🐉 25. Reescribir la historia

298 33 1
                                    

[Septiembre 10, 1998]

Takemichi despertó, en su cama y con siete años; se incorporó en la cama sorprendido, observó el reloj para ver la fecha y hora, y saltó para salir corriendo al baño, para verse en el espejo y comprobar que estaba vivo y notando que realmente era un niño de nuevo. Con prisa, se cambió de ropa, colgó su mochila en sus hombros, y salió corriendo de casa.

[Residencia Sano]

Takemichi llegó a la casa de la familia Sano, respirando agitado de tanto correr, y acercó la mano para tocar el timbre, pero antes de hacerlo alguien lo interrumpió:

– ¡Oi!

Cuando miró a aquella persona, vio a un pequeño de cabello negro, ojos avellana y marcados colmillos, quien se acercaba con los puños apretados.

– ¡Te sacaré la mierda a golpes si es necesario!

– No puede ser... –murmuró sorprendido.

– ¡¿Ah?! ¡¿Qué demonios con esa mirada?!

– ... ¿Baji-kun...?

– ¡¡No está tratando de meterte en una pelea, ¿O sí?!!

Baji le dio un puñetazo al de ojos azules, haciéndolo caer.


– ¡¡Oye, Keisuke!! –intervino una voz femenina. El nombrado la miró.– ¡No pelees en frente de las casas de la gente! –lo regañó, señalándolo.


Takemichi miró a aquella niña, de cabello rubio y ojos miel.

– ¿Emma-chan...?


– Oh, Keisuke –llamó una voz masculina adulta, acercándose.– ¿Qué pasa contigo esta mañana? –se detuvo junto a la niña, colcando su mano cariñosamente en su cabeza.– Eres un dolor en el trasero.


Takemichi miró con sorpresa a aquel joven adulto de cabello y ojos negros, quien tenía un cigarrillo apagado entre sus labios.

«¡¿Ese es...Shinichirō-kun?!», pensó.


– ¿Hm? –exclamó, mirando a un lado.– ¡¡Haruchiyo!! –llamó.– Si estabas con este idiota, debiste detenerlo.


Takemichi miró a aquel niño que llegaba, de cabello rosa y ojos verdes de largas pestañas.


– Es molesto y no es de mi incumbencia. Más importante, ¿Dónde está Mikey?


«Sanzu...», pensó Hanagaki.


Shinichirō volteó la cabeza hacia su casa, y llamó a su hermano menor:

– ¡Oye, Manjirō! ¡¿Cuánto tiempo más planeas dormir?!


– Parece que hoy tenemos una mañana bastante ruidosa –comentó una voz femenina.


Takemichi miró a un lado, viendo a una joven de largo cabello castaño con mechones rojos y ojos verdes, quien venía con un niño de cabello negro y ojos también verdes.

«Tn-san...Asahi-kun...», pensó.


– Buenos días, preciosa –saludó Shinichirō, sonriendo.


– Buen día –sonrió Tn.

A su lado, sólo Asahi bostezó.


«Lo sabía. Salté en el tiempo, ¿No es así?»
, pensó con sorpresa.

– Como sea. ¿Quién eres? –cuestionó Baji.

Takemichi miró a aquellos seis que lo veían con curiosidad.

Red Dragon 🐉 Shinichirō SanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora