El casado casa quiere ☘ ChanIn

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Jeongin no habló cuando llegó a la casa, Chan tampoco dijo nada, ambas actitudes preocuparon a los padres de Chan, quienes los siguieron hasta su habitación a toda prisa.

—¿Qué ha pasado? —Hun fue el primero en preguntar con evidente confusión.

—Nada, no ha pasado nada, todo va bien —respondió Chan.

—Ustedes no se ven como si no hubiera pasado nada, ¿qué ha dicho el doctor? —esta vez Jaehyun tomó la palabra.

Ambos jóvenes suspiraron.

—Son gemelos —dijo finalmente Chan mientras Jeongin se perdía en el baño.

—Oh, eso es...

—No sé cómo voy a poder con dos hijos —dijo Chan derrotado, frotó su rostro, estaba muy frustrado, realmente quería sacar a Jeongin de su casa, amaba a sus padres, pero sabía que Hun podía ser insoportable cuando se lo proponía—. No tengo idea de cómo mantenerlos.

—No te preocupes, Chan, nosotros vamos a ayudarte en todo lo que podamos, no tienes que preocuparte por un techo y comida, esta es tu casa.

Pero no la de Jeongin, pensó.

—Lo sé, padre, pero... —Chan miró nerviosamente a Hun—. Estoy algo asustado.

—Es normal, cuando tu naciste pasé por lo mismo.

Jaehyun sonrió y acarició la cabeza de Chan.

—Será mejor que descansen por hoy, nosotros nos vamos —Chan asintió.

—Gracias por todo, padre, a ti también papá, sé que no he hecho lo que crees que es mejor, pero quiero que sepas que no me arrepiento de nada.

Hun frunció el entrecejo.

—Lo tengo claro.

Ambos padres salieron de la habitación cerrando la puerta.

—Fue un día agotador —dijo Jeongin saliendo del baño—. La cabeza me da muchas vueltas, Chan, ¿lo que hicimos estuvo bien?

—¿Hablas sobre casarnos, de decidir tenerlos? —Jeongin asintió.

—¡Por dios! No digas eso, Jeongin, es difícil, pero no me imaginó una vida donde no estés tú o esos pequeños —atrajo a Jeongin para acostarlo a su lado abrazándolo fuertemente—. Saldremos adelante, lo juro, también te sacaré de aquí.

—¿En serio? Podemos ir con mis padres, no es una casa tan grande como la tuya, pero es...

—No, Jeongin —lo cortó Chan—. Tus padres me odian, no cometeré el mismo error, cuando salgamos de aquí será porque conseguí algo para nosotros dos.

Jeongin sonrió.

—Está bien, por eso te amo tanto.

Le dio un pequeño beso en los labios que Chan correspondió gustoso, tocando de un lado a otro.

—Extrañaba esto —le dijo sonriendo.

—Yo también.