🐉 21. El origen del mal

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[Febrero 21]

[Terraza]

– Izana... ¡¿Hablas en serio?! –cuestionó Kakuchō, preocupado.

Kisaki lo miró, molesto.

– ...Sí –contestó el albino.

El pelinegro frunció el ceño. El rubio miró de nuevo al chico de aretes Hanafuda.

– Izana, Mikey está en la palma de nuestras manos. Yo me encargaré de tu hermana y Botan –volteó y bajó del barandal, caminando.– La victoria está en nuestras manos.

– ...Kisaki –llamó. Aquel se detuvo.– No dejes que Asahi se entere. Es un Lóng, puede que sea más fuerte que todo Tenjiku junto si está molesto –lo miró.– Si se entera de que estás involucrado en lo que pase con Botan, te asesinará sin piedad.

– ...Bien.

Kisaki volvió la vista hacia adelante y caminó a la puerta, para entrar de nuevo al edificio.

[Santuario Musashi]

Esa noche se reunieron los miembros principales de la Primera División para una reunión de emergencia. Mikey se acercó al borde de las escaleras, mirándolos.

– ...Entonces, Mucho es el traidor...

– Sí –contestó Takemichi.–, y...en este enfrentamiento, la Primera División...recuperará a Koko, ¡Sin importar qué!

– ... ¡Muy bien! –miró al ex-Black Dragon.– ¡Inui! ¿Alguna idea...de cuándo nos atacará Tenjiku?

– ...Mañana, el 22 de Febrero...es el onceavo aniversario de los Black Dragon. Para Izana, quien desesperadamente idolatraba a Shinichirō-kun...mañana es un día especial.

– Entonces... ¿Mañana?

– ¡Sí! ¡Estoy seguro de eso!

– ¡Muy bien! ¡Reúnan a todos en ToMan! Tenemos que prepararnos para la pelea de mañana –volteó.– Esta será nuestra última reunión –dijo caminando.

– ¡¡¡Sí, señor!!! –gritaron los siete.

[Funk Jungle]

Kisaki subió aquellas escaleras hacia el palco, viendo a Asahi sentado en el sofá de siempre y bebiendo una botella de alcohol, conversando animadamente con otros chicos.

– Asahi –llamó.

– "Kun" –lo miró.– "Asahi-kun". Soy mayor que tú, cuatro-ojos.

– Como sea.

– Idiota –miró a todos.– Dennos un momento.

Todos los chicos se levantaron de los sofás y se dirigieron a las escaleras para bajar, dejando a solas a su líder con aquel chico de lentes. El rubio se adentró más, acercándose al mayor.

– ¿Tienes lo que te pedí?

– ¿Tienes mi dinero?

El chico suspiró, sacó de dentro de su chaqueta un sobre que se veía bastante gordo, y se lo extendió al pelinegro.

Asahi tomó aquel, lo abrió y contó el dinero, sonrió y lo dejó sobre la mesa, se agachó para sacar de debajo del sofá un estuche rojo, y lo dejó sobre la mesa también.

Red Dragon 🐉 Shinichirō SanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora