━ 𝐼 𝑑𝑜𝑛'𝑡 𝑙𝑖𝑘𝑒 ❦ 𝑆𝑡𝑟𝑎𝑦 𝐾𝑖𝑑𝑠

20

Seungmin entró por la puerta trasera del hogar, encontrándose con el pequeño Hyunsoo y la pequeña Hyein se encontraban lavando los platos sucios del resto. Frunció su ceño, ¿por qué le habían dejado hacer eso a unos niños?

—¡Seungminnie! —gritaron los gemelos al ver a su hermano mayor entrar.

Corrieron hacia él y lo abrazaron con vehemencia, casi haciéndolo caer. Una sonrisa se plasmó en sus labios al verlos tan felices, quería preguntarles qué habian hecho en el dia para que tanta felicidad albergara sus pequeños cuerpos.

—¿Comieron bien? —preguntó con algo de preocupación,

—¡Sí! —respondió Hyunsoo, el mayor por cinco minutos—. ¿Y hyung? ¿Almorzó con sus amigos?

—Algo así —mintió—. Me siento un poco mal del estómago...

—¿Quiere que le preparr algo para tomar? Un té caliente, seguro es caquita —dijo Hyein, acariciando la panza de Seungmin mientras sonreia—. ¡Un té para mi hermano mayor!

—¡Yo soy tu hermano mayor, Hyein!

—No, a ti te mintieron —espetó la pequeña, abrazando a Seungmin quien la alzó.

A veces, estos niños eran muy salvajes y ninguno dudaba en lanzarse arriba del otro con tal de pelear.... Jugar.

Pero no se llevaban mal, los dos eran impulsivos sí, pero Seungmin pensana que era cosa de todo niño pequeño. A veces decían groserías y Kim actuaba como cualquier persona mayor, al igual que cuando a Hyunsoo se le iba algun manotazo havia el cabello largo de su hermana y se lo tiraba con tal de molestarla. Era por eso, que siempre terminaba alzando a Hyein.

Y no, ella tampoco era una santa. Tenía sus travesuras, como aquella vez, que colocó gel para el cabello en la pasta dental de Hyunsoo. No pasó nada grave, pero la chica terminó con un castigo por parte de la directora del hogar.

Eran compañeros de aventuras, como de travesuras, pero estaban ahí cuando se necesitaban el uno al otro. Y lo mejor era, que ellos dos eztaban ahí cuando Seungmin se sentia demasiado mal.

Era la unica familia que le quedaba, los quería demasiado, a pesar de querer matarlos de vez en cuando.

—¿Dónde está Jihyo noona? —preguntó Kim, notando que no estaba en la sala, donde solia compartir tiempo con otros niños.

—Supongo que en su oficina... Minnie, ¿nos llevará al parque hoy?

—No lo sé... Tengo mucha tarea que hacer, ¿qué tal mañana?

—Pero yo quería ir contigo hoy... —dijo tristemente, abrazándolo y escondiendo su rostro en su cuello—. El dia esta nublado, pero hay sol, como los dias que te gusta... Me ilusioné solita —lloriqueo un poco y Seungmin le pego suavemente en la cabeza a Hyunsoo que se estaba burlando.

—Iremos al parque, pero Hyunsoo no vendrá por hacerse el malo —la pequeña saltó de la emoción, borrando toda clase de sonrisa en su hermano.

—¡No se vale! —lloriqueó él y esta vez, fue Hyein quien se burló.

Luego de dejar a sus hermanos con sus amigos del hogar, fue en busca de Jihyo, que, como dijo la pequeña, estaba sumida en su oficina con algunos papeles.

—¡Seungmin, ven aquí! Deja de esconderte —la directora sonrió y posó sus ojos sobre el chico—. ¿Vienes de la escuela, no?

—Si... Oh... Yo... Yo...

—¿Qué te pone nerviso Seung? ¿Necesitas algo, cariño?

—Yo... Hice amigos...

—¡Eso es realmente bueno!