El espejo de Jisung guardaba un gran secreto, a un chico pelirosado que podía concederle cualquier deseo. Pero el deseo que Han quería, tenia consecuencias.
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«Esta es una adaptación, la historia original le pertenece a...
—Seungmin no debería volver... —dijo otra vez mientras miraba al mayor caminar hacia la preparatoria pero, como las veces anteriores, no hubo respuesta— Hyung...
—Deberías dejar de meterte en el asunto de Seungmin. —se detuvo y miró el espejo que llevaba en su bolso delantero para lograr visualizar a Felix en él—. Sólo debes obedecer...
Frunció un poco su ceño y cerró su bolsa al oír como le llamaban a lo lejos. Era Jisung y Hyunjin, quienes lo estaban esperando en la entrada de la preparatoria con una sonrisa sobre sus rostros. Parecían muy felices así que suponía que algo bueno había pasado por lo que, también sonrió para disimular un poco.
—Jeongin, adivina, adivina. —exclamó el castaño emocionado— Changbin nos invitó a una fiesta benéfica en su casa hoy por la noche, así que todos vamos a ir.
—¿Qué? —miró a Hyunjin quien estaba igual de emocionado— ¿Me viste cara de millonario?
—No debemos llevar dinero, Bin puso en la invitación que somos parte de los socios, esto para que no tengamos que dar dinero. —le extendió la invitación al rubio quien la tomó entre sus manos.
Era un papel dentro de un pequeño protector de cristal, las letras eran negras junto a decoraciones doradas, algo realmente formal y suponía caro. En ella venía escrita su nombre y junto a él un escrito que declaraba ser parte de los jefes, eso significaba un pase gratis.
—Vaya... Pero no tengo trajes en mi casa, creo que debería ir a comprar uno. —soltó una risa y miró a sus amigos otra vez.
—¿No tienes trajes? ¿Ni los de tu padre? —ante la pregunta de Jisung, se encogió un poco de hombros y negó con su cabeza— En ese caso deberíamos ir a tu casa a ayudarte, ¿No crees?
—No. —respondió inmediatamente— Mi casa está hecha un lío ahora mismo y hay mucho ruido, preferiría que no se molestaran... Lo lamento, chicos. —soltó una pequeña risa y agitó su cabello suavemente.
Jisung frunció un poco su ceño, jamás le había pedido a Jeongin ir a su casa porque nunca le pareció extraño. Sin embargo, habían sido amigos por más de tres años y era cierto que no conocía nada de él, apenas sabía su edad y nombre. Jamás habló de su familia, casa, gustos, nada.
—Vayamos juntos a comprar uno, de ahí nos vamos a tu casa. —Hyunjin miró al castaño y éste asintió con una sonrisa— Le mandaré un mensaje a Minho para que nos vea ahí ya que no vendrá a clases hoy.
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Jeongin soltó un largo suspiro mientras miraba los trajes, no veía alguna diferencia en ninguno a excepción de la corbata ya que algunos llevaban corbatín. Tomó cualquiera y comenzó a buscar a sus amigos. Mientras lo hacía, comenzó a pensar en Seungmin; "¿Qué tan diferente serían las cosas si él estuviera aquí?" "¿Qué y quién cambiaría?" Soltó otro suspiro largo.
Al visualizar a sus mejores amigos se detuvo un momento y miró a Hyunjin sonriendo junto a Jisung, parecía realmente divertirse jugando con un pequeño maniquí. Ellos dos siempre tuvieron una gran química, siempre reían y disfrutaban de la presencia ajena. Hizo una pequeña mueca. "¿Por qué todos tienen un amor que no es correspondido? Sería más fácil si no fuera así... Podrían ser completamente felices." Pensó.
