvimos a callar por un buen rato, mirando las montañas, las nubes y el atardecer.

Nos echábamos miradas cada tanto, y un par de veces ellas se conectaban, dándome una sensación rara en el estómago.

-¿Estás triste?-le pregunté.

-¿Eh?-

-Que si estás triste-rechisté-Siento algo.

Ella asintió tímidamente.

-Perdón. Creí que no me ibas a hablar más por... rechazarte-gimoteó-¿Y si hacemos las paces?

-Trato-contesté, y le dirije una pequeña sonrisa.

Al rato, en la cena, nos sentamos juntos en la mesa junto a Tanjiro y Zenitsu, los cuales nos miraban (el rubio de manera más rara)

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Al rato, en la cena, nos sentamos juntos en la mesa junto a Tanjiro y Zenitsu, los cuales nos miraban (el rubio de manera más rara). En esos momentos, lo único que se escuchaba eran las voces de las otras personas del lugar. Por fin Tanjiro rompió aquel silencio incómodo diciendo lo siguiente.

𝙉𝙄𝙂𝙃𝙏𝙁𝘼𝙇𝙇 𝙏𝘼𝙇𝙆𝙎. ➪ Hashibira Inosuke X OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora